El primer caso de la nueva inspectora de homicidios, Briana Stone, tiene atemorizada a toda la ciudad de Londres, donde un asesino en serie esta siguiendo las macabras historias de Edgar Allan Poe. Para resolver el caso Birana tendrá que aprender a...
Ahora sí que lo tenía claro. Daniel no era el asesino, podía ver el miedo en sus ojos y eso no se podía fingir.
Cuando llegue a casa, abrí la puerta con cuidado para que Axel no se preocupara, pero le vi durmiendo en el sofá con la televisión encendida.
-Como para depender de este...- Dije quitándome los zapatos.
En la tele estaban echando "Plan de escape". No sé cuántas veces la habían echando ya en lo que llevábamos de mes, supongo que por eso se quedaría dormido. Apague la tele y deje que Axel durmiera a pierna suelta en el sofá.
A la mañana siguiente me desperté y tras ducharme, me puse una camiseta blanca con unos pantalones de color vino y unas botas negras.
Salí de mi cuarto y Axel seguía dormido en el sofá, así que decidí tirarle un cojín para despertarle.
-Despierta dormilón.
-Mmmm.... ¿Que hora es?
-La hora de levantarse. Venga arriba.- Dije mientras me preparaba el zumo.
-¿A qué hora llegaste anoche? No te oí llegar.
-Por que estabas completamente dormido.
-¿Mucho trabajo?
-Eh... si.
-Te haría más preguntas, pero estoy demasiado dormido todavía.
-Pues espabila.- Dije cogiendo mis cosas.- Me voy, tengo mucho trabajo.
-Vale...- Dijo mientras tomaba un sorbo de café.
Salí de casa y cogí el autobús hasta la comisaría. Pase por delante de la casa donde malvivía Daniel. La puerta seguía rota, espero que no se le ocurriera la brillante idea de bajar a arreglarla.
Llegue a la comisaría, los tres estaban sacando teorías sobre Daniel, otra vez.
-Buenos días.- Saludé.
-Buenos días, Bri.- Dijo JJ.
-Chicos, hoy tengo muchas cosas que hacer, así que voy a andar un poco por mi cuenta, ¿vale?- Dije con un poco de miedo por lo que me pudieran decir.
-Esta bien, no te preocupes.- Dijo Tyler sin dejar de mirar a la pizarra.
-Esta bien...
Reid y JJ me miraron extrañados, pero Tyler si siquiera me miro cuando me marchaba. Dejé mis cosas en la mesa y cogí lo que necesitaba para lo que tenía que hacer y me fui.
Antes de ir a donde tenía que ir, entre en un Starbucks y compre un café y un bollo de chocolate. Después, entré en la casa abandonada de Daniel.
-¿Daniel?- Dije al subir a la segunda planta.- ¿Estas por aquí?
-Si, estoy aquí.
Entré en la sala en la que encontré ayer a Daniel, y le vi sentado en un colchón viejo, leyendo su libro de Poe.
-Te he traído esto.- Dije acercándome y dándole la comida.
Él lo miro como si fuese lo más maravilloso del mundo, alargo las manos y cogió el café. Le dio un sorbo y sonrió.
-Nunca me había sentado tan bien un café.
-Daniel, siento tener que hacer esto, pero tengo que hacerte unas preguntas.
-Lo entiendo.
-Haber... ¿Sospechabas que algo de esto podía pasar?
-Que va.
-¿Conoces a alguien que pudiera hacerte algo así?
-No.- Dijo pegando un bocado al bollo.
Daniel parecía estar muy, muy nervioso. No paraba de mover la pierna derecha, apartaba la mirada y las manos le temblaban.
-¿Te drogas?
-¿Que? ¿Pero que pregunta es esa?
-Es que te veo muy nervioso y...
-¡Que yo no me drogo! ¡Ni bebo, ni fumo, ni he matado a nadie!- Gritó.
-Daniel, tranquilo.
-¡Dijiste que me ayudarías!
-Y quiero ayudarte, pero necesito que me cuentes la verdad.
Daniel respiro hondo y se pasó la mano por la mano.
-No. No me drogo.
-¿Has estado alguna vez en Sally's customes?
-Mmmm... creo que hace un año me compré allí mi disfraz para Halloween. Pero no he vuelto desde entonces.
En ese momento, Daniel se quitó la sudadera y entonces vi que tenía un tatuaje en el brazo izquierdo.
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-¿Desde cuando tienes ese tatuaje?
-Oh.- Lo miró.- Desde hace un par de años. Shopie y yo queríamos algo en común y ella acabo convenciéndome para hacernos un tatuaje, aunque a mi me dan miedo las agujas.- Rió nervioso.
-¿Shopie tiene el mismo?
-No el mismo, pero si la otra parte.
-¿Tenéis algún certificado de que os hicisteis el tatuaje hace dos años?
-Puede ser. Shopie guarda esa clase de cosas.
En ese momento se me ocurrió una idea: si Shopie certificaba que ese tatuaje tenía más de un año por lo menos, y Sally reconocía que el chico que le compro el traje no tenía ningún tatuaje, podría demostrar que Daniel es inocente.
-Daniel, tengo que irme.
-¿Ya? ¿A donde?
-A hablar con tu novia.
-¡Espera!- Me detuvo.- No le digas que estoy bien, ni siquiera que estoy aquí.
-¿Por que?
-Por que Shopie es capaz de venir a buscarme, y si viene, me arrestaran.
-Esta bien. Volveré a verte en cuanto tenga noticias.- Dije mientras me marchaba.
