Capítulo 50: Cierra los ojos

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Es este sueño que vivo contigo, el que he apropiado como mi realidad, cerrar los ojos ahora, es un poco trágico, porque me gustaría ver el color de tus iris sólo un tiempo mas.

La aguja del reloj se mueve hacia el lado derecho y el tic toc del minuto perdido, hace mi corazón mas pesado.

Le pedí a la luna que alargará esta noche, pero sólo bastó cerrar mis ojos, para que el sol apareciera, sólo bastó cerrar mis ojos para que tu desaparecieras .

Los sueños son tan efímeros como la vida misma.

¿Cómo un sueño puede ser destruido con el sonido de un tic toc?

¿Esta es la existencia verdadera o sólo una pesadilla de la que pronto despertaré?

Una hora antes...

— buenos días hyung — el sonido de su risa me hizo abrir los ojos.

— buenos días JiMin —  susurré afónico — ¿haz dormido bien? — .

Sus ojos se fueron hacia sus manos y su sonrisa se apago un poco, su cabeza se fue a la derecha e izquierda , negando repetidamente.

— ¿tuviste una pesadilla? — me acomodé en la cama y él asintió.

— YoonGi — sus ojos estaban tristes — siento que algo muy malo va a pasar — dijo a punto de llorar.

— JiMin solo fue una pesadilla — acaricié su rostro — no es real, nada malo va a pasar — .

— hyung no vayas a trabajar — me suplicó haciendo puchero

— Ya he faltado mucho — me reí.

— por favor, no vayas , confía en mí —.

— confio en ti — sonreí — ¿quieres contarme que soñaste? ¿que te asustó? — él negó

— no voy a decirtelo, porque es feo y voy a llorar si te lo digo — dijo al borde de las lagrimas

— esta bien — me senté en la cama y  lo abracé — no me cuentes, si te duele — el albino se acurrucó haciéndose más pequeño de lo que era — no iré a trabajar si no quieres.

— ¿en serio hyung? — le brillaron los ojos. Sonreí y asentí — gracias — me abrazó muy fuerte y luego se levantó con su característica energía — el desayuno esta listo, yo lo preparé — dijo muy orgulloso y salió del cuarto dando saltos.

— sólo espero no haber caído en una de tus jugadas — me levanté con muy pocas ganas, al de ojos azules le gustaba preocuparme para hacer lo que él quería.

Después de asearme , bajé las escaleras, el pequeño había preparado la mesa, y el desayuno estaba servido, había un lindo cupcake y tenía un mensaje

" hyung se ve tan lindo cuando duerme"

No evité sonreír como un idiota, no podía evitarlo, quería abrazarlo y ponerlo en un cajita de cristal, para que jamás le sucediera nada. No me imaginaba existir en un mundo donde no esté, ese chico de ojos como el cielo .

Dí un sorbo al té que preparó el albino, mientras este, se sentaba en la mesa, sujetando la taza con sus dos pequeñas manos y observando su bebida, él parecía estar distraido, como si su mente estuviera en otro lugar.

— ¿JiMin? — el omega estaba tan distraído en sus pensamientos que ni siquiera pudo oirme — JiMin — dije alzando un poco la voz, este dio un salto en su asiento

— Hyung me asustaste — dijo el albino llevando una mano a su pecho tratando de calmarse

— lo siento — dije apenado —
¿En que piensas? — pregunté con bastante curiosidad.

Una Tormenta Y Un Cachorro - YoonMin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora