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Para salir un poco de la incomodidad que el odio de Henry hacia el novio de Jade había provocado, Jackson decidió cambiar de tema.

─Ashley ─llamó la atención de la chica─, ¿qué fue lo primero que pensaste cuando te caiste? ─preguntó un poco divertido, causándole una sonrisa.

─Que me había partido en dos. Fue tan doloroso. Y aún lo es.

─Esa chica está loca. ¿Cómo se atrevió a empujarte? ─dijo Jade. Entonces Jackson la miró sorprendido.

─¿Te empujaron? ─preguntó sin creerlo y ella asintió─. ¿Cómo, qué. . ? Me dijiste que se había caído por accidente ─le reprochó a Henry.

─Quería ahorrar detalles.

─¿Pero cómo? ─le preguntó a Ashley─. ¿Por qué lo hizo?

─Me odia y pues tan sólo lo hizo.

¿Cómo podía decirlo como si no fuera nada? ¿Cómo podía Henry estar tan calmado cuando casi la matan? Jackson no entendía. Ashley pasó por una situación muy peligrosa pero actuaban como si no hubiera sido nada grave.

─Hablé con la escuela esta mañana. No la pueden expulsar porque están en exámenes y no viene al caso ya que pronto se termina la escuela ─dijo Henry y clavó uno de sus palillos en un pedazo de carne, molesto.

─¡¿Qué?! ─exclamó Jackson─. ¿No se preocupan por sus estudiantes o qué? Si hubiera sido yo los demando. ¡Pasó en la escuela! Tienen que hacerse responsables ─¿Se notaba lo furioso que estaba? No obstante, la víctima lo miraba riendo un poco─. ¿Cómo puedes reírte? ¡Hablo en serio!

─Calma, enano. No podemos hacer nada. Sus padres ya lo saben y ellos se encargarán de darle algún castigo ─le dijo Henry.

─De todos modos no lo veo justo. Espera. . . ¿Me llamaste enano? ─lo miró ofendido y Henry solo le sonrió.

Y pasaron unos minutos más entre Jackson quejándose porque le había llamado enano y porque no le hacían justicia a Ashley.

Media hora más tarde se encontraban de vuelta sentados en el sofá, reposando la comida. Y de pronto escucharon un quejido: Ashley quejándose del dolor.

─Necesito otra pastilla ─murmuró.

─Te tomaste una esta mañana y es después de cada ocho horas ─Jade le dijo y ella se quejó con los ojos aguados.

Los chicos la miraron con lástima, sin saber qué hacer por ella. No se podían imaginar lo doloroso que era. . . Y luego se le encendió el bombillo a Jackson.

─¿Quieres un masaje? ─le preguntó pero ella lo miró insegura─. Descuida, sé dar masajes y solía dárselos a mi madre ─Pero eso no fue suficiente para convencerla.

─La doctora dijo que te harían bien ─le dijo Henry a la chica.

─Pero de un profesional ─aclaró ella.

─No me brindaría a darte un masaje si no supiera ─Jackson la miró alzando las cejas y ella lo pensó.

Touché ─respondió y trató de ponerse de pie.

Jackson y Henry rápidamente la ayudaron a caminar hacia su habitación. Se acostó boca abajo utilizando sus brazos como almohada y Jackson se sentó a su lado. Henry se quedó de pie apoyado en una pared y los observó. Jackson se sonó los dedos e iba a comenzar su labor cuando la vio comenzar a subirse la sudadera para que pudiera masajear mejor la zona. Él tragó en seco ante la acción, pero luego se relajó al ver que tenía una blusa básica debajo.

The Simple Things {Jackson Wang} |1era Temporada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora