My personal hell

XX. Toma todo de mi, tómalo hasta que me duela.

(Título de mierda gigante)

- Estas raro- Gerard me mira por sobre su cono de helado.

Hace un frío de mierda. Es uno de esos días en los que deberíamos estar acostados, bajo millones de frazadas, abrazados y dándonos calor corporal. Pero no.

Estamos en el parque cerca de mi casa comiendo helado y convirtiéndonos en cubos de hielo, porque al señorito se le antojo.

Y yo no soy nadie para negarle nada a mi hermoso novio cuando me mira con sus ojitos aguados y un puchero tierno y sensual en sus labios. Y juro por Dios que intente decir que no, pero me puede. Gerard Way me tiene a sus pies.

- Estoy igual que siempre Gee, solo que tengo hasta las bolas congeladas- me saca la lengua- ¿hoy te he dicho cuanto te amo? Porque si no lo he dicho, esto demuestra que eres el amor de mi vida, cariñito.

- Osito bebé, eres el mejor novio del universo.

Ahora yo le saco la lengua.

Pensé que sería más dramático todo, algo así como que Gee lloraría por los rincones y querría suicidarse y que para él la vida después de Elena no tendría sentido, pero lo está llevando bastante bien. Es eso o el desgraciado es excelente actor. Mickey es quien anda haciendo el papel de Magdalena, llorando por todo, gritando, aventando cosas, etc.

Ahora mismo está en el cine, con toda la pandilla, para ver si consigue despejarse un poco.

Arthur es tema aparte. Realiza todo de manera normal, pero se nota que está vacío, que le falta algo...

- Estas raro...

- Gerard, basta! Según tú, genio, ¿Qué es lo que te demuestra que estoy raro?

Me analiza con la mirada mucho rato y luego resopla.

- ¿Qué me escondes Frankie? Dijimos que nos diríamos todo... entonces ¿Por qué siento que me escondes algo?

Me froto las manos. Ya no siento los dedos y la cabeza me comienza a dar vueltas. No he comido nada desde el desayuno de antes de ayer, porque Linda volvió al país de las maravillas y yo estoy aparentando que todo está bien. Lo que menos necesita ahora Gee es más preocupaciones.

Y lo que menos necesito yo ahora es que me rompan las pelotas.

- Gerard, de verdad, basta!

- Pero Frank, no soy idiota, sé que pasa algo, lo sé!

- BASTA GERARD!!!- mi grito resuena por las calles desiertas y de inmediato me arrepiento.- amor,  no estoy ocultando nada ¿vale? Son imaginaciones tuyas y de verdad que no oculto nada! Estoy bien, en serio y me jode que no seas capaz de confiar en mí...

- Frankie, si confío, pero te conozco y...

- Pues no estás confiando ahora! Ahora estas juzgándome, quizás pensando que! Y estoy harto Gerard, harto porque ya no confías, ves cosas donde no las hay! Hasta te enojas porque abrazo a Jamia por el amor a Dios! Te has vuelto un inseguro!

Gerard baja la mirada a su helado y su boca se transforma en una línea recta. La cague. Siempre pasa esto, desde que escribí la confirmación a su matrícula que pasa esto. El veneno sale de mi boca sin que pueda detenerlo. Y lo que menos quiero ahora es pelear con él y es lo que más hemos hecho.

- Mi graduación es pasado mañana... me gustaría que fueras, pero entenderé que no quieras ver a tu novio.

Se levanta y se va.