Clara oscuridad©

Capítulo 17

ALICE'S POV

Cada vez tengo que soportar más y más presión. Me pregunto si alguna vez terminaremos con esto. Lo último que pretendía era tener yo la última palabra. Ahora me toco decidir a mí. Soy yo la que lleva los hilos de todo y lo que es aún peor: estoy poniendo en peligro a Ethan y a Tim. Esto no pinta bien. Amenazas, supervivencia, pérdida, dolor. Sacudo la cabeza intentando no pensar porque cuando no pienso es cuando mejor me salen las cosas, por raro que parezca. Me pregunto por qué Tim no me ha dejado tocar el grabado, ¿tendría algo la sangre?¿será del jiro? Tengo que darme prisa, o Tim se enfadará conmigo. Ethan entra por la puerta, cabizbajo. No parece el mismo, ya no tiene esa mota suya de superioridad. Se limita a dejar ropa doblada encima de mi cama y a decirme:

-La acabo de coger de tu casa

A lo que me limito a responder:

-Gracias

Sale al igual que ha entrado, dejándome helada, ¿tendrá algo entre manos? ¿Será por lo que ha confesado a Tim: lo que siente por mí?

Vuelvo a la realidad y me cambio de ropa, esta vez sí que encaja con mi personalidad, porque es mi ropa. Elijo una camiseta con un estampado de gato y unos leggings de color azul claro. Por fin ropa confortable. Empaqueto el resto de mis cosas en una mochila que encuentro en el armario y me apresuro a bajar y me encuentro con dos adolescentes que no parecen los mismos que conocí, los dos tienen expresiones de preocupación y tristeza. La puerta de la calle no está simplemente abierta, como ha dicho Tim, sino que está tirada en el suelo, la han arrancado de las bisagras. Dios. Aquí pasa algo grave. No me extraña que estén así. Me acerco hacia ellos y les guio hacia la puerta, ya que intuyo que deben de tener la misma sensación que yo cuando entré en mi casa. Por cierto...

-¿Podemos ir después a revisar mi casa? Ahora puedo ver a través de los glamours, así que, en mi antigua casa debe haber algo escrito, alguna nota, algo por lo que empezar.

-Sí, pero hay que ir con cuidado, a veces ver a través de una capa, ver cómo es todo en realidad, no es tan bueno como parece.-me explica Tim

-Vale. Gracias por acceder

Nos encaminamos hacia el ayuntamiento, Ethan ha puesto el GPS. No he pasado por alto el hecho de que aún no ha hablado, al menos conmigo. Tim parece entenderlo y se adelanta para que nosotros podamos hablar. Y decido tomar las riendas de la conversación:

-Oye, gracias por todo. No sé qué hacer para compensaros lo que estáis haciendo por mí.

-Ya. Es nuestro trabajo, no tienes que dar las gracias. Lo hacemos todos los días.

Y con eso me deja claro que no quiere hablar más, nunca ha sido tan tajante conmigo, siempre ha sido mezquino (al igual que yo) o dulce y amable. Por lo que creo que si quiere hablar de algo es mejor dejarle que empiece él, no me gusta forzar a la gente a hablar, cuando ellos no quieren contar sus problemas personales. Pero una vez más, doy en el clavo, aquí pasa algo.

ETHAN'S POV

Sé que ella lo ha escuchado todo. Lo tengo por seguro. He pasado el tiempo suficiente con ella como para conocerla. A lo largo de mi vida he conocido a mucha gente de este tipo, nada honesta. En parte me fastidia que no me diga de verdad que ha escuchado mi conversación a escondidas, pero por otra, no me gusta que me presionen, así que me gusta esa parte de ella. Estoy enfadado, estoy cabreado. No me gustan los fisgones y ella es de lo más cotilla. Pero es otra de las cosas que me gustan en ella. Cuando le he dado esa contestación, ha abierto mucho los ojos y se ha quedado mirándome un rato, y menos mal que no ha vuelto a abrir la boca. Normalmente siempre estoy cabreado, con todo. Me enfada todo, con ella es algo que desaparece. Cuando está a mi lado, es como si ese sentimiento de odio y en parte de culpa no existe. Por una vez en mi vida me siento bien. La examino cuando no se percata de que la estoy mirando. Me encanta mirarla a todas horas. Las dos veces que se ha quedado dormida en la catedral, me he colado a hurtadillas y la he observado. Se me escapa una sonrisa y además una risa parecida a una tos. Por fin logro que me preste atención y mi hermano está lo bastante lejos para no enterarse de nada

-Perdona por no hablarte. A veces sé que soy un poco borde. Es mi forma de ser. Pero estaba enfadado.

-Pero...

-Déjame terminar

-Está bien

-Estaba enfadado porque sé que has escuchado lo que le he dicho a Tim. También sé que tengo razón, por esta vez, así que no intentes negármelo

-Vale, está bien, lo reconozco. Sí, lo he escuchado. Tampoco tienes por qué enfadarte. Te estaba dando tiempo para que reconocieras también lo que sientes, ¡nunca expresas tus sentimientos! Yo he llorado, he reído, pero tú nunca lloras, y eso que no tienes padres; nunca ríes, reír de verdad. Pero creo que deberíamos dejar esto a un lado, tenemos que centrarnos en nuestra misión.

-¿Deberíamos?

-Cállate.-reprime exasperada.

-Chicos, hay que coger el autobús.-explica Tim

-Lo sé, vamos es esa línea –contesta ella- he ido más veces a Madrid capital.

Nos dirigimos hacia la parada del autobús en silencio.

¡Bueno! ¡Ethan por fin narra! Algunos secretos quedan al descubierto, demasiado deprisa para mi gusto, así que para el misterio de los que quieren a Alice me tomaré mi tiempo para descubrirlos.

Hasta el siguiente capítulo!

Vuestra alocada escritora