Capítulo Tres

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Las bocas de Theo y Owen colgaban en el aire sin habla alguna. Keyla, la asesora de imagen, y Gretchel se erguían ante ellos; o, mejor dicho, la nueva versión de la pelirroja.

Temprano ese mismo día, los asesores contratados por Marvin se habían presentado en su oficina con la intención de cambiar el estilo e imagen de la banda. Theo no había estado muy convencido de la idea, incluso cuando Vincent, uno de los asesores, lo arrastró a él y Owen por todas las ropas de marcas de la ciudad en busca del armario perfecto. Sin duda fue una de sus peores pesadillas en carne y hueso.

Keyla se había encargado de Gretchel, y sin duda había hecho un gran trabajo. Era casi imposible reconocer a la pelirroja de corta melena y esbelta figura como la voz principal de su banda. De hecho, las facciones de Gretchel se habían acentuado aún más debido al maquillaje que cargaba encima. Ya no parecía una chica cualquiera traída del campo, como Theo había pensado, sino una estrella juvenil dispuesta a valerse por si misma.

Sus ojos azul claro rebotaban por toda la habitación para no reparar directamente en Gretchel. A su lado, Owen no se molestaba en ocultarlo lo embelesado que estaba por ella. Theo carraspeó un par de veces y codeó a su amigo para llamar su atención.

—Oh, veo que les gusta —habló Keyla, su mirada complacida de ver el efecto de la nueva Gretchel en ellos—. Sabía que reaccionarían así.

—Quedó divina, cariño; un total cambio —se acercó su esposo, Vincent, y la rodeó por los hombros—. ¡Bravo!

Gretchel giró uno de sus cortos rizos sobre su dedo. Se veía incomoda bajó el umbral de la puerta, estando expuesta a cada uno de los presentes en la habitación. La inocencia y niñez de su rostro permanecían intactas pese a lo definido y maduro de su nueva apariencia; lo que Theo conseguía curioso. No era como Owen o él apenas pusieron un pie en Blue Récords, los cuales cambiaron de forma radical de la noche a la mañana.

Gretchel atrapó a Theo reparando en ella y mordió su labio inferior.

—Todavía no estoy segura —musitó en un apenas audible tono de voz.

Su mirada viajó por el conjunto floreado que Keyla le había escogido, y los zapatos de plataforma que le aportaban algunos centímetros de más.

—Te ves bien —soltó Owen—. Muy bien.

—Ahora si pareces un miembro de Cloud Nine —Fue lo único que dijo Theo.

Gretchel intercambió su mirada entre ambos y esbozó una cálida sonrisa.

—Ustedes también se ven bien.

—De nada —añadió Vincent al instante, tomando asiento junto a su esposa en el sofá frente a ellos.

Owen se alejó del rincón en el que se había instalado, y se acercó al sillón en el que Theo estaba sentado.

—Sólo fue un cambio de ropas.

Prosiguió a señalar el atuendo que vestía; chaqueta de jean, camisa oscura de una de sus bandas favoritas y jeans algo entallados. El único verdadero cambio en él era el corte de cabello que había desaparecido todos sus indomables mechones rubios. Aun en contra de su voluntad, Vincent le había obligado a tenerlo.

En el caso de Theo, el asesor le había sugerido un estilo más deportivo; camiseta extra larga de distintos colores y jeans de mezclilla. El propósito de tener distintas formas de vestir era con la intención de hacer que los fans se identificaran con alguno de ellos.

—¿Al menos parecemos una banda de punk rock? —cuestionó.

Las miradas de Vincent y su esposa estudiaron a cada uno de ellos, en busca de algún defecto que estropeara la imagen por completo. Al finalizar, ambos asintieron repetidas veces.

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