capitulo 8

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BaekHyun se vio por cuarta vez en su pequeño espejo que tenía en la pared, movió un mechón y lo colocó bajo su oreja. Ahora iría a ver a ChanYeol nuevamente.

Ya llevaban varios días así. Para ser exactos llevaba 4 semanas y cada día ChanYeol se ponía más jodidamente sexy. BaekHyun cada vez se convencía de que ese hombre lo tenía jodido allá abajo y su mano ya no era suficiente, necesitaba que Chanyeol fuera el dueño de esa mano.

"Maldita Hyuna, te odio por tener razón en que ese hombre me gusta".

Se dio un último vistazo, salió de su habitación y se encaminó hacia el despacho de su hombr... ChanYeol. Al llegar tocó la puerta y escuchó ese hermoso juego de palabras de la voz más hermosa y sexy del mundo; "pase por favor".

Abrió la puerta y entró, viéndolo ahí sentado con toda su hermosura que lo dejaba sin aliento.

—Buenos días, ChanYeol. —Puso una sonrisa en su rostro al ver que el hombre lo vio.

—Hola, Baek. ¿Cómo estás? ¿Dormiste bien?

BaekHyun caminó hasta el escritorio y se sentó en su silla. "Sí, su silla".

Mmmm, no muy bien, pero sólo tuve un sueño corto.

—¿Qué tipo de sueño? —ChanYeol lo vio curioso.

—Iba corriendo, me tropezaba y caía de boca al suelo. Pegué un salto de muerte. —ChanYeol se carcajeó.

Sí, ellos ya habían mejorado su relación, ya no había tensión o silencios incómodos. BaekHyun se había dado cuenta que detrás de esa cara sexy y seria había un hombre divertido, amable y sexy, por segunda vez.

—No te burles, de verdad me asusté. —BaekHyun hizo un puchero.

ChanYeol lo miró y suspiró con calma—. Entonces el tratamiento si está funcionando.

—Supongo que para los sueños en donde veo a mis padres asesinados sí, pero los sustos todavía los tengo. —ChanYeol lo vio divertido, negando con la cabeza—. ¿Entonces qué haremos ahora?

—Como no has tenido un sueño de mal gusto supongo que cambiaremos de rutina. ¿No hay otra cosa de la que desees hablar?

BaekHyun lo miró un buen rato, la verdad no estaba preparado para profundizar en sus recuerdos verdaderos, aquellos realmente vividos. Él aún no quería hablar sobre el incidente de sus padres, mucho menos de sus pesares en ese lugar.

—No estoy preparado aún. —ChanYeol lo miró serio pero no con mirada dura, sólo comprensiva.

—De acuerdo, en ese caso creo que no hay nada por hacer hoy. Ve a algún taller de los que hacen.

BaekHyun hizo un puchero, el cual ChanYeol miró muy atentamente, incluso más de lo que debería. Baekhyun lo notó, por lo tanto quitó su puchero y se lamió el labio. Vio como el otro seguía su recorrido y a BaekHyun le gustó eso. Chanyeol se percató de la mirada que tenía BaekHyun. Carraspeó, decidió levantarse y acomodó su bata.

—Entonces nos vemos luego, Baek.

—¿Me estás echando? —BaekHyun puso cara de dolido.

—Claro que no, es sólo que tengo que hacer unas cosas.

—¿Qué cosas?

—Arreglar unos papeles por orden alfabético.

—¿Te puedo ayudar? —BaekHyun se emocionó con la idea.

Tenía que buscar una forma para quedarse ahí y pasar más tiempo con ChanYeol.

—¿Eh? —ChanYeol empezó a boquear, no se esperaba aquello. A BaekHyun le hizo gracia, ya que el doctor siempre tenía algo que decir—. Claro que sí, no hay problema.

Von Gott VerlassenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora