Los Hermanos Black.

capitulo 20.

Jack.

Cansado y un poco aturdido por el dia que ya paso me tumbo en mi cama tan comoda junto a mi querida esposa. Solo dos semanas han pasado dos semanas desde que Megan salió del hospital en el cual mi hija se quedó internada, admito que es un poco mas agotador de lo que imagine. Megan y yo nos hemos estado turnando para cuidar a Estefan, mientras ella esta cuidándolo yo voy a donde Adara y viceversa.

Hoy Adara tuvo una pequeña recaída, por ser prematura son muy comúnes sus problemas a la hora de respirar, pero en el dia de hoy su respiración fue tan irregular e inestable como el clima de hoy en dia; habían momentos en los que su respiración se detenía en lapsos de diez a quince segundos, gracias a su respirador y a las enfermeras que no paso a mayores, casi no dejaba que las enfermeras hicieran su trabajo.

Estefan ya dice otra clase de palabras que las de en un principio, gracias a Megan que dedica casi todo el tiempo que pasa con el a enseñarle palabras y ya dice "papa", claro esto lo hizo despues de aprender a decir palabras como "agua", "tete", "comida", "feo" y "tata" , esta ultima es como llama a Tamara de vez en cuando.

-Megan, Estefan duerme en la cuna – dije cuando sentí un diminuto cuerpo a mi lado.

-pero tengo mucho que no duermo con el – hace un puchero

-Megan ese mismo pretexto lo has usado toda la semana – trato de no derramar algo de baba por tener la cara contra la almohada.

-es que cuando estuve en la clínica no lo vi, durante ocho días no vi a mi pequeño en ningun momento del dia Jack, lo extrañe mucho – trata de excusarse.

-Megan – digo a modo de regaño.

-Jack, por favor – ruega.

-Megan yo no controlo la manera en como descanso y no he dormido bien gracias a ello ya que me da miedo lastimarlo mientras duermo – le explico .

-porfis, yo hare una muralla de almohadas y asi no lo lastimas – propuso con esperanzas de que le dijera que si.

-aghh, esta bien, pero ten cuidado por favor y si molesto o algo solo dime y me voy a dormir al comodo sofá de la sala – alzo un poco la cabeza para lograr ver la linda sonrisa que se extiende por sus labios.

-¿Cómo sabes que es comodo? – levanta una ceja interrogativa.

-¿recuerdas cuando estabas insoportable?.

-auch, dura y cruel verdad, pero bueno – asiente.

-bueno, me iba a dormir al sofá o en las tardes cuando tu no estas ese es mi lugar favorito para mis hermosas siestas reparadoras – ella comienza a construir la mini muralla de almohadas.

-es entendible – murmura por lo bajo y dijo un par de cosas mas que no logre escuchar ya que me quede dormido.

No se cuanto tiempo paso, pero sentí una cubierta tibia en mi cuerpo y la voz de Megan susurrando un "te amo".

A la mañana siguiente desperté con los dulces labios de mi esposa sobre los mios, mientras las aves cantaban a las afueras de mi ventana y entretanto un dulce olor inundaba mis fosas nasales, un momento ese olor huele a bebe y los labios de Megan están demasiado húmedos; de apoco abro los ojos y me encuentro con los hermosos ojos azules del gusanito, este estaba sobre mi babeándome toda la cara y absorbiendo mi nariz mientras por el televisor pasaban "little einsteins", una bella y hermosa caricatura donde un grupo de niños descubren cosas y en este episodio descubrían un grupo de aves , nótese mi sarcasmo en "bella y hermosa".

Me levanto lentamente y sin lastimar al señor "babeo a papa hasta que se despierte" lo pongo a un lado , la "muralla" que Megan había construido anoche estaba totalmente desecha, los cojines estaban desparramados y algunas almohadas se encontraban en el suelo; tome mi teléfono de la mesita de noche junto a la cama y me fije que eran las doce del medio dia, había dormido demasiado y al parecer Estefan igual ya que aun se encontraba con su pijama de osito.