Era una hermosa mañana de invierno, aún faltaban una o dos semanas para Navidad, y como ya era tradición, la madre de Yuu y la de Allen habían quedado para tomar el té.
Mientras hablaban sobre su día a día y otras cosas, sus hijos se la pasaron jugando toda la tarde, cunado solo faltaba una hora para irse, la madre de Allen se disculpó un momento para ir al baño, donde aprovecho y cogió una petaca que tenía escondida en su bolso y se bebió un poco más de la mitad.
Cuando lo hizo volvió al salón tambaleándose un poco, pues no era el primer trago que le daba a la petaca y tampoco era la única que llevaba en el bolso. Desde mucho antes de casarse había tenido problemas con la bebida, pero cuando empezó a salir con su actual marido decidió ir a terapia, pero recayó cuando dejo de ir a terapia para poder pasar tiempo con su hijo, con la excusa de que ante los medios tenía que dar buena imagen a los medios como buena madre, decía que le tenía que dedicar las 24 hora a su hijo.
Cuando paso la hora y decidió irse, ya se había terminado la petaca y había empezado otra, claro está que la madre de Yuu no se dio cuenta en ningún momento de todo.
Antes de irse, Yuu no quería que Allen se fuera a su casa, ofreciéndole que se quedará en su casa a dormir y todo, pero eso no podía ser.
- por qué no se puede quedar? - pregunto un joven Yuu de diez años a ambas madres.
- Yuu otro día vale - le dijo su madre.
- pero yo quiero que A-chan se quede hoy y ahora! - protesto un poco.
- Yuu - llamo la madre de Allen - tranquilo, la próxima vez que vengamos dejaré que Allen se quede a dormir, Vale? - Yuu solo asintió - di adiós Allen nos vamos.
- adiós Yuu-ni-san - con una hermosa sonrisa de oreja a oreja.
( Voy a casarme con el ) fue el pensamiento de Yuu cuando vio la sonrisa.
- mamá - llamo Yuu a su madre - cuando sea mayor, me podre casar con él?
- solo si él quiere - contesto con una sonrisa.
Después de que se despidieran y salieran de casa de la familia de Kanda.
La madre de Allen empezó a conducir el coche un poco nerviosa, ya que se le empezaban a notar los síntomas de la borrachera, pero en vez de parar y llamar a su casa para decir que se encontraba mal, decidió darle otro trago a la botella mientras conducía.
Allen no le quitaba ojo de encima ya que le parecía raro el comportamiento de su madre, pero no se atrevía a hablarle, ya que le tenía dicho que no lo hiciera mientras conducía, ya la distraía, cosa que le pareció raro, ya que cuando sus tías o tíos, su padre incluso el chófer de su padre conducían hablaban entre ellos y no pasaba nada.
Fue cuando en mitad de ese pensamiento, decidió mirar al frente y no importunarla de ninguna forma, saco de su bolsillo un llavero que le había regalado su tío Tikky, un llavero en forma de estrella, se suponía que era un secreto entre los dos, pero no le importo que su madre lo viera luego le mentiría.
- mamá, que significa ese símbolo? - le pregunto Allen a su madre, y está no le miro.
Y al final ocurrió, para el pequeño Allen todo paso muy rápido y para cuándo se dio cuenta ya estaba en una ambulancia camino del hospital.
Su madre se había saltado un cruce, provocando un gran accidente, en la que ella salió casi ilesa y su hijo salió con quemaduras, los otros conductores también tuvieron mucha suerte y ninguno murió.
Cuando toda la familia se enteró del accidente fueron como balas al hospital, incluido la familia de Kanda, pero no dejaron que Yuu viera a Allen para que no le causaran ningún trauma el verlo todo vendado y con muchos cables conectados al chico.
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El Internado
FanfictionAllen Walker, un chico de 15 huérfano, ha conseguido una beca para el instituto más importante y más caro de todo Japón. Aunque la beca le pague lo esencial, si tiene algún capricho deberá pagarlo el con su dinero, para conseguir este dinero deberá...