Soy fragilidad, en ti.

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Siento a alguien quejarse, abro mis ojos y estoy mirando hacia una puerta que desconozco, recuerdo que no estoy en mi habitación si no en la de Levi, vuelvo a sentir esos quejidos, me doy la vuelta quedando muy cerca del cuerpo de él y noto que está llorando, a pesar de estar dormido sus lágrimas caen por sus mejillas. Me siento en la cama y acerco mis manos a su rostro para tratar de despertarlo de lo que lo aflige.

-Levi, oye, despierta. -susurro.

Pongo mi mano en su pecho y lo muevo un poco.

-Le-Levi. -digo un poco más fuerte.

Derrepente sus ojos se abren y su respiración se agita, se sienta sobre la cama bruscamente.

-¿Estás bien? -digo poniendo una mano en su hombro.

Él alza sus manos y las pone sobre mis mejillas, toca mi cabello y mis hombros, la poca luz de luna que entra por la habitación me deja ver sus ojos desesperados y un poco extraños.

-Estás viva. -dice en voz baja.
-S-si, lo estoy, ¿que pasa?
-...
-Levi, estabas llorando.
-Soñé que..
-¿Qué cosa?
-Que te ibas para siempre.
-Levi..

Acerco mi cuerpo a él y lo abrazo, deja caer su cabeza en mi hombro.

-Estoy aquí, contigo.
-Fue horrible..
-Tranquilo, fue solo un sueño.

Él aprieta fuerte mi cintura y respira hondo en mi cuello.

-Tranquilo. -digo acariciando su espalda.
-Lo siento.
-¿Porqué te disculpas?
-Te he despertado.
-Eso no importa, no te preocupes.

Suspira profundamente y suelta mi cuerpo, pongo una de mis manos en su mejilla y el cierra sus ojos.

-Volvamos a dormir. -digo.
-Si.

Deja caer su cuerpo en la cama y yo hago los mismo, su rostro queda frente al mío y muy cerca. Vuelvo a tomar su mano, respira profundamente, yo cierro mis ojos y acomodo mi cuerpo un poco más cerca de él, paso a tocar con mis pies los suyos, están fríos.

-Tu temperatura siempre ha sido cálida ¿sabes? -dice.
-Y la tuya es fría.

Decido poner mis pies sobre los suyos y pasarles mi calor, acerco sus manos a mi rostro y soplo en ellas.

-¿Qué haces? -dice.
-Te doy calor, lo necesitas.

Con mis dedos acaricio los huesos que sobresalen en sus manos mientras que los dedos de mis pies acarician los suyos lentamente. Su respiración se hizo más profunda, debo creer que se ha vuelto a dormir, alzó mi mano y tapo su espalda con la ropa de la cama.
En este momento y más que nunca quiero cuidar de él aunque sea de la manera más mínima, lo más probable es que mañana su rostro se vea como siempre pero sé mejor que nadie que es a quien quizás más le está afectando todo esto. Dejó de pensar y doy un pequeño beso en sus manos para poder volver a dormir.

Es de mañana y Levi sigue durmiendo, está boca arriba, tiene mi mano aún sujeta y puesta en su pecho, con delicadeza la saco y me siento sobre la cama.

-Debería ir a mi habitación. -susurro.

Me levanto de la cama intentando no hacer mucho ruido, tomo mis botas y mis correas para poder ponermelas e ir a mi habitación.

-¿A dónde vas?

Miro hacia atrás y él está aún con sus ojos cerrados pero con sus brazos puestos sobre su frente.

-Ahh, quería ir a mi habitación por un momento, necesito cambiar mi ropa y darme una baño.
-Hazlo aquí.
-¿Aquí?
-Ve por tus cosas y tomas un baño aquí.

Si amas de nuevo. [Levi Ackerman x Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora