On two wheels

•4•

En el momento exacto en el que entre al sótano que la cuadrilla del club utilizaba como centro de encuentros no pude evitar hacer una mueca viendo la sangre acumulada en el suelo, Declan había perdido los estribos una vez más.

—Te dije que no hicieras esto, —enojada plante los pies frente a él apuntándolo con el dedo.—¿No te había dicho que no hicieras esto? — Bufé molesta mirándolo con los ojos entrecerrados viendo a unos cuantos moteros entrar al lugar.— Y no empieces con que se merecía porque en estos momento tú,  —toque su pecho con mi dedo.— mereces más que eso.

Sostuve su mirada agresiva, hasta que el bajo la mirada y suspiro profundamente, rodee los ojos sabiendo que ahora venia la parte arrepentida de él la cual no llegaba a tragar ni un 20%

  — No quiero escuchar la mierda de lo siento cuando no lo haces. — saque una de las carpetas de la miles que tenia en el bolso pasándola a él.— ¿A quién tengo que explicarle esto? Muero de hambre y necesito terminar un jodido trabajo.

  —No lo dudo,  eres la jodida hija del perz. — palmeo mi espalda Hill con una radiante sonrisa.—  no seas tan dura con él muchacha sabes que tu padre es una roca dura de roer.

  —No soy dura con él, Hill. — miré a mi padre que me estaba mirando.— él no puede hacer todo por impulso y ya hablamos de eso uno de estos días va a matar a alguien y cuando este en la cárcel yo no podre sacar su viejo culo de ahí.

  —No exageres. — la gruesa y escalofriante voz de mi padre me hace sonreír.— solo se me fue la mano, ahora, bebé quiero que expliques esto, —levanto la carpeta.— a estos idiotas. Hill llama a los miembros.

***

Para decir verdad yo no  tenia problema en hablar en frente de otras personas pero esto era muy distinto  a lo que solía acostumbrar de los tarados de mis compañeros, ninguno parecía ser bueno y las miradas que me daban no era bastante buena. Nos encontrábamos reunidos en el sótano ¿Por qué tenia que ser el sótano? aunque esto no lucia como un sótano cualquiera en realidad estaba completamente remodelado, había mesas y sillas colocadas estratégicamente por todo el gran salón, una gran barra de bebidas y un televisor aunque probablemente nunca lo hayan encendido y el polvo sobre esta lo comprobaba, explotaba mis dedos mientras las palabras iban fluyendo de mi, explicando las variables y el presupuesto el cual estaba  completamente mal, la mayoría de ellos me miraban como si ni siquiera entendían lo que decía así que solamente resumí todo en —"ok, si no lo entienden con todas esas palabras solamente les diré que el presupuesto que Leonard había graficado... no era lo que entraba anualmente en el club, o sea que los estaba estafando."—suspiro encogiéndome de hombros escuchando como el sótano se llenaba de gritos y protesta.

  —¡Leonard es incapaz de hacer eso! — uno de los grandes hombros se levanto tirando la silla.— ¿Quién eres tú pequeña zorra para hablar así de Lonard?— grito molesto mientras yo entrecerraba los puños.

  —Vuelve a llamarla así y estas muerto. — Hunter se levanto tomándolo del cuello.

  —¡Pequeña zorra! — volvió a escupir aquel hombre y los puños de Hunter se estamparon  en su mandíbula.

  —Hunter deja al idiota. — hablo mi padre logrando que Hunter sonriera, sabía lo que vendría.— tú, maldito pedazo de mierda vuelves a referirte de mi hija de esa manera y yo mismo me encargare de que no veas la luz del sol nunca más.— Todo el lugar quedo en silencio, haciendo que las miradas pasaran de mi padre a mi haciéndome rodar los ojos con cansancio .

  —L...lo siento yo-yo no lo sabía. — escuche la voz del chico flaquear.

  —No soy una jodida zorra idiota.— hablé frustrada.— ahora recuerdo porque todos ustedes tienen mala fama.

Ignore todo lo que los demás decían para ir a sentarme en una de las mesas vacías  redondas tomando mi celular para ignorar la miradas de todos aquellos, mientras Declan explicaba todo los ingresos que Leonard había trasferido a una cuenta bancaria y los imbéciles que eran para no sospechar de él.

Probablemente yo me metería en más problemas si mi hermano se enterara que yo estaba en el club de papá y mucho más cuando Ares supiera toda la verdad ¿Qué iba a hacer? Aunque nunca le había mentido él solo se hizo la idea que el alcohólico marido de mi madre era mi padre y por el infierno que no lo era , apoye mi codo en la mesa usando mi mano como soporte para recargar mi rostro en el mirando a Declan discutir con los idiotas de este lugar, recorrí el lugar buscando el rostro que había visto un par de noches atrás y con el cual me había encontrado hoy, él como el resto de personas de este lugar vestía de negro aunque el lucia jodida mente apuesto, pantalones de mezclilla negros ajustados,  remera negra que se adhería a su torso un par de botas de combates bastante usadas y la infaltable chaqueta de cuero con el logo del club, él era todo lo que la palabra ardiente pudiera significar, su test blanca hacía resaltar esos grandes ojos y pestañas largas y aquellos dulces labios que había tenido la posibilidad de probar lo hacia jodida mente tentador,  en cambio su cabello era distinto a todos ellos que casi todos lo tenían un poco largo, el tenía un recorte bajo en los costados y el lunar que tenia sobre el ojo derecho le daba un toque único. Él era un total pecado. 

Él era el pecado que toda chica buena quería cometer, el pecado que toda chica mala tenia tras suyo y a quién engañaba hasta yo quería ser tocada por aquel pecado pero había algo que no me lo dejaría y ese impedimento tenía nombre, apellido y un carácter de mierda; Declan Jones.