capitulo 18

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Capítulo 18:

- ¿Dónde está? – pregunté rendida

- Gracias – dijo él y se acercó para abrazarme. Me quedé anonada ante su reacción.

Se separó bruscamente de mi. 

- Lo… lo siento –dijo con vergüenza

- Solo fue un abrazo, Liam – dije

- Si, lo sé… - dijo él

- Bien, en marcha – dije, busqué un botiquín y al encontrarlo, puse la alarma de mi casa.

Le mandé un mensaje a mi hermano diciendo que me iría a la casa de Eleanor, obviamente, mentí.

Llegamos a la casa de Liam y nos dirigimos a su cuarto.

- ¿Cómo te sientes, Zayn? – preguntó Liam al entrar.

Su cuarto, era realmente normal y neutro, suelo de madera y pared color crema blanquecina, como las paredes del resto de su casa. Una cama con sabanas algo azuladas, una ventana que estaba cerrada. Una mesita de luz con un velador, prendido. Dentro de la cama se encontraba un chico con una mano en su abdomen. Su cabello era negro y tenía un pequeño mechón rubio. Sus ojos eran marrones oscuros. Su barba estaba semi-afeitada. Al parecer, tenía un buen físico.

El morocho, de nombre Zayn, me miró y luego, a Liam otra vez.

- Te dije que no trajeras paramédicos – dijo con ojos enojados.

Me miré a mi misma, traía un botiquín, digamos que parecía paramédica.

- Ella no es paramédica, es una… - me miró, lo miré y él volvió la vista a Zayn – es una conocida – dijo él y entrecerré los ojos.

- No confió Liam – dijo el castaño, en susurro

- Oigan – intervine – estoy aquí, ¿sí? 

- Es lo único que pude hacer, Zayn – dijo Liam, ignorando mi intervención – solo nos queda confiar

- Ni que fuera a matarlo – acoté 

Ambos me miraron con duda.

- Es solo una forma de decir, chicos – intervine otra vez.

- Bien, pero no toques donde no debas tocar – dijo el morocho

- No soy una perra, ¿sí? – aclaré

- Bien, bien – respondió él.

Le pedí que me muestre su herida. Tenía un tajo en el abdomen, no quise preguntar cómo demonios pasó. Pero en ese entonces, recordé lo que habló Liam por una llamada en el medio de una película.

*Flash Back*

- ¿Cómo está Zayn? – preguntó.

Muchas personas exclamaron “shh” y él solo gruñó por lo bajo.

- ¿Cómo que no mejora? – susurró él, pero pude escucharlo – Si, yo estoy bien – dijo luego - ¿Dónde están? – preguntó al instante y lo miré raro, solo que él no me miraba – pásame las coordenadas – dijo y lo miré aun más raro.

*Fin de Flash Back*

Comienzo a dudar cada vez más acerca de este chico. Es raro, y tiene comportamientos raros. Pero, creo que en el fondo de todo, es un buen chico. 

Comencé a coser su herida. Zayn cada tanto se quejaba. Por suerte pudimos terminar rápido y dejamos que él descansara. Liam y yo salimos del cuarto.

- Gracias, te debo una – dijo Liam, con cierta timidez.

- No me debes nada, no lo hice por ti – dije cerca.

- Lamento que no haya cena hoy – dijo él

- Será mejor que me vaya – dije, esquivando su disculpa – adiós.

Intenté irme pero él tomó mi brazo.

- Aunque sea déjame llevarte – dijo 

- No, Liam, estoy bien, iré sola – sentencié

- Pero es muy tarde y es mucho peligro que andes sola por la casa – dijo él, sin soltar mí brazo.

- ¿Y qué? Soy tu “conocida”, no veo por qué debas acompañarme, apenas te importo – dije y me solté de su agarre para salir por la puerta.

Esta vez, pude salir tranquilamente de ese apartamento, salí del edificio y caminé tranquilamente, pero con miedo hacia casa. Sentía que alguien me perseguía. Giré y divisé a un hombre vestido de negro. Mi corazón se aceleró. Caminé más rápido. Estaba a unas cuadras de mi casa, y salir corriendo no sería la mejor opción. El hombre era más rápido que yo, y cada vez estaba más cerca. Yo intentaba mover mis piernas lo más rápido pero disimulado que pudiera. Cuando sentí que los pasos de aquel hombre aumentaban, sin aviso alguno, comencé a correr. El frío de esa noche no me ayudaba en mucho, mi garganta se secaba. Doblé en la primera abertura que vi. Un callejón. Pero si tenía salida. Me resbalé con un charco de agua y caí mal con el pie. No podía caminar demasiado, dolía mucho. El hombre se acercó. Su aspecto era tenebroso. 

- ¿Estás asustada? – preguntó y yo me estremecí.

No respondí.

- No te haré daño – dijo - ¿de dónde venías?

- De... – enmudecí

No sabía que contestar, no tenía palabras. No sabía qué clase de tipo era ese. No sabía si era un buen hombre, pero no tenía aspecto de serlo. Y no le daría información de Liam. No sé quién es. Y tampoco sé si Liam lo conoce. Pero su aspecto… su rostro se me hacía conocido. Lo había visto antes. Estoy segura. Pero no recuerdo cuándo. Como si él pudiera leerme la mente, giró un poco su cabeza y pude ver algo que me confirmó de qué hombre se trataba. Aquel hombre de la plaza. 

*Flash back* 

Caminaba por el hermoso parque ubicado justo en el centro de la ciudad, a pocas cuadras de mi casa. Los niños corrían, saltaban, jugaban. Había parejas abrazadas, besándose. Había parejas también, con bebés en brazos. Todo era un hermoso paraíso con el atardecer de fondo. Pero note algo que me llamó más la atención; un hombre de negro sentado en una banca, mirando el mismo horizonte que yo. Me causó mucha intriga verle la cara, me acerqué. Por un momento pensé que era Payne el que estaba allí, pero no. Era un hombre de unos 40 años, que tenía algo con forma de pistola en su chaqueta. Este me miró y yo estremecí. Busqué algo que me ayudara a dar una explicación de por qué lo miraba, entonces vi unas llaves caídas en el suelo. Tuve una gran idea.

- ¿Esas llaves son suyas, señor? – pregunté amablemente 

El hombre giró completamente su rostro y pude apreciar su gran cicatriz que le atravesaba su mejilla derecha.

- No, niña – dijo él

….

Caminaba por la plaza, cuando de lejos volví a ver a ese hombre, sentado en la misma banca, me llamó mucho la atención, pero lo qua más me sorprendió fue ver a un chico, muy parecido a Liam, que se paraba en frente del hombre y le decía un par de cosas.

Esta vez no sería yo la que trate de llamar la atención de Liam, pasé en frente de ellos y Liam me miró con una mezcla de sorpresa y nerviosismo. Yo continué mi camino hasta la casa de Louis, si Liam me seguía, quizá se ponga celoso, y eso sería punto mío.

*Fin de flash back*

CriptonitaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora