Capítulo 26

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Narra Malú

Me quedé toda la noche pensando en todo lo que me había dicho Vero, y tenía razón. Estaba siendo una cobarde, como con todas mis relaciones. Hice caso a lo que me dijo, y esta vez lo haría sin ayuda de nadie, ni si quiera de Alba, como pasó la vez anterior.

En estos momentos de reflexión, de madrugada y con mis perras a mi lado, era cuando me daba cuenta de que en realidad lo estaba haciendo todo mal, y lo peor de todo es que le estaba haciendo daño a ella con tanto mareo, y con tantas idas y venidas, y definitivamente la estaba perdiendo, o peor aún, ya la había perdido... Entre tantos pensamientos, me dormí.

Me desperté con el teléfono sonando, miré la pantalla y aparecía el nombre de Sol.

-¿Si? -respondí cuando descolgué, aún con los ojos medio cerrados

-Malú tía, llevo toda la mañana enviándote mensajes -me dijo

-Perdón, anoche me costó conciliar el sueño, y como es de esperar, me levanté tarde -me excusé

-¿Pero estás bien? -preguntó preocupada, sin saber a que se debía eso

-Si, tranquila -hubo un pequeño silencio -Sol, necesito que vengas a mi casa, y me ayudes con una cosa

-¿Qué cosa? -volvió a preguntar

-Ven y te lo explico -dije

-Vale, en una hora o así estoy por allí -sonreí y después de un ¨gracias¨ por mi parte, colgué.

Cuando llegó, le conté lo que había hablado con Vero sobre ir al primer concierto de Carla en Barcelona, de sorpresa. Sol siempre me había apoyado en todo, pero en este caso la notaba bastante dudosa

-Malú, no sé... Creo que se te está yendo de las manos el tema de Carla. Deberías dejar todo así y no marearla más. Quizá el tiempo os vuelva a juntar.

-¡No Sol, joder! Quiero hacerlo, necesito demostrarle que en un día tan importante como ese, estoy con ella, igual que ella lo estuvo en Buenos Aires -la corté

-Pero Malú, hace más de un mes salió la foto de vosotras dándoos un beso, si ahora te ven allí...

-Da igual, lo haré de la forma más discreta posible. Quiero hacerlo sola, pero necesito tu ayuda -finalmente la convencí y aceptó.

Con su ayuda, buscamos en internet hoteles cerca del Teatro Apolo para alojarme allí esa noche. Quería que todo saliese bien, por lo que aprovechando que tenía contactos, contacté con uno de los seguritas que estarían esa noche en el teatro.

Narra Carla
Hoy era un día muy especial, pues daba mi primer concierto. Estaba muy emocionada, ya que después de tantos años, y de tanto esfuerzo, por fin iba a cumplir uno de mis mayores sueños. Además iban a estar presentes las personas más importantes de mi vida, como mi familia o mi mejor amiga.
Estaban muy orgullosos de mi, de todo lo que estaba consiguiendo en tan poco tiempo, y sobretodo de todo lo bonito que estaba por venir, ya que esto era solo el comienzo.

Un escalofrío recorrió mi cuerpo, cuando hice la prueba de sonido en el teatro junto a mi banda, y lo que estaba complemente vacío, se llenaría en apenas unas horas para mí, de personas que confiaron en mi para estar ahí esa noche. Además estaría todo lleno y eso hizo que me pusiera aún más nerviosa.

-¡Mamá! -dije gritando cuando vi a mi madre aparecer en el escenario

-¡Mi niña, qué feliz estoy! -acto seguido me abrazó

-Y yo mamá, y yo -me separé de ella y le di un beso en la mejilla -Gracias por estar aquí

-Gracias a ti por esta gran noche que nos vas a regalar, mi pequeña -se separó un poco de mi y siguió hablando -Tengo una sorpresa para ti

Y,¿Si fuera ella? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora