Y,¿Si fuera ella?

Capítulo 19

Hooola a toooodos. Lo siento muchísimo por el retraso. He empezado la Universidad, y apenas he tenido tiempo ni de meterme en wattpad. Prometo que no tardaré mucho en actualizar, para que no perdáis el ritmo de la novela. Por cierto, os recomiendo que os volváis a leer el capitulo anterior por si perdisteis un poco el hilo😘😘

Narra Carla
-¿Cantar contigo? -le pregunté nerviosa
-Si -me sonrió -¿No quieres?
-Si, claro que quiero, pero no sé si tú..-corté la frase
-A mí me encantaría Carla. De echo desde que te vi por primera vez sabía que quería cantar contigo
-¡Qué pelota eres! -me reí
-No, va en serio. ¿Quieres? -puso morritos
-Claro que sí. ¿Cómo iba a negarme a cantar con la reina del pop?
-Sabía que no te ibas a poder negar -hizo un gesto de chulería, a lo que yo le dije "Qué creído te lo tienes"
-¿Y, qué canción vamos a cantar? -volví a intervenir
-Ni un segundo, ¿te gusta? -me preguntó
-Me encanta -sonreí convencida. Realmente era una canción preciosa, la cual había tenido la suerte de cantar varias veces. Exactamente era una de mis canciones favoritas de Malú, y poder cantarla con ella iba a ser muy emotivo.

Me levanté de la cama, aún con la sábana envuelta en mi cuerpo, y me dirigí al baño para darme una ducha. Antes, fui hacia mi maleta y cogí algo de ropa interior. Me metí en la ducha, y mientras el agua caía por mi cuerpo pensaba en lo que iba a pasar esa noche, encima del escenario. Me sentía muy feliz de poder cantar con ella. Independientemente de lo que estuviese pasando entre nosotras en este momento, no dejaba de ser una de mis artistas favoritas, y una de las que más me ponía los pelos de punta cuando cantaba. 

Me giré asustada cuando noté unas manos rodeando mi cuerpo mojado. Ahí estaba ella, desnuda y mirándome con una pequeña sonrisa.

-Malú... -dije asustada
-Shhhh -me calló y acto seguido me besó. 

Se metió totalmente en la ducha, se colgó de mis caderas y la apoyé en la pared suavemente. Me reí al notar que se había estremecido cuando su cuerpo rozó la pared. Atacó mi boca y mi cuello sin piedad, mientras, yo agarraba delicadamente su pelo. Se bajó. cogió el gel, y empezó a jugar con él, esparciéndolo por mi cuerpo. Finalmente terminamos repitiendo lo que había sucedido esa noche. Entregándonos totalmente la una a la otra, y haciendo la mañana un poco más feliz.

-¡Joder! -suspiró -Ya no me hace falta ni el café de la mañana
-Estamos ya suficientemente despiertas -nos reímos
-Pero si que tengo un poco de hambre ¡eh! -dijo con voz de niña pequeña -¿Bajamos a desayunar?
-Claro -le sonreí

Salimos del baño y fuimos a vestirnos para bajar a desayunar. Ella se puso unas gafas de sol para pasar un poco desapercibida.

El buffet era bastante grande, y no se si era el hambre que tenía, pero todo tenía muy buena pinta. Elegimos unos croissants y un par de dulces para compartir, acompañado de un zumo de naranja.
Cuando terminamos, volvimos a la habitación. Malú me dijo que en unas horas tenía la prueba de sonido, y me preguntó si la quería acompañar, a lo que yo acepté encantada.

Malú me presentó a toda su banda, incluido su hermano. A muchos ya los conocía, pero aún así siempre era un gusto volver a coincidir con ellos. Me trataron super bien, y como una más de ellos en todo momento.
Llegó la prueba de sonido, y salí con Malú para ensayar la canción. Ella, con su moño y sus gafas de sol que tapaban la mitad de su rostro, intentado ocultar lo estresada y nerviosa que estaba, sin embargo no dejaba de sonreír en ningún momento. Lo que se formaba cuando cantábamos juntas era algo inigualable, y esto tan solo con el estadio vació. No me quería imaginar lo que pasaría cuando estuviese lleno.

