Capítulo 3

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:.Capítulo 3

Andrés meditó el besar o no a John. Por su parte este lo miraba esperanzado, ansioso y con sus mejillas sonrojadas. El mayor suspiró. El guitarrista aún debía seguir ebrio, he ahí su valentía al pedirle tal cosa, y él, aunque John tal vez no lo recordara, no quería crearle falsas ilusiones.

-No-Terminó respondiendo, encendiendo nuevamente el automóvil.

-"¿No? ¿Por qué?"-Se preguntó mentalmente con el corazón destrozado. Las lágrimas se juntaron en sus ojos y el nudo en su garganta se liberó-Te amo...-Articuló, empezando a llorar en silencio. Andrés lo miró de reojo, sintiéndose pésimo al ser el causante de la tristeza del moreno.

-"Es sólo un beso"-Se dijo, tomándole la barbilla para que lo mirara-John...-Pronunció su nombre con seriedad-Sólo un beso. No significa nada, no cambiará nada. Y te exigiré que no toques nuevamente el tema porque yo no cambiaré de parecer, y tú. Te lo dije, no deberías sentir nada más que profesionalismo o amistad por mí-Habló antes de darle un fugaz y sorpresivo beso.

Fue sólo un roce de labios, uno que no alcanzó siquiera a durar más de dos segundos. Pero fue suficiente para el guitarrista a quien se le llenó de calidez el corazón e incluso sus lágrimas se detuvieron y el nudo de su garganta desapareció, siendo reemplazado por la alegría.

-¿Feliz?-Preguntó Andrés sin cohibición, ni pena, ni nada. Su rostro seguía impasible.

-Feliz...-Murmuró, tocando sus labios.



Clara miró a Thomas mientras este buscaba un número telefónico en su celular. Debido al plan que tenían, por esa noche el baterista no salió. Este, al igual que Joseph y John, era una persona que le gustaban las fiestas, el alcohol y el sexo, teniendo un sinfín de ex novias, compañeras de cama, amigas con beneficios y otro montón de nombres inventados por él para referirse a las mujeres con las que se acostaba.

La verdad es que le daba igual. No, mentía al decir eso. Se preocupaba por los tres, pero sólo por Thomas sentía celos. Le gustaba el baterista. No lo amaba ni quería, ni tampoco se imaginaba en una relación seria con este, pero tampoco le agradaba el ser algo de una noche y al día siguiente nada. Eran amigos, sólo eso. Ni besos, ni toqueteos, nada. Y había ocasiones en las que soñaba con besarlo. Le gustaba. Llevaba un tiempo con aquel sentimientos, pero ni muerta se lo diría porque Thomas era alguien mucho menos serio que Joseph quien al menos había tenido una novia con la que duró seis meses antes de engañarla con unas gemelas asiáticas. El baterista por otro lado duraba más en abstinencia que con pareja, siendo su relación más larga de una semana.

-¡Lo encontré!-Gritó de repente, sacándola de sus pensamientos. Lo miró, notando su rostro lleno de felicidad-Es el único amigo gay que tengo, y estoy seguro que me hará el favor con tal de fastidiar a alguien.

-Sí, pero recuerda. Debe confundir a Joseph. Demostrarle que las personas gay no son malas, son normales, y así logre aceptarlos-Dijo Clara al momento que bebía de su fría taza de café.

-Sí, sí-Marcó el número. Esperó tranquilamente hasta que oyó la voz familiar al otro lado. Sin dudarlo puso el aparato en altavoz.

-¿Aló?

-¡Dante! ¡Soy Thomas!-Habló el castaño.

-¡Hola! ¡Tanto tiempo! Pensé que te habías olvidado de mí-Dijo con tono divertido. Thomas rió.

-Sí, lo lamento. Estaba de gira-Se excusó.

-Lo sé, y yo de vacaciones. Y voy y me enteró que estás dando un concierto, el que por cierto fui a ver hace unas horas.

-¡¿En serio?! ¿Entonces estás aquí?

-Ya no, regresaré en un par de horas a casa.

-¡Nosotros también!-Exclamó emocionado. Clara le hizo señas de que tratara el tema principal-Oh, cierto-Recordó-Oye, ¿me harías un favor?

-¿Si? ¿depende? ¿qué gano yo con hacerte un favor?-Formuló expectante.

-Verás, tengo un amigo muy guapo. Y él tiene un hermano gay, algo que le molesta.

-¿Ya...?-No con mucha gracia.

-La cuestión es simple. Necesitamos que lo acoses unos días con el objetivo que termine aceptando que los homosexuales no son malas personas.

-...

-Vamos, hazme el favor-Pidió.

-...-Suspiró-Bien. No pierdo nada. Es más, puede ser divertido-Terminó accediendo y Thomas miró sonriente a Clara.

En eso la puerta se abrió, entrando Andrés con John cargado en su espalda. Era obvio que el moreno se hubo quedado dormido por el exceso de alcohol, aunque la bajista supuso que algo bueno tuvo que haberle sucedido por la boba sonrisa que tenía o tal vez soñaba algo verdaderamente agradable. Andrés los saludó, ordenándoles preparar todo porque en una hora viajarían al aeropuerto y también les pidió localizar a Joseph.

-Yo lo llamaré-Dijo la chica, levantándose. Se alejó, dirigiéndose al balcón donde tomó algo de aire antes de llamar al cantante, pero antes de poder hacerlo, un brazo pasó por sus hombros para atraerlo a un cuerpo-¿Eh?

-¿En qué piensas, Clara? ¿será que te arrepientes de lo que estamos haciendo?-Cuestionó Thomas. Ella no contestó al estar concentrada en mantener su corazón en calma ante la cercanía del otro.

-No, es hora de darle una lección a Jo. A veces es muy cretino-Respondió. Thomas rió.

-Aún así lo quieres.

-Bueno, tú también-Convino con una sonrisa, ya más calmada.

-Cierto-Concordó-A fin de cuenta somos una familia ¿no? Debemos querernos-Dijo, mirándola a los ojos. Ella sintió una punzada en su corazón.

-Sí...-Susurró-Una familia.

Y ella seguía auto convenciéndose de que Thomas sólo le gustaba.

Continuará.

Avance:

"-Siempre me ha sorprendido el que puedas ocultar nuestro pasado...-Comentó, posando nuevamente sus ojos en el mayor.

-Bueno,es el precio que deben pagar para obtener fama-Se limitó a decir."

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