La teoría de "Los 12"

Celda

                              🌨Capítulo 21
                  Náuseas. El dolor de cabeza agudo. Desorientación. El miedo y la intriga. Mareos. Habitaciones oscuras y lúgubres. Lugares extraños, totalmente desconocidos. Gente trabajando, gente moviéndose preocupada, gente vestida de negro, gente. Las celdas, mis amigos y los que no lo eran.
              -NOOOO, ¿QUÉ QUIEREN DE NOSOTROS?- Grité asustado. Se negaron a contestar.
             Solo en una celda. Apartado de todo lo conocido. Brotaron las lágrimas de unos ojos cansados de ser llanto.
             -¿Por qué lloras?- La voz de Tyler Kindstale, compañero de celda.
             -Toda mi vida fue un fracaso. Encerrado en un pueblo donde nadie te escucha, dentro de un país que no te representa, que se encuentra en un mundo injusto. Desde chicos nos enseñan a no amar en Eddwingood. Tyler, no puedo amar libremente. Justo cuando estaba por empezar a querer, cuando estaba a punto de formar un vínculo con un grupo de personas, todo se derrumba ante mis ojos. Ya debería estar acostumbrado. Pero... ¿ya no estamos hartos de acostumbrarnos a la tristeza? Ese sentimiento de estar incompleto, que ya nada de lo que hagas te va a poder sacar adelante. El cansancio, el llanto y la impotencia se viven día a día. Víctimas de un mundo que nos desgaja. Hace añicos nuestras ilusiones. El único remedio es el tiempo y el único consejo es: "la vida es así". NO, TYLER. ¿Por qué dejamos que el mundo sea injusto cuando sabemos que no tiene que ser así? Elegimos el mal sabiendo que existe el bien. Elegimos no amar y no darlo todo, porque es más fácil. Elegimos callar y fingir ser felices, porque es lo que se quiere de nosotros. Estoy cansado, simplemente estoy cansado- Hecho un bollo en una esquina de la habitación agarraba mis propias piernas.
             -Tenes una forma de decir las cosas que realmente atrapa. No podría estar más de acuerdo- Tyler no era de muchas palabras.
              Los gritos de una mujer se escucharon pasar por el pasillo. Era Mildred escoltada por dos hombres de negro.
           -¿Qué le hacen?- Pregunté secándome las lágrimas.
           -No lo sé- Respondió Tyler confundido.
            -Lo que es más raro es que su novio es parte de todo esto... pero hace días no lo veo- Dijo Tyler al rato.
            -¿Y qué quieren contigo? ¿Por qué te tienen acá?- Pregunté desorientado.
            -Son dueños de un laboratorio, quieren experimentar. Me han estado dando pastillas, no saben que me rehuso a tomarlas- Tyler habló muy tranquilo.
            -Tenemos que salir de acá- Contesté alterado.
            -Te inyectarán si lo haces- Advirtió él.
            -¿Cómo lo sabes? ¿Qué pasa cuando te inyectan?- Todo era muy extraño. No sabía cómo reaccionar.
             -Gareth Hastle se negó a ingerir productos químicos desconocidos, es decir, la pastilla; y la respuesta que obtuvo fue peor- Tyler me contó.
             -¿Y dónde está Gareth?- Pregunté con interés.
             -Se lo llevaron- Respondió él en seco.
            -¿Has ideado alguna manera de salir?- Necesitaba irme de ahí lo más rápido posible.
             -Si, pero desde que se ha ido Gareth no he podido- Vi sus expectativas renacer.
             -Estoy esperando que me digas la idea- Dije levantando una ceja.
             -Mañana con las chicas de limpieza- Me hizo entender que emprenderíamos la salida cuando limpiaran la celda.