Decidí irme para el camerino y esperar allí, mientras hablaba con Alba por vídeo llamada y así amenizaba un poco la tarde. Más tarde, me cambié de ropa para la actuación. Elegí una falda vaquera, con una camisa ceñida y unas botas de tacón.

Después de unas horas, Malú entro en el camerino, ya preparada, y con una botella de agua en la mano. Automáticamente bloquee el móvil, y me levanté para irme de allí y dejarla sola, pero me frenó, agarrándome de la mano

-Lo siento por mi mala hostia -se rio -Siempre, antes de un concierto suelo aislarme, para así poder estar bien concentrada y preparar bien la voz
-Lo se -reí flojito y me sonrojé
-¿Lo viste en una entrevista o qué?
-Claro -sonreí -Te recuerdo que me las he visto todas. 
-De verdad Carla. No sé donde has estado toda mi vida. Pero a día de hoy eres la única persona que me entiende. Ni mi propia banda entiende esto de mi ¨ritual¨-hizo el gesto de las comillas. No me dejó contestar, pues se abalanzó sobre mí, y me abrazó.

Volví a insistir en irme del camerino para que pudiese estar sola, pero no me dejó. Nos pasamos todo el tiempo que faltaba para que empezara el concierto besándonos.

Me encontraba a un lado del escenario, viéndola moverse de un lado del escenario a otro disfrutando de su gente. Me hacía muy feliz verla así. De vez en cuando miraba hacia donde estaba yo, y me dedicaba alguna que otra sonrisilla. 

Salí al escenario, después de la intro, donde hablaba de mí, de lo especial que soy, y de lo feliz que estaba por poder compartir esta canción conmigo.
Cada vez que nos mirábamos sentía una conexión entre nosotras, y además sentía que esta canción la habíamos hecho totalmente nuestra. Me cogió de la mano durante toda la actuación. Tal y como esperaba, con las luces y el público de fondo, la canción sonaba aún más bonita.

Cuando me bajé, volví de nuevo al camerino a esperarla allí, pero esta vez llamé a mis padres para contarles como había sido todo. Como había pasado unas horas antes, volvió a entrar cuando acabó el concierto, pero esta vez no tenía cara de agobiada y nerviosa, sino que estaba eufórica y con una sonrisa en su cara.

-El público se quedó con ganas de más -me acarició el pelo -Cuando te bajaste del escenario no pararon de gritar ¨¡Otra, otra!¨
-Hasta yo me quedé con ganas de más -me mordí el labio -Fue muy bonito

Me contó algunas cosas de las demás canciones, y después de recibir un mensaje, me miró y sonrió.

-Oye, mi banda y yo vamos a ir de cervezas y tapeo por aquí, ¿te vienes? -me preguntó -Es como otro ritual que solemos hacer después de los conciertos, pero te prometo que este no es tan aburrido como el primero
-Claro que me apetece -me reí

La esperé mientras se cambiaba de ropa. Acto seguido nos subimos en una furgoneta con todo su equipo, y fuimos hacia un local, donde no habia mucha gente.
Cogimos una mesa para todos, y pedimos algo para picar y cervezas.
A medida que pasaba el tiempo, el local se iba llenando más, pero se estaba bastante bien.
Solo hablaba cuando alguno me preguntaba algo, sobre mis estudios o sobre mi música, por lo demás solo escuchaba la conversación. Malú por su parte, no dejaba de comer y de beber. Aún no entiendo como en un cuerpo tan pequeñito, cabe tanta comida.
Por otra parte, durante toda la cena, su mano estuvo todo el tiempo en mi cintura.

-Yo también -le dije en el oído, en un tono elevado, ya que con el ruido que había apenas se escuchaba nada
-¿Eh? -me miró y preguntó confusa
-Que yo también te quiero, Malú.