Declan Jones tiene varios problemas mentales y entre ellos estaba qué detestaba que trataramos a las mujeres como objetos sexuales y su maldito caracter sobreprotector y créanme no era nada bueno mezclar esas dos cosas juntas, pero yo había puesto m...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Aún no podía descifrar aquellos ataques de intensidad que tenía cada vez que estaba con ella, al tocar o al rozar accidentalmente su piel y mucho menos podía averiguar porque no podía apartar la vista de ella, esto absolutamente nunca lo había sentido por nadie y era de esperarse yo simplemente me follaba a cuanta mujer quería sin sentir nada más que deseo sobre su cuerpo, pero también lo sentía por ella deseaba poder tenerla bajo mío pero sabía que si eso pasaba estaría perdido completa y absolutamente perdido por ella, si tan solo con unos besos me hacía pensar en estas cosas de "nosotros" no me imaginaba cuando la hiciera mía cosa que lo iba a hacer jodidamente que sí y estaba preparado para perderme y entregarme como nunca lo había hecho con ninguna mujer.
— ¿Tengo algo en la cara? — arqueo una de sus cejas bebiendo un largo trago de su refresco.
— Nada, — relamí mis labios sin apartar la vista de ella. — eres hermosa.
— ¿Eso te funciona con las demás? — rodó los ojos volviendo a darle un gran mordisco a su hamburguesa.
— A las demás no debía decirles mucho para tenerlas mamándome la polla. — solté sin ningún filtro arrepintiéndome al instante al ver un gesto de desagrado.
— Si crees que diciéndome cosas bonitas me tendrás chupándote la polla estás muy equivocado. — sus ojos no se apartaban de los míos. Ella estaba enojada. — Y probablemente deberías de irte con una de esas chicas que no necesitan de que hables para que te la estén mamando.
Dicho esto, dejo su hamburguesa sin terminar sobre la bandeja tiro un par de billetes en la mesa y se paró de esta dispuesta a irse ¿Qué mierda le pasaba? Fruncí el ceño levantándome detrás de ella saliendo del restaurante pisando sus talones.
— ¿Qué mierda te ocurre? — pregunté molesto tomándola del brazo cuando me acerque lo suficiente a ella.
— Eres un asqueroso, Mason. Suéltame. —ordenó estirando su brazo con fuerza de mi agarre.
— ¿Puedo saber por qué te pusiste así?
— Eres un idiota. — entrecerró los ojos y me apuntó con uno de sus dedos. — un completo idiota, Mason ¿Cómo reaccionarias si te digiera algo similar a eso? ¡No hace falta que le diga algo para que me hagan una mamada! ¡No soy una de las putas a las que tienes a tus pies cuando quieras! — Explotó golpeando mi pecho con sus puños y por lo que veía en sus ojos esto no se le pasaría muy rápido ¡Yo y mi puta boca! — Llévame a la casa de Jeremy.
—No lo voy a hacer. — solté el aire que no me había dado cuenta que sostenía. —Escúchame... Sé que no eres como las mujeres que acostumbro a tratar ni teasemejas a ellas... — la miré y no sabía porque iba a hacer esto nunca meintereso alguien para pedir disculpas por mi forma de ser. — soy así no mepuedo controlar y digo cosas que no debería, estuvo mal lo sé y si fuera yo élqué pasará por esto estaría tirando todo el bar ahora mismo. Lo siento, noquiero discutir contigo por algo tan idiota, nena. — mierda me estabaconvirtiendo en una niña fresa y no me gustaba, pero cuando una sonrisa seasomó en sus labios yo sabía que no me importaría que todos los hermanos delclub me vieran así. Sí estaba a merced de está endemoniada chica. — me gustasdemasiado Anne como para joder todo esto por mi puta boca
