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Jackson y Ashley se dirigeron a la salida del restaurante y se despidieron del mesero que estaba en la entrada. No obstante, al estar fuera, Ashley le recordó que no había pagado la cuenta, a lo que él le respondió con un "No te preocupes". Al parecer tenía todo controlado y bien planeado.

Jackson condujo por las solitarias calles de Seúl hacia el siguiente destino mientras ella observaba por la ventana. Iban en silencio, pero uno agradable, ya sentían que no necesitaban hablar porque con solo su presencia era suficiente.

El momento en que Jackson se estacionó en una calle junto a una gran colina, ella lo miró confundida.

─Llegamos ─le avisó─. Bueno, casi ─dicho esto salió del auto y ella lo siguió.

Caminaron por la acera, él tomando la delantera, hasta que tuvieron que subir unas escaleras por la colina.

─¿A dónde vamos? ─Le preguntó ella ya cuando tenían cinco minutos subiendo y no llegaban al final de las escaleras.

─A la cima de la montaña Eungbong ─le dijo subiendo de espaldas para verla─. La vista es asombrosa.

─¿Sí? ─preguntó insegura y ya cansándose.

Jackson de pronto se tropezó y estuvo a punto de caerse si no fuera porque se agarró de la barandilla. Ashley estalló en carcajadas.

─Estoy bien, no te preocupes tanto ─le dijo con sarcasmo y comenzó a subir mirando por donde iba. Ella lo siguió aún riendo y él lo no pudo evitar sonreír ante el sonido de su risa.

Pasaron por un pequeño parque, subieron más escaleras, otras más, y más hasta que la luz de la calle ya no llegaba a dónde estaban y todo se veía oscuro. Jackson alumbró el camino con la linterna de su teléfono y la tomaba de la mano para que no se tropezara. Unos quince minutos después pasaron por un puente y Jackson se detuvo en la entrada de otro pequeño puente tambaleante hecho de madera. El camino estaba demasiado oscuro y no se podía ver lo que había al otro lado. Cuando Jackson le dijo que tenían que cruzarlo para llegar a la cima, ella se negó rotundamente.

─Podemos seguir por aquí ─señaló el puente hecho de concreto y que igual los dirigía a la cima.

─Es un atajo. Por aquí nos tomará diez minutos menos llegar ─le dijo y ella lo miró preocupada─. A mi también me dan miedo los puentes tambaleantes ─La tomó de la mano y la guió hacia el puente. Ella intentó evitar que la llevara, pero al pisarlo y sentir que este se movía, echó un pequeño grito, causando que él riera─. No pasará nada. Ya he pasado por aquí y es bastante fuerte.

No le quedó de otra que volver a confiar en él.

Caminaron cinco metros y llegaron al otro lado, y tan pronto pisaron suelo firme, ella soltó el aire que llevaba conteniendo todo el corto camino.

─¿Ves que no fue nada? ─le dijo él y ella sólo lo ignoró y tomó la delantera, pero como estaba muy oscuro no pudo ver por dónde iba así que se tropezó con una piedra y cayó al suelo, apoyándose en sus manos.

Jackson se asustó y rápidamente revisó que estuviera bien. La ayudó a ponerse de pie y alumbró sus manos, los dos vieron como estas estaban rapadas y rojizas. Él se las limpió con delicadeza e hizo una mueca, pues ahora se sentía culpable de que se haya hecho daño. Pero aún así quiso molestarla.

─Karma, por ignorarme ─Recibió un golpe en el pecho y rió al verla con el ceño fruncido y un puchero en los labios. Luego revisaron sus rodillas y por suerte estas estaban ilesas─. No tienes permitido soltar mi mano ─le dijo mientras la tomaba de la mano derecha con fuerza.

The Simple Things {Jackson Wang} |1era Temporada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora