Capitulo 26

373 61 16
                                    

He amado a Kanda desde que lo conocí en el colegio, mi familia solo está compuesta por mi hermano mayor y yo, el cual se convirtió en un profesor muy respetado en un internado de mucho prestigio, se llevaba también con el dueño que me pude matricular en el mismo colegio para ricos que Kanda y Lavi, y así los conocí.

Al principio Kanda me parecía un demonio y me gustaba más estar con Lavi, pero un día vi a Kanda sonreír dulcemente y gracias a esa expresión me enamoré de él.

Por aquel entonces no sabía que esas sonrisas tenían ya un dueño, y ese era el hijo de Nea, al que todos llamaban A-chan.

Mentiría si dijera que me caía bien, por aquel entonces lo veía como un enemigo que me había quitado la posibilidad de vivir un romance con Kanda.

Pero al poco tiempo lo entendí, Kanda solo era así con el, y si no fuera por el yo nunca hubiera visto su sonrisa y me hubiera enamorado de el. así que acepte estar en la sombra, y nunca acercarme a Kanda mientras esa relación durase.

Y cuando ya planeaba rendirme de la nada A-chan desapareció, mentiría si dijera que no me alegre, en ese momento era una niña, y solo pensaba en mi misma, ignorando el sufrimiento de los que me rodeaban, incluso de la persona que afirmaba a mar, yo solo pensé que tenia el camino libra hacia Kanda y que no podía desaprovecharlo.

Pero siempre estaba ese molesto de Alma de por medio, el se había dado cuenta que yo no veía la desaparición de a A-chan con los mismos ojos, y por todos los medios intento alejarme de Kanda, y lo consiguió, por aquel entonces lo odiaba, y para que mentir le sigo odiando, pero le doy la razón, mi comportamiento por aquella época fue horrible, me odio a mi misma por ello, pero esa no era razón para que me lo recordara cada dos por tres que nos veíamos siendo ya mayor.

Aunque después de lo que he echo creo que me lo merezco.

Cuando llego ese chico al internado me sorprendí de su gran parecido con A-chan, pero estaba segura de que no supondría ninguna amenaza, había estado cerca de Kanda desde que entramos, y no se había enamorado de nadie manteniéndose fiel al recuerdo de A-chan diciendo que seguro estaba vivo y esas cosas. 

Pero todo empezó a cambiar lo miraba desde lejos, lo protegía de cualquier cosa, y le dedico un día una mirada tierna, la misma que me enamoro, la que no había vuelto a ver desde que A-chan desapareció.

Me dije a mi misma que tenía que hacer algo, me auto convencí que lo que estaba haciendo no era malo, que lo único que estaba haciendo era proteger el lugar de A-chan.

Lo quise desprestigiar, pero no todo salió como deseaba, Kanda lo protegió y amenazó con matar a aquel que se atreviera a hacerle daño. Fue entonces cuando decidí llamarla, a la madre de A-chan, creí que ella protegería el lugar de su hijo al lado de Kanda y así que me cogiera cariño para cuando yo quisiera ocuparlo.

Lo que me extraño fue que me pidiera una descripción detallada de Allen, y cuando le conté lo de la cicatriz en el ojo, se hoyo un golpe y luego tardo en contestar, insistió en que le enviara una foto, no lo vi raro, y lo hice, se puede haber sido mas estúpida.

Cuando lo hice me pidió que robara las pertenencias de varias personas con mucho dinero, algo no muy raro aquí, y que las escondiera en mi cuarto, el cual gracias al poder de mi hermano nadie entraba, era además un cuarto para dos, pero solo lo ocupaba yo, tendría mucho sitio donde esconderlo y sin la preocupación de que alguien lo encontrara.  

Cuando lo estaba haciendo planee también robar en el cuarto de Allen, eso fue dos días antes de las inspecciones, planeaba robarle a Kanda un anillo que le regalo su madre hace mucho tiempo, y que para el es muy preciado, pero cuando entre y rebusque los cajones buscando el anillo encontré una pulsera de plata, al mirar la inscripción me asuste, salí de allí sin el anillo por culpa del shock. Cuando se lo conté a la madre de A-chan, me dijo quien pusiera todo lo robado en ese mismo lugar donde había visto la pulsera en cuanto empezaran la inspección.

Y así lo hice, cuando le oí a mi hermano decir por teléfono que empezarían al día siguiente con las inspecciones me fui con todo lo robado al cuarto de Allen y Kanda, cuando entre al cuarto de noche no estaba muy convencida de esto, pero cuando me fije en como estaban dormidos, uno abrazando al otro, me hirvió la sangre y lo coloque todo en el lugar donde vi la pulsera y me fui corriendo.

Al día siguiente paso todo.

cuando había pasado dos días después de que echaran a Allen del internado, la madre de A-chan me llamo, me dijo que había visto a Allen y había empezado a castigarlo por fingir ser su hijo, a pesar de que yo le dije que el nunca había mencionado tal cosa no me creyó.

Por lo que se le torturaron durante varios días, no se exactamente lo que le hicieron, solo se que ella me llamo para que recuperara el móvil del chico y así lo hice, junto con su caja de pastillas, cuando salia del centro me cruce con alguien y no me pare al ver quien era, solo sabia que había visto el móvil y las pastillas porque se me habían caído al suelo, por eso huí rápido. Al final solo se quedo el móvil y yo me lleve de vuelta las pastillas, las cuales escondí en el primer cajón de mi escritorio. 

Después de esa noche deje de pensar en Allen, y solo fingí falsa preocupación por el frente a los demás, y cuando me entere que era A-chan no supe como reaccionar.

Ahora después de todo, siento mucha culpabilidad, aunque creí que había muerto y tanto mal no le deseaba, pero no pude evitar pensar malamente cuando lo vi durante los exámenes con Lavi, y para cuando Kanda lo vio y lo alcanzo, pegue a Lavi por haberlo traído y por que lo había visto Kanda mas que por el echo de que nos ocultara de que el seguía vivo.

Soy despreciable lo se, y por eso quiero solucionar mi personalidad, pero no se como hacerlo sin que sepan nada de lo que echo, planee intentar hacer como nada hubiera pasado, pero las pruebas son las pruebas. 

Me acuerdo de las palabras que Alma me dedico al ver que no me entristecía las desaparición de A-chan: "eres peor que la peste".

Puede que el tuviera razón, porque si yo fuera una buena persona no hubiera echo nada de lo que hice a lo largo de mi vida, viviendo de una manera diferente a la de ahora.

La razón por la que estoy pensando todo esto es debido a lo que acaba de ocurrir enfrente de mis ojos.

Hoy, he vuelto al internado para ir recogiendo las cosas de mi dormitorio, cuando subí las escaleras me extrañó ver a Link pero no le preste atención.

Solo empecé a preocuparme cuando vi la puerta de mi cuarto abierta, y al asomarme ver como mi hermano sostenía la medicación de Allen con un pañuelo, y una mirada llena de decepción y tristeza en su cara.

Ignore a todos los que había en la sala, y solo me fijé en mi hermano, la última persona que quería que se enterará de todo lo que hice ya lo ha echo.

- señorita Lenalee, necesito hacerle unas preguntas - oí a alguien hablar - y dependiendo de lo que diga afectará a su vida de mayor o menor manera.

Continuará.............................

Termine los exámenes!!!!!!!! Bueno fue el lunes, pero después de tantos días durmiendo fatal, no tenía cabeza para escribir sorry. Bueno lo bueno es que he vuelto para quedarme. Espero que les haya gustado el especial pensamientos de Lenalee.

Comenten 👉

Bueno ya nos vamos leyendo bye, bss.

El InternadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora