Llegué a ese lugar, me sentía impaciente, nerviosa. Esperé cerca de 3 minutos, aunque para mi parecieron ser más, en lo que me pasee de un lado a otro por la terraza. Mi manos sudaban pero hacía lo posible por secarlas en mi ropa, jugueteé con mi cola y di varios suspiros. Hasta que cuando comencé a desesperarme, él llegó.
Comenzó hablando de cosas "Inútiles" —según mi punto de vista— y luego me pidió perdón, diciendo que estaba arrepentido de sus acciones y que probablemente estaría mejor si nada de eso hubiera pasado, yo pensaba en explicarle la situación a la que me había enfrentado aquella vez y porqué había decidido aceptar eso.
Me sentí tentada por Vados, ella fue tan amable aquella vez y sentí la necesidad de aceptar lo que me decía. Pensaba en acumular la mayor cantidad de experiencia posible para usarla contra mis enemigos, eso sería más fácil para proteger la tierra. Así él me comprendería y llegaríamos a un acuerdo para hacer las pases.
Así de fácil, ¿no?
Pero nada de eso pasó, claramente era mentira. Me di cuenta cuando dejó de hablar y comenzó a reírse, escuché risas desde la puerta y luego me explicó que había perdido una apuesta.
En ese momento no estoy segura de lo que había pasado. Solo recuerdo el sentimiento de como me enfurecía. Luego reaccioné cuando estaba elevada casi en la atmosfera con mi transformación de demonio, con la ropa rasgada, exhausta y ¡Peleando con Bills! Este cuando me vio recuperar el conocimiento me exigió una explicación coherente para lo que estaba sucediendo.
Pero yo no recordaba nada de lo que me había pasado, solo tenía vagos recuerdos de haber estado con Trunks pero nada más que eso, luego mi hermana me explicó que me había enfurecido completamente por la situación y había destruido ciudades completas, asesinado gente en el transcurso de eso pero que también había había derrotado a todos lo que se me lanzaban encima para tratar de detenerme, ni siquiera había reconocido a mi papá, y que si no fuese por Bills y Wiss que estaban aquí no hubiera habido Tierra para nunca más.
En ese mismo momento me sentía mal, cuando recuperé la consciencia me sentía culpable. Estaba arrepentida, incluso se me había pasado por la cabeza disculparme, pero reaccioné antes de que pasara porque no había sido yo la que ocasionó todo el alboroto.
Me guardé mis disculpas y palabras de lamentos, como lo hacía con tantas otras cosas. No le dije a nadie lo que había sucedido en la escuela. Sin embargo, después de eso no volví a dirigirle la palabra a Trunks, lo evitaba a toda costa porque sentía que podría llegar hasta golpearlo. En cierto modo, escapaba de él.
Él tampoco mencionó nada de lo ocurrido, con nadie. Hablar o explicarse no le convenía puesto que Bills estaba muy enojado conmigo y me exigió aprender a controlar mi poder. Esto todos lo sabían porque había sido él quien me volvió "a la normalidad", poniendo una advertencia pública para más a futuro.
Con todo eso me sobran razones para no mirar a Trunks como una vil víctima de la situación y mucho menos como para tenerle lástima.
A los segundos de pensar en eso, Papá entró en el laboratorio seguido de Trunks.
—¡______!.—Dice Papá al verme, parecía emocionado.
—¿Tienes semillas del ermitaño?.— fue lo único que dije.
— ni siquiera vas a saludar, tuvimos que rescatarte de ese bastardo.— me regaña luego de dejarme una semilla en la mano.
Tragué.—Me da igual. —fue lo único que respondí y comencé a levantarme, buscaba mi ropa por todos lados.
—¿Por qué tu actitud cambió tanto?. —Me pregunta Papá, un poco enojado.
—¿Qué mi actitud cambió?.— me reí un poco por eso.— ¿Por qué dices eso?.— había encontrado un poco de ropa.
—¿Qué clase de entrenamiento llevaste a cabo?.— me ignora y observa como me deshacía de las partes rasgadas de mi ropa.
—Nada especial.— encontré mi reloj y rápidamente invoqué un traje de entrenamiento nuevo.— Con Wiss entrenaba y con Bills estrenaba mi nueva fuerza. —Sonreí de lado y seguí poniéndome los guantes.
—¿Cómo que nada especial?.— interrumpe Trunks.— ¡Superas a Papá y al Señor Goku por mucho,______!. —se le oía emocionado.
Papá gruñe entre dientes y luego grita. —¡Nadie pidió tu opinión, Trunks!
Él se quedó callado y agachó la cabeza, haciendo una mueca.
Yo sonreí de lado, eso me dio risa. Me levanté, aún me dolía la cabeza pero no soportaba las interrogantes de esos dos.
—Ya te dije, no te levantes.—reclama mi papá con molestia, tratando se acercarse a mí para hacer que me acueste de nuevo.
—Después hablamos. —lo ignoré y salí de ahí.
La cabeza me dolía demasiado, pero igual salí de ahí rápidamente. Estaba oscuro, parece que recién había anochecido. Traté de ubicarme, podía sentir el Ki de Bills y Wiss en el balcón, así que me fui a donde ellos estaban.
—Vaya sienta —Dice Wiss, el primero en notar mi presencia. —¿Cómo te sientes?.— estaba tomando café y comiendo dulces mientras Bills se atragantaba con comida a su lado.
—Bien. —Me senté aún lado de ellos y pedí algo para comer.
—Fue una buena pelea. —dice el dios sin dejar de lado su plato de comida.
me sorprendí.— Vaya, es un honor para mi humilde persona que el gran dios de la destrucción del universo 7, el Señor Bills lo diga.—digo burlándome un poco.
