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Habían pasado cuatro días desde la pequeña reunión en casa de Henry y desde que Jade había roto con su novio. Ashley y ella se habían arreglado completamente, como si nada hubiera pasado.

Cuando la mayor volvía de la academia, las dos se ponían a cocinar y así que la menor aprendiera unos platos. Luego por la noche veían películas o dramas, y entrada más la noche mantenían una conversación seria y profunda, hablando de cosas pasadas y que no habían tenido la oportunidad de comentar. Además de que Jade le daba consejos a la menor sobre aspectos del amor, así tenía más experiencia secundaria cuando llegara su momento.

Lamentablemente Jade se había enfermado y caído en cama el fin de semana. Ashley cuidaba de ella, o eso intentaba, pero ya llevaba dos días en ello y estaba cansada. ¿Estaría mal decir que sólo sabía cuidar de ella misma? Por suerte Jade le decía qué hacer.

La segunda noche de estar enferma, Henry avisó que iría a visitarla con un acompañante especial. Era nada más ni nada menos que Jackson, quien al parecer cada vez que tenía tiempo libre prefería pasarlo con Henry y/o con la prima y la amiga.

Cuando llegaron a la casa saludaron a gritos, a lo que Ashley los regañó ya que Jade dormía.

─Serán idiotas ─los miró mal y ellos sonrieron apenados.

─Lo sentimos ─respondió Henry en un susurro─. ¿Puedo pasar a verla?

─Dije que está dormida.

Henry la ignoró y se adentró a los aposentos. Ashley suspiró, sabía que Henry era un caso perdido cuando le decían qué no hacer. Miró al rubio delante de ella, y este a ella.

─¿Cómo lo aguantas?

─Tú lo conoces más tiempo que yo. ¿Cómo lo aguantas tú? ─dijo divertido y ella sonrió.

─¿Quieres algo de tomar? ─le brindó mientras se dirigía a la cocina.

Jackson negó y se acomodó en el sofá: Apoyó su espalda en el espaldar y su brazo derecho sobre este. Ashley se dirigió al sofá con una taza de té y se sentó en el sofá, a un brazo de distancia -exactamente el de él-.

─¿Es orgánico? ─le preguntó sobre la bebida.

─No sé. Es verde ─respondió confundida.

Él dejó salir su típica risa chillona, aunque un poco más bajo que otras veces teniendo en cuenta que Jade no se encontraba bien.

─El orgánico es mucho mejor. Lo recomiendo ─le guiñó un ojo y ella casi se atraganta con el té. Luego lo miró con una risita y el rostro rojo─. ¿Qué pasa?

─Me quemé la boca ─mintió. Su té estaba casi tibio, pero era la única excusa que tuvo para ocultar que ese guiño, aunque inocente haya sido, le aceleró el corazón.

Jackson sonrió divertido.

─¿Cómo van las cosas con Jade? Digo, ¿sigue deprimida por el rompimiento?

─Hmm. Está mejor, o eso parece. Aunque sé que aún está triste, pero intenta olvidarse de él. Eso dice ─Se encogió de hombros y dejó el té sobre uno de los posavasos que tenía en la mesa de centro.

─¿Necesita que le presente a alguien?

─¿Qué? ─exclamó sorprendida─. Tan pronto no. ¿Y quién le presentarías?

─Conozco a cinco chicos solteros ─ladeó la cabeza hacia la derecha dándole una media sonrisa de complicidad.

─Espera ─levantó las manos y frunció el ceño─. ¿Got7? ─Él asintió─. ¿Cinco? Eso significa que dos, incluyendote, tienen novia ─Él paró de sonreir y la miró con nervios.

The Simple Things {Jackson Wang} |1era Temporada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora