Una Tormenta Y Un Cachorro - YoonMin

Capítulo 12: chim- chim chinchudo

Había bajado las escaleras para desayunar, despues de despertarme y es que tampoco había encontrado al cachorro en mi cama, cuando llegue al último escalón pude oír su voz, así que despacio me acerque al comedor para escuchar un poco más.

— Jin ese hombre no me gusto nada, dijo cosas feas a Hyung. — la voz de JiMin era muy particular, podía diferenciarla del resto muy fácilmente.

— lo sé, pero creció junto a Seung por eso es tan difícil para YoonGi — habló Jin queriendo hacen entrar en razón al albino.

— pero si es su hermano como dijiste no debería hacer llorar a Hyung ¿que puedo hacer para que hyung vuelva a ser feliz? — soltó aquellas palabras con gran frustración.

— hey cachorro no te enrosques, deja que las cosas se calmen y los sentimientos se acomoden — habló NamJoon queriendo calmar al omega.

Estaba preocupando al cachorro por mi cobardía, debía cerrar esa historia de una vez, tenía que enfrentarme con mi padre y Seung, ya no podía seguir escapando.

Entré al comedor, sintiéndome incomodó y es que el silencio sepulcral que había en esa sala no ayudaba en nada, me sente sin demostrar mi inseguridad, como si nada hubiera pasado.

— buenos días YoonGi Hyung — habló JiMin con una gran sonrisa.

— buenos días cachorro — saludé cordialmente.

— ¿has dormido bien? — preguntó Jin sirviendome chocolatada.

Es que ese omega sabe todo de mi, sabe que cuando me siento triste una buena chocolatada caliente siempre me hace sentir un poco mejor y es que aunque jamás lo admitiera, me encantaba que me mimaran con pequeños detalles.

—Sí, gracias ¿cómo entraron? — cuestioné a los dos mayores que simplemente sonrieron.

— ese es el YoonGi que conozco — se rió NamJoon — tu cachorro nos abrió — Miré hacía JiMin, este me observaba de igual manera.

— ¿tuviste un sueño malo? — pregunté. El cachorro ladeó la cabeza — es que te oí llorar, creí que estabas despierto pero luego me di cuenta que no lo estabas.

— no lo recuerdo — comenzó a reír

— no importa — di un sorbo a mi bebida — ¿a que hora es la reunión? — pregunté a NamJoon

—¿de que hablas? — cuestionó como si no comprendiera.

— hoy debíamos reunirnos con esos socios de los que hablaba Yoona — expliqué mientras tomaba mi bebida.

— si... pero pensé que no te sentías bien — respondió el alfa con preocupación.

— estoy bien, llama a Yoona y... — el omega castaño me interrumpió.

— YoonGi no hagas esto — parecía un poco molesto, tomo aire y luego agregó — cargarte de trabajo no te hará bien — cargarme de trabajo me ayudaba a no pensar, mis pensamientos solían hundirme cuando me sentía deprimido pero no podía darle la razón.

— no estoy cargándome de trabajo, solo es una reunión — intenté sonar firme, no quería que se diera cuenta de que mis inseguridades eran mas fuertes de lo que dejaba a entrever.

— porqué mejor no solo descansas por hoy y ya mañana nos ocupamos de eso — habló NamJoon con voz calma no queriendo hacer explotar ninguna mina. 

— no lo sé... — solo no quería pensar en esa familia, creí que los había superado pero no era así, yo aun seguía herido por aquello.

— ¡si! YoonGi, quédate, vamos a jugar, juega conmigo — comenzó a estirar mi brazo como un niño pequeño.