Capítulo 2

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La alarma sonaba exactamente a las 7:00, mientras yo llevaba ya dos horas despierta dando vueltas en la cama. Me atrevería a decir que tenía mas nervios ese dia que el de las audiciones.
Me levanté de la cama, me lavé la cara y arreglé un poco mi apartamento.
Suerte que, aunque soy de Malaga, en estos momentos estaba viviendo en un piso en Madrid ya que me cogía mas cerca de la universidad y de mi trabajo. Aunque ambos por tema de vacaciones no las retomaba hasta dentro de tres meses, así podría dedicarme 100% al programa.
Mientras me tomaba el café y las tostadas que me habia preparado, me dispuse a contestar a los whatsaaps de mi familia y mis amigas. Para hacer un poco de tiempo llamé a Alba, mi mejor amiga.
-¡Capulla! -respondió eufórica mi amiga a la llamada -Que sepas que si estoy despierta a esta hora se únicamente por ti,¿como estás?
-Pues nerviosa tía, pero ansiosa por saber con quien me enfrentaré.
-Espero que te toque alguien con el que o con la que encajes mínimo. Por cierto. ¿Compraste aquello?
-¿El que? -pregunté sin tener ni idea a lo que se refería.
-El babero tía -me respondió riéndose
-¡Ay, idiota!, te dejo ya que tengo que empezar a preparme. Te llamo desde que salga del programa.
-Vale nena, suerte, te quiero -añadió seguidamente colgando el teléfono.

Dejé el móvil cargando encima de la mesa, y fui directamente a elegir la ropa, opte por un pantalón vaquero roto, unas converse y un top con una chaqueta de cuero roja. Decidí dejar el modelito nuevo que me había comprado para las batallas. Me maquillé sencilla y dejé mi pelo moreno suelto.
Una vez que ya estaba vestida, ordené un poco la habitación, cogí mi bolso y salí pitando hacia el coche.
Cuando llegué al plató de la voz, entré directamente a la habitación donde estaba todo mi equipo y los saludé a todos, aunque al ser todos mas mayores que yo, sentía que no encagaba para nada. Me senté en uno de los taburetes y me quedé hablando con el equipo hasta que llegó nuestra coach.
-Buenos dias chicos -levanté la cabeza y la vi entrando, llevaba un pantalón vaquero corto, una camiseta ancha y el pelo suelto. Su sonrisa inundaba todo el cuarto, y volví a mirarla embobada como había hecho en las audiciones. Se acercó a cada uno para darnos dos besos, y cuando llegó a mi ¡Boom!, su olor volvió a inundar todo mi cuerpo. No me acordaba de lo bien que olía hasta que se acercó a mi para saludarme.
-Bueno, antes que nada, muchísimas gracias a todos por estar en mi equipo -exclamó mientras se acomodaba en su silla en frente de todos nosotros -Bueno, como sabéis este trabajo no lo puedo hacer sola, y para ello, he traido a una persona, gran amigo mío, que me ayudará en todas las decisiones, ¿queréis saber quién es?
-¡Siiiiiii! -gritamos todos a la vez
-Pues para mi es un honor presentaros a... Pablo López -añadió dirigiendo sus manos en dirección a la puerta y acto seguido él entraba y se daban un abrazo.
Pablo se acercó a nosotros para saludarnos, y una vez que nos saludó a todos, se sentó al lado de Malú posando sus manos en su rodilla.
-Para mi es un honor poder ayudarte y echarte una mano en esto con tantos artistazos que veo por aquí- añadió el artista mirándonos a cada uno de nosotros -Y bueno, creo que va siendo hora de decir las parejas asignadas

Malú empezó a nombrar a cada pareja, y antes de decir mi nombre, levanto la vista del papel donde tenía los nombres, me buscó con la mirada, y una vez que me encontró, embozó una sonrisa.
-Carla -pronunció mientras yo la miraba tímidamente -tu pareja para esta batalla, con la que creo que haréis buena amistad es Rocío.

Rocío se levantó para abrazarme, y una vez que la localicé, me levanté y le correspondí el abrazo. Era una chica alta, rubia, muy delgada y que tenía unos veintiocho años. La verdad que a primera vista me daba buena vibra.
-La canción que hemos elegido pata vosotras, ya que creemos que os vendrá como anillo al dedo a ambas es "90 minutos" de India Martínez -ambas nos miramos y sonreimos conformes con la elección.

Malú y Pablo terminaron de asignar las parejas, y una vez que acabaron, empezamos los primeros ensayos. Básicamente para hacer la primera toma de contacto con la canción y entre cada pareja.
Cuando nos tocó a nosotras, nos acomodamos junto con Pablo y Malú y empezamos a asignar la parte de cada una y a hacer algunos arreglos para que ambas nos sintiésemos agusto con el tono y la música.
De repente, noté como estaba en una burbuja, totalmente hipnotizada, mirando únicamente por inercia a Malú mientras hablaba. Aún no me creía que la artista a la que admiraba desde los 15 años fuese mi coach, y que encima en persona me ganara aún más.
Rocío y yo salimos de la habitación una vez que terminamos de ensayar, y cuando estábamos fuera decidimos intercambiar números para así estar en contacto para los próximos ensayos.
Aprovechando que tenía el móvil encendido, decidí llamar a Alba en lo que llegaba al coche. De repente, note una mano en mi espalda...
-¡Malú! -me giré sorprendida mirándola fijamente.

Y,¿Si fuera ella? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora