Idol Secret

S t o p

- ¡A comer!

Después de haberlos puesto a acomodar la habitación, los llamó al comedor.

- Vamos Jungkook o mamá vendrá por nosotros.

Le extendió la mano y el menor observó su semblante tranquilo.

- ¿Qué?

Volteó su rostro al no sentir la mano del menor.

- N-Nada.

Tomó su mano como si no fuera gran cosa y bajó con él.

Juntos y de la mano, la madre de Taehyung los miró y sonrió con ternura, los hizo sentarse en el comedor para después darle los platos llenos de comida.

Se soltaron una vez estuvieron sentados.

¿Por que Taehyung lo trataba así? ¿Por que sus mejillas estaban rojas?

- Espero que te guste mi guisado Jungkook ah.

- Está delicioso Hanna, cocinas muy rico, supongo que Taehyung sabe cocinar.

El mencionado tosió haciendo reír a su madre.

- Pero que ni pelar un plátano sabe.

- ¡Mamá!

Hanna soltó carcajadas mientras Taehyung tapaba su cara con vergüenza y Jungkook sonreía lleno de ternura.

Parecía un chico avergonzado con su cita.

Espera... ¿Por que demonios sigo en esta casa?

- Vale, perdón, no sabía que a tú novio le importara tú sazón.

- ¿He?

Mi cara de poker no podía ser más evidente.

- Mamá... Vale, Hanna que te has pasado.

- Lo siento, no quise incomodarte.

Se lamentó la madre mirando al menor y haciendo una leve reverencia, para después sonreírle e invitarle a terminar su plato.

¿Su novio? ¿Que no es hetero?

Sonó el celular de Taehyung con la melodía de Jungji y Jungkook se tensó.

Por un momento había olvidado su otro yo, se había olvidado de las entrevistas, de los paparazzi, de las revistas, de las citas, de su representante, de su teléfono.

¡Por dios! Su teléfono ha de tener millones de llamadas perdidas.

Mientras Taehyung contestaba su teléfono, Jungkook checó el suyo y como era de esperarse... Se había quedado sin pila.

- Rayos.

Susurró.

- Jungkook, querido... ¿Estas bien?

- Si Hanna, no te preocupes, sólo se descargó mi teléfono.

- ¿Quieres un cargador? Puedo prestarte uno...

- No, no, así está bien, de todas formas... No soy alguien importante.

Hanna sonrió y estuvo platicando con el mientras Taehyung platicaba por teléfono con Jimin.

- Entonces... ¿Cómo se conocieron?

- De verdad te vas a reír de ésta historia.

- Bueno, si va a ser así... Vamos a la sala.

Taehyung subió a su habitación para tener una plática a amena con su amigo.

Se sentaron en el sofá y comenzó a contar su historia.

Pasaron los minutos y las risas y lamentos de su madre no se hicieron esperar, se disculpó por la actitud de su hijo con aquel pequeño y rió por cómo fue su historia.

- Entonces no llevan tanto tiempo.

- Si lo pones de ese modo... Casi no nos conocemos.

- ¿Quieres conocer a Vishi de pequeño?

- ¿Vishi?

La miró extrañado y ella solo sonrió de manera tierna mientras sacaba un álbum de fotos.

- Le puse así, por que fue un super héroe, como quería ser nuevo y original... Me dijo que le pusiera un nombre, pensé en muchos pero al final le pregunté su letra favorita del abecedario y me dijo que era la V, su abuela le cosió un traje de super héroe de color negro con la V marcada de plata, era un travieso pero muy lindo, siempre me cuidaba y me ayudaba en todo, hasta ahora me cuida, él es el hombre de la casa, siempre lo fue, siempre me trata como una reina, él era mi príncipe, al principio lo veía tierno, pero cuando maduro... Me di cuenta de que no necesitaba un hombre a mi lado, por que siempre lo tuve a él, lo tengo a él.

Una lágrima escapó de sus ojos y sonrió nostálgica, enseñando las primeras fotos, de bebé, de cinco años, de diez, de quince, de veinte.

Siempre con esa sonrisa tan peculiar, siempre con ese brillo en sus ojos.

Tomó la mano de la mujer y la apretó.

- Me hubiera encantado conocerlo desde pequeño.

Sonrió invadido por la nostalgia y por la ternura que emanaban esas fotos.