Good feeling. / Jackson Wang.

Capítulo 17.

— No te comprendo Wang.— me separé de él y reí, debía estar bromeando.

— No, yo tampoco lo hago, pero ¿No es eso lo bonito de la vida? Nunca terminamos de conocer a alguien.— Sonrió un poco, sabía que quería hacerme reír, sólo sonreí.

— No es mi caso, no me lo parece tan bonito después de días de botes de helado y Netflix, así no juego.— reímos un poco.

— ¿Entonces?— me tomó una mano, la miré por unos segundos, estaba a nada de contestar, pero el auto de JB se estacionó enfrente de dónde estabamos.

— No lo sé, debo pensarlo.— le sonreí mientras caminaba al auto de JB, me sonrió divertido, me gustaba dejarlo con dudas.

— ¡Espero tu respuesta cuándo estés lista!— gritó antes de que pudiera subirme al coche, asentí con la cabeza y entré al auto.

Sabía perfectamente que JB se dedicaría a hacerme miles de preguntas en cuanto subiera al auto, así que antes que empezara, subí el vidrio de la ventana para que Jackson no pudiera oírnos.

— ¿Y si me explicas qué está pasando? ¿Porqué estaban tan cerca? ¿No lo odiabas? ¿Aún recuerdas lo que te hizo cierto? ¿Vas a volver a caer? ¿Porqué no mejor...— decidí interrumpirlo, si no lo hacía, nunca se callaría.

— Vamos una por una JB, pero puedo resumirlo.— me coloqué el cinturón de seguridad y él arranco el coche, — Me pidió una oportunidad JB, una de verdad.— mi estómago estaba hecho vueltas, era la más feliz del mundo en ese momento.

JB frenó de golpe, me miró confundido, — ¿Una oportunidad? Estás loca si le dijiste que sí.— negó con la cabeza y siguió manejando.

— Aún no le he dicho nada hermano, tranquilo, sé que él no está bien, está pasando por algo que le hace mal, no quiero saber de qué se trata, sería algo como... ponerle limón a la herida.— cerré un poco mis ojos guardando la sensación del beso, mordí un poco mi labio.

— Ally, no quiero que te hagan daño, ¿Lo sabes cierto?— asentí un poco con la cabeza, lo miré y le sonreí, — Te apoyaré en la decisión que tomes, pero piensa bien las cosas Alanna, a veces debes pensar con el cerebro y no con el corazón.— me tomó la mano suavemente y la tomé con un poco de fuerza, él sonrió y soltamos nuestras manos.

Llegamos a casa y entramos, JB no dudó ni un segundo en acostarse en la cama, parecía verdaderamente cansado.

— ¿Quieres un café? — pregunté y asintió varias veces con la cabeza —Bien, iré por tu café, quédate aquí si gustas.—

Bajé las escaleras paralizada por la sensación, en serio quería a Jackson, y aunque quería decirle que sí, temía también a hacerlo, me daba miedo que lo que lo atormentaba lo afectara de nuevo, y me volviera a tratar mal, me confundía.

Hice los dos cafés, el mío y el de JB, subí y lo miré aún tirado en la cama con su celular.

— Aquí están — se sentó para poder tomarlo, yo también me senté.

— Muchas gracias hermana, te lo agradezco bastante — le dió un pequeño sorbo al café, era un niño encantador — ¿Y bien, qué piensas contestarle? —

— Realmente no lo sé.

— Piénsalo bien, porfavor, no digo que le digas que no, pero si le dices que sí, no quiero que aguantes nada de las cosas que Jackson pueda hacerte, es mi mejor amigo, pero lo conozco más que nadie en el mundo, créeme. — sonreí, Jaebum realmente me procuraba muchísimo, y eso me encantaba.

— Lo sé JB, pero no sé que es lo que debo hacer.

— Mira, hermanita. Ésto es algo que quisiste desde que lo conociste, dale la oportunidad, pero no quiero que te haga daño, prométeme que no le aguantarás nada.

—Tómalo como un hecho hermano.

Noté que JB se recargaba un poco en el respaldo de la cama y se quedaba un poco dormido, no sabía si despertarlo, así que lo deje dormir, y bajé al sillón para acostarme.

¿Qué debía decirle?

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Me levanté al día siguiente y noté que JB ya estaba preparando el desayuno, sí, mi mejor amigo era un encanto.

— Buenos días pequeña. — sonrió desde la cocina.

— Buenos días.— logré decir, aún seguía adormilada.

— Te he preparado hotcakes, tus favoritos, anda, levántate.— se dirigió a la mesa con los platos.

La comida se veía increíble, JB era un cocinero nato, me encantaba ser su mejor amiga.

Tomé un bocado y lo metí a mi boca, eran deliciosos, tal y como lo esperaba.

— Bien, yo me tengo que ir, pero disfruta tu desayuno. — tomó sus cosas y caminó hacia mí para darme un beso en la cabeza, yo aún masticaba el pedazo de hotcake.

— Bye bye, Jaebum. — escuché como cerraba la puerta.

Terminé mi desayuno y levanté mis cosas, tomé un baño y me arreglé, debía ver a Jackson para darle una respuesta.

Llamé su teléfono y le pedí que nos viéramos en un café cercano, rápidamente me dijo que sí.

Llegué al café y noté que el pelirrubio ya estaba sentado en una mesa, me acerqué y ambos sonreímos, no dudó ni tres segundos en levantarse para arrimar un poco la silla donde me sentaría.

— Me da gusto que vinieras. — sonrió.

— A mi también.— dije y miré la carta, desviando mi mirada con nervios.

— Oh, he pedido por tí, té chai latte helado, tu favorito. — dijo orgulloso, lo miré y le regalé una sonrisa, esos pequeños detalles hacían que lo quisiera más.

— Gracias Jack.— cerré la carta y la puse sobre la mesa, noté que me miraba atento, sabía que quería. — Creo que tengo una respuesta.—

— Respetaré completamente tu decisión, sea la que sea. —

Lo miré unos segundos antes de poder mover mis labios para poder darle una respuesta.

— Creo... Creo que podemos intentarlo.

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Niñas bellas, lamento haber tardado siglos para actualizar, pero he estado ocupada por exámenes, ya estoy de vacaciones, así que soy suya completamente.

Gracias a todas las que siguen leeyendo la novela, realmente significa mucho para mí.

Ahora sí viene lo chido, así que agarrense bien.

Les mando un beso giganteeeee.

Mariana.