Capítulo 2

42 6 1
                                    


Song

:.Capítulo 2

El guitarrista entró a un bar cualquiera con la intención de beber hasta desmayarse. Le envió un mensaje antes a Clara para que en caso de que no despertara antes de las cinco, fuese por él. Ya habiendo hecho aquello, tomó asiento en uno de los taburetes de la barra, haciéndole señas al bartender para que le sirviera algo fuerte.

-¡Vaya! ¿quieres olvidar las penas con alcohol?-Cuestionó una voz femenina junto a él.

John, confundido, giró su rostro para posar sus oscuros ojos en unos verdosos que parecían brillar con diversión. El moreno suspiró, pensando lo molesto que era el hecho de que hubiese acertado en su pregunta, una que no tuvo demasiado ánimo de responder.

-¿Por qué no las olvidas conmigo?-Propuso.

-Soy gay-Se limitó a responder, regañándose luego mentalmente.

Andrés, su manager, le decía todos los días que debía mantener un bajo perfil cuando salía, algo imposible al ser un buen bebedor, pero que al menos mantuviera callado el hecho de que era homosexual ya que al ser una figura pública, era un tema muy difícil de llevar.

-Lo sé-Habló la chica pelirroja. Él prefirió callar, dedicándose a beber de un trago su bebida, pidiendo otra-¿Es que no dirás nada más? Creí que habías considerado que contar tus penas a una extraña era lo mejor-Comentó, haciéndole señas al mozo para que les sirviera dos whiskys-Te invito algo ¿te parece?

-Gracias-Se limitó a decir cuando recibió la bebida alcohólica. La de él ya estaba más allá de su garganta, y la verdad es que no era suficiente.

-¿Y bien?-Lo instó sin dejar de mirarlo con aquellos brillantes ojos verdosos.

-¿Y bien qué?-Cortante mientras bebía un poco más lento.

-¿Me contarás tus penas?

-...-Suspiró-Lo haré a cambio de otro-Dijo, alzando su vaso vacío. La pelirroja sonrió, asintiendo. Pidió la botella, dejándola junto a John quien se sirvió de inmediato-La historia es corta...-Comenzó a decir, dejando fluir las palabras.

Antes de llegar al bar ya se había bebido un par de cervezas por lo que al entrar al local estaba a sólo un empujón de acabar ebrio, algo que terminó consiguiendo en menos de media hora, y más rápido con ayuda de aquella desconocida que parecía interesada en ser su pañuelo de lágrimas.

La miró antes de proseguir, analizándola. La chica parecía no saber quién era él, estando aún así interesada en sus problemas ¿es que tenía en verdad una pésima cara cuando llegó al bar como para llamar la atención de tan bella mujer? Si fuese hetero, no dudaría en ser consolado de otra forma, desgraciadamente nunca fue su interés relacionarse más allá que una amistad con una mujer.

-Soy gay...-Volvió a hablar luego de unos minutos en los que la chica guardó silencio, sólo observándolo, con paciencia-Lo supe cuando me enamoré perdidamente de mi manager a los 17 años, y al año de eso decidí contárselo a la persona más cercana a mí, a mi única familia sanguínea: mi hermano-Suspiró, bebiendo directamente de la botella. Su garganta ardía, pero eso no le impedía beber-Pero en vez de apoyarme, me trató como a un insecto, discutiendo conmigo cada vez que me ve desde ese día. En pocas palabras, nuestra relación es un asco-Contó, conteniendo las ganas de llorar-Y ahora, sólo me dedico a ahogar mis penas con alcohol y sexo sin compromisos ya que ni muerto pienso contarle mis sentimientos a mi manager porque temo ser rechazado. Suficiente es tener que ser despreciado por mi hermano-Terminó, conteniendo el llanto en su garganta.

SongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora