Una Tormenta Y Un Cachorro - YoonMin

Capítulo 28: Ansiedad

— ¡JiMin! — grité en mi mente — ¡JiMin! Despierta... por favor... ayúdame.

Mi cuerpo estaba paralizado podía sentirlo a mi lado, era una tortura, me costaba respirar como si algo estaba presionando en mi pecho, quería mover mis manos, quería gritar, quería que él pudiera oírme

La ansiedad de estar consciente pero no tener control del cuerpo también me generaba angustia.

Pude oír unos pasos hacia nuestra habitación, el rechinar de la puerta me avisó que alguien había entrado, mi desesperación era inevitable, no sabía quien estaba a nuestro lado.

Por favor JiMin... despierta... cariño, tengo que protegerte, no puedo hacerlo si no te despiertas. 

Alguien podía lastimarlo si yo estaba en este estado, atrapado en mi propio cuerpo, nunca me lo perdonaría si algo le sucedía.

Podía verlo por el rabillo del ojo estaba cerca de JiMin.

¡No lo toques! Maldición JiMin ¡despierta!

Me levanté de la cama cuándo volví a tener control de mi, observe rápidamente la habitación, no había nadie, JiMin seguía dormido, trate de normalizar mi respiración, me levanté de la cama y caminé hasta el baño, abrí el grifo y tire agua en mi rostro.

Volvió a pasar, después de años de no tener parálisis del sueño, había vuelto a tener ansiedad, me observe en el espejo.

¿que te sucede? Estas tirando todo a la basura, ¿porque tienes tantas ganas de tomar esas pastillas? ¿por que estas tan ansioso?

Tomé una toalla y seque mi rostro.

¿debería dejarlo pasar?

Salí de la habitación y me dirigí hacia la cocina, encendí la cafetera cuando todo estuvo listo, serví el café y fui a sentarme cerca del ventanal, los primeros rayos de sol ya se podían ver, el amanecer había llegado.

¿Debería aislarme o estaría cometiendo un error? ¿que debo hacer?

dame una señal Sun Hee...

—¿hyung? — el cachorro venía bajando las escaleras refregando sus ojitos.

— ¿JiMin que sucede?

— tuve una pesadilla ¿por que te levantaste tan temprano?

— ya no tenía sueño ¿que soñaste?

— tu... estabas en un precipicio, por caer y yo te sostenía pero te solté... lo siento, te solté... estaba muy oscuro abajo, no iba a dejarte solo ahí así que...

— ¿te tiraste? — le pregunte incrédulo, él asintió — solo fue un sueño no te preocupes.

¿si yo caigo al abismo, él también lo haría?

— ¿también tuviste una pesadilla? — preguntó sentándose frente a mi.

No podía esconderle nada ¿verdad?

— así es...

— ¿que soñaste?

Que no podía protegerte...

— no lo recuerdo — sonreí — Debemos hacer nuestras maletas, nos vamos mañana.

— podemos ir a comer afuera...

— si... — tomé mi café — pero aún es muy temprano, duerme un poco más

— ¿dormiras conmigo?

— trabajaré un poco, pero estaré a tu lado mientras duermes ¿vamos? — me levanté, él sonrió y entrelazo nuestras manos.

— esta bien ¿me mimaras un poco verdad?