Song

Capítulo 22

Song

:.Capítulo 22

Abrió los ojos. Su cuello dolía, su cuerpo también ¿Dónde estaba? ¿En un hospital? El techo era blanco y oía el monitor cardiaco. Quiso mover su cabeza, pero llevaba un cuello ortopédico. Confuso, movió sus manos, buscando. No le agradaba aquello ¿Cómo llegó hasta aquel lugar? Recordaba haber estado cargando las bolsas con la ropa que compró para la salida que iba a tener con Dante. Pero después de eso. Nada. No recordaba nada. Todo era borroso.

-Jo.

Una mano se aferró a la suya, tranquilizándolo. Pronto en su campo de visión apareció el rostro de Thomas.

-Tommy...-Pronunció.

-Estoy aquí...

-Sí...-Susurró, dándole un apretón. No quería soltarlo.

-Tranquilo-Lo calmó.

-¿Qué sucedió...?

-Digamos que te abrazaste a un automóvil-Respondió intentando sonar divertido, pero no pudo del todo-Me alegra que hayas despertado...

-¿Cuánto...?

-Cinco días-Contestó serio-Ahora tienes que recuperarte. Es lo mínimo que puedes hacer después de causar que Clara y John llorasen como magdalenas por ti-Regañó suave-Pensé lo peor-Se sinceró. Joseph notó sus ojos vidriosos.

-...Perdón-No sabiendo muy bien qué decir.

-Idiota. Lo importante es que despertaste y estás con nosotros otra vez.

***

-¡John!

Se sobresaltó, casi derramando su café sobre él al oír el grito de Clara, la que pronto entró a la cocina con una enorme sonrisa.

-¡Joseph despertó!-Exclamó feliz.

-¿En serio?-Dejó su taza sobre la mesa para levantarse de su silla y abrazar a la rubia que le correspondió emocionada.

-Andrés pasará a buscarnos en la entrada. Vístete rápido-Dijo y John así lo hizo, metiéndose en su habitación y saliendo en cuestión de minutos.

-Deberíamos enviarle un mensaje a Dante-Comentó mientras tomaban en ascensor.

-Creo que es lo indicado-Concordó Clara-Pero tendrá que hacerlo Tommy, es el único que tiene su número.

-Ya quiero verlo-Con los ojos vidriosos. La bajista le dio un fuerte abrazo.

-Yo también.

***

Lesión cervical, dos costillas rotas, un brazo y cadera. Estaba vivo, pero muy adolorido. Incluso respirar le molestaba. Pero Thomas, John, Clara y Andrés estaban ahí, alegres por tenerlo a salvo. Se suponía que podía tener solamente visitas de sus familiares, pero Andrés hizo posible que todos entrasen a verlo, a fin de cuenta ellos eran sus más cercanos.

-Eres un llorón-Le dijo a su hermano cuando este se acurrucó junto a él con cuidado, ocultando su rostro en su torso, sollozando.

-Estoy feliz...-Hiló John. Jo se limitó a acariciarle el cabello.

-Le avisamos a Dante-Informó Clara con una sonrisa picarona.

-¿Por qué?-Cuestionó.

-Porque es tu amigo-Respondió-Igualmente, dijo que vendrá mañana-Acotó. Dante prefirió esperar hasta el día siguiente puesto que entendía que ellos deseaban ver y pasar el mayor tiempo posible junto a Joseph-"Es un considerado"-Pensó la bajista.

Continuaron hablando, riendo, ayudando a Jo cuando necesitaba beber agua o comer. Aquello era agradable, y Thom no dudó en tomar una fotografía para recordarlo. Un día en el que se podía apreciar a John y Joseph como hermanos, a John y Andrés compartiendo sin sufrir el guitarrista en el proceso, a Clara siendo maternal con Jo. Era como ver a sus "Yo" de hace años, cuando comenzaron a ser un grupo, amigos de confianza, una familia.

***

Al día siguiente

No tuvo daño neuronal ni sus heridas presentaron infección por lo que podría recuperarse en casa, aunque aún debía permanecer un día más en el hospital. La idea no le agradaba. Quería volver al departamento. Desgraciadamente no tenía más opción.

-¿Te duele mucho?

John había llegado puntualmente al inicio de su horario de visitas para acompañarlo.

-Soportable-Mintió a medias. Dolía, pero siempre y cuando no se moviese demasiado, podía tolerarlo-¿Qué hay de ti?

Su hermano lo miró confuso, no entendiendo su pregunta.

-¿Estás bien?

-...No-Se quebró-Sigo asustado. Pensé que no volvería a verte-Pronunció-No quiero perderte-Sollozó. Jo estiró su mano y John la tomó-No soportaría perder a alguien más.

-No te dejaré solo-Prometió, dándole un apretón.

***

Dante entró a la habitación de Joseph, encontrándose con este dormido. En silencio y no queriendo despertarlo, se acercó, tomando asiento en la orilla de la cama. Con delicadeza acomodó una de las mechas azuladas de Joseph tras su oreja. Sin poder evitarlo acarició su mejilla, una que tenía un feo moretón.

El día del accidente estuvo esperando al vocalista hasta que recibió una llamada de Thomas informándole de la situación. Un horrible nudo se instauró en su pecho, desapareciendo sólo cuando Thom le avisó que Joseph se encontraba fuera de peligro.

Pero viéndolo ahí, completamente herido, supo que fue un milagro. Al ser divino que lo protegió, se lo agradecía.

-Sed...

Joseph abrió los ojos, quejándose y sintiendo la boca seca. Dante inmediatamente le alcanzó la botella con la bombilla. Al notar su presencia, Jo le prestó más atención a él que al agua. No bebiendo hasta que el ex-modelo le indicó que lo hiciese.

-Gracias...-Murmuró-Pensé que me encontraría con Tommy...

-Está abajo tomando un café-Respondió regresando la botella a su lugar-Joseph...

-No llegue...-Susurró el de mechas.

-...No lo hiciste-Concordó-Y me alegro tanto de que, dentro de todo, estés vivo-Pronunció.

-¿Cuánto tiempo esperaste...?

-Joseph...

-Quiero oírlo-Su voz sonaba rasposa. Le ofreció agua, pero el vocalista lo rechazó-Dímelo...

-Esperé el tiempo suficiente para pensar que no ibas a presentarte-Sincero-Pero eso ya da igual, yo...

-Yo realmente estaba emocionado por ir.

Al ver a Dante ahí, Joseph sintió que quería decírselo y lo hizo, dejando de lado su orgullo. Que el moreno lo hubiese esperado más allá de la hora acordada le indicaba que este también esperaba aquella "reunión".

-Cuando te recuperes, programaremos una nueva salida-Prometió-¿Puedo tomar tu mano?-Pidió-Solamente de esa forma podré sentir que estás aquí y no es un sueño...

-...

-¿Puedo?

Joseph separó un poco su brazo de su cuerpo, girando su mano y abriendo su palma. Dante tomó aquello como una invitación, depositando su mano sobre la del cantante. Calidez. Aquel gesto de parte de ambos fue suficiente para alejar el temor.

Continuará.