El Internado

Especial.

Pensamientos de Kanda: el día que lo conocí.

Tenia unos 5 años cuando lo conocí, no me acuerdo que acontecimiento se estaba celebrando, lo único que se es que todo estaba decorado con colores alegre, el tonto de Lavi no paraba de correr de un lado para otro gastándome bromas, ya desde pequeño era todo un incordio.

aburrido por la situación decidí apartarme de las personas, y cuando me escondí detrás de las escaleras principales de la casa, fue ahí cuando lo vi por primera vez, el también estaba allí, detrás de las escaleras, parecía estar comiendo algo mientras pasaba las paginas de un libro de dibujos.

Estaba a punto de irme cuando me miro y sonrió con una sonrisa digna de un ángel, me tendió el lo que estaba comiendo, y casi inconscientemente me senté a su lado, y yo también me puse a ver las imágenes del libro, pasamos juntos todo el tiempo que duró la fiesta.

El libro de ilustraciones era muy graciosos, tenia paginas donde podíamos ver imágenes de animales jugando, en estas el sonreía, otras durmiendo, en estas el ponía una carita tierna, y en las paginas donde salían llorando los animales, se acurrucaba en mi y no miraba la pagina, y me tocaba a mi pasar la pagina. El era tan tierno que no quería separarme de el.

Antes de que nos diéramos cuenta estábamos acurrucados, el apoyando su cabeza en mi hombro, y yo en su cabeza, en ese momento sentí una paz inigualable, y desee que nunca se acabara ese momento. Al final nos quedamos dormidos, y lo ultimo que recuerdo es que el con su mano se aferro a la mía. 

Cuando desperté estaba en mi habitación, con fiebre, había cogido frío al dormir debajo de la escalera junto con aquel chico. Poco después me entere de quien era, y aunque al principio no quería admitir lo que empecé a sentir por el aquel día, con el tiempo lo hice.

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12 años después, Kanda 17 años. Primer día de clase.

El día que empezaban las clases, junto con la ayuda de mi primo, me volví a acomodar en mi solitaria habitación, me gustaba que solo yo no compartiera cuarto, el solo pensar que tuviera que compartirlo me volvía loco, y mas después de la mala experiencia que tuve compartiendo habitación con Lavi, no quería ningún  compañero de cuarto en lo que me quedaba de vida.

Aparte de seer una persona muy desordenada, pero no con la ropa, sino con los libros, que por cierto compra uno nuevo cada semana y se los termina en 2 días, pero a pesar de todo eso, lo peor era cuando lo pillaba masturbándose,  aunque a partir de un año ya no lo hacia, durante dos años que compartí cuarto con el era una condena, y de solo pensar que todos los demás serian igual no podía evitar poner una cara digna de un demonio.

- Kanda, que suerte tienes este año - dijo Alma mientras me miraba colocar mi ropa en el armario. - un cuarto para ti solo.

- si ya, pero podrías dejar de mirar y ayudar - le conteste tirando le una zapatilla, que por cierto el esquivo. 

- siempre tan agradable - dijo, entonces en ese momento se escucho que alguien llamo a la puerta de la habitacion - voy yo - fue Alma antes de que le tirara la otra zapatilla.

Cuando termine de colocar los zapatos me asome para ver quien era, y al hacerlo me encontré con Komui, el director mas loco y salido que haya visto jamas cualquier centro de este mundo.

- que quieres Komui? - le pregunte lo mejor que pude.

El solo sonrio, y tras saludarme de una manera muy animada hablo.

- venia a informarte que a partir de ahora tendrás compañero de cuarto, lo bueno es que solo sera durante este año porque estas en ultimo año. - me dijo escondiéndose detrás de Alma, el ya me conocía lo suficiente como para saber mi reacción.

- maldito director chiflado! - le grite intentando alcanzarle - me prometiste que no me pondrías ningún compañero hasta que me graduara.

Komui no se apartó de mi primo Alma, el cual intentaba quitarse de en medio, temeroso de que me hartara y le tirara algo.

- komui-san seguro que tiene una escusa, verdad? - dijo de repente Alma.

Komui solo asintió frenéticamente, y decidí escucharle.

- bueno verás, el alumno que tendrás como compañero de habitación es el becado - dijo komui - como sabrán los dos, casi nunca nadie aprueba el examen para entrar aquí, pero este año un chico lo ha conseguido y esta es la única habitación donde podríamos meterlo ya que lo demás está todo lleno. - siguió hablando muy rápido - así que, por favor, te lo suplico, solo es este año. - se arrodilló.

Alma me miro con una mirada severa y amable, diciéndome con ella que me aguantará y ya está.

- no pienso......

- seguro que a A-chan le disgustaría tu forma de actuar - donde más dolía tuvo que dar, porque es mi primo que sino lo mataba.

- está bien - conteste con un poco de rabia mientras veía como Komui y Alma chocaban las manos y luego hacían una señal de victoria.

Después de que se fuera Komui, termine de ordenar la habitación, y decidí junto con Alma ir a comer algo, y de paso encontrarnos con Lavi, he de admitir que a pesar de no aguantarle era un amigo muy fiable.

Después de comer algo, Alma se fue a su habitación, en el internado rara vez nos veían juntos a pesar de ser primos y de llevarnos muy bien, la razón no la sé, él fue el que empezó a poner esa distancia, el motivo me es desconocido.

Más tarde, ya en mi habitación me encontré con el que sería mi compañero de habitación durante todo el curso, al verle lo único que pensé era que se parecía mucho a A-chan, pero en ese momento estaba tan cabreado con tener que aguantar a un compañero que me comporte como siempre lo hacía con la gente que no me agradaba, que le voy a hacer, yo soy así.

Este especial continuará.............