A veces tan solo a veces me hubiera gustado no sé nacer en una familia normal, digo en esas que los padres tienen trabajos normales problemas conyugales de los que sean por falta de tiempo para salir una noche juntos o cosas por el estilo sin embargo yo tenía a mi padre; dueño de un club de motocicletas y a mi madre lo suficientemente loca y ostentosa que prácticamente siempre quiso manejarme la vida y aunque nunca deje que eso pasará ahora me encontraba en un estado en donde sentía que Declan y su maldito club estaban controlando mi vida de cierta forma.
El silencio reina la oficina, Declan me mira fijamente y Hunter a él, Hill porotro lado está mirando el ventanal sucio que da la vista inferior de la casa club, busco algo inteligente que decir para tratar de romper el incómodo silencio,pero absolutamente nada inteligente me viene a la cabeza más que los dulces labios de Mason ¿Qué me estaba pasando? Molesta conmigo misma pregunto lo que tanto quiero saber desde ya hace semanas
— ¿Qué es lo que está pasando? — escupo fuerte y molesta pero como si nadie me hubiera oído no hay respuestas. Ruedo los ojos bastante cansada ya de todo y me levantó con bastante fuerza que hace que la silla donde estaba sentada cae haciendo un ruido muy evidente.
Las miradas de los tres hombres son puestas en mí y por alguna extraña razón eso me molesta mucho más hasta el punto en donde sé que voy a explotar y perderla cordura —¿Qué carajos es lo que está pasando? — gritó molesta golpeando el escritorio para ser más dramática y me río de mi misma internamente. DeclanJones no parpadeará con algo tan simple como un berrinche de su estúpida hija que no hace más que meterse en problemas, entonces no me queda de otra más que recurrir a una cosa que odio hacer; causar lástima.
Y aunque piense en eso no puedo hacerlo estoy lo suficientemente enojada para tratar de fingir llorar en frente de estos despreciables sujetos, cuando probablemente mi mente empieza a pensar en unas treinta mil cosas a la vez y parezca que estoy a punto de volverme loca Declan habla haciéndome tener un escalofrío cuando escucho esas simples palabras —Déjeme sola con ella.— Es lo único que dice y con la seriedad que lo hace y cuando Hill ni Hunter dicen algo empiezo a creer que me he metido en un problema gigantesco sin ni siquiera hacer algo.
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On two wheels
RomanceDeclan Jones tiene varios problemas mentales y entre ellos estaba qué detestaba que trataramos a las mujeres como objetos sexuales y su maldito caracter sobreprotector y créanme no era nada bueno mezclar esas dos cosas juntas, pero yo había puesto m...