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Capítulo 25

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:.Capítulo 25

Siguiendo las indicaciones de la fotógrafa, tomó asiento en el sofá de cuero con cojines rojos. Le ayudaron a acomodarse, también su ropa, su peinado, últimos retoques de maquillaje. La entrevista ya había sido dada. Entre todas las preguntas, estaban las de siempre: "¿Qué te impulsó a iniciar?", "Algo de tu pasado", "¿Alguna chica que esté ocupando sitio en tu corazón?", esas y más. Jo, como siempre, fue escueto. Sus inicios siempre los ha dejado claro: "Era inútil en lo que fuese, pero podía cantar y necesitaba comer". Nunca negaba que ese fue su propósito inicial, el cual hoy en día era diferente: "Ahora canto porque es mi pasión". Exactamente. Ya no era un chico que buscaba obtener dinero en la calle para poder tener un futuro junto a su hermano fuera del orfanato. No. Ambos eran adultos que tenían una vida formada. No existía ya el miedo de lo que sucedería con ellos al día siguiente. Las cosas comenzaron a mejorar cuando Thomas lo invitó a tocar en el bar de su madre, y de ahí conocer a Andrés los ayudó a concretar lo que iba a ser una banda por hobbie.

-¿Puedes girar un poco tu rostro hacia la derecha y levantar el mentón?-Pidió la encargada. Jo hizo lo que pidió-Gracias-Le regaló una sonrisa antes de enfocarse en la cámara.

Las preguntas dirigidas a su pasado normalmente las evitaba, así como todos los otros miembros del grupo. El pasado de ellos era tabú, un misterio para todos. Partiendo por el hecho de que sus apellidos no eran reales, nunca serían encontrados. Igualmente, podían ser reconocidos por personas con las que convivieron antes de ser famosos. Siempre tuvieron presente eso. La única forma de ser totalmente irreconocibles era con cirugía de rostro, pero ninguno se sometería a ello. Llegado el momento lo afrontarían. Afortunadamente nadie parecía interesado en develar sus verdaderas identidades.

-Tomaremos otra, pero contigo recostado.

Mientras se acomodaba, pensó en Dante. Cuando le preguntaron sobre "una chica", el moreno llegó a su mente. Tras haber conversado con Andrés, sus sentimientos por el ex-modelo se volvían cada día más claros. No quería pensar en cursilerías, pero sí era consciente de que no quería sacar a Dante de su vida. Le importaba hasta el punto de darse cuenta de que no sabía nada de este, y contrario, Dante sabía demasiado sobre él. Un día incluso le preguntó a Tommy sobre el moreno, y este inmediatamente sospechó de su curiosidad. Se quedó aún no sabiendo nada de Dante. Lo cual era bastante frustrante.

-Relaja un poco la expresión...

No había notado que su ceño estaba fruncido. Intentó concentrarse para acabar cuanto antes. Aquel día Thom estaba de cumpleaños, y querían celebrarlo con comida japonesa. Tommy amaba el sushi y Andrés encontró un lugar tipo tenedor libre donde el baterista podía comer todo lo que quisiese y sin pudor. He ahí que cuando terminó, se despidió de todos, reuniéndose con su mánager para así dirigirse al auto.

-Ya llegaron-Informó Andrés, encendiendo el auto. Su celular sonó y lo tomó para contestar antes de comenzar a andar. Fue una llamada corta, pero Joseph dedujo que se trataba de la chica con la que el mayor salía.

-¿Es serio?-Preguntó cuando cortó.

-Lo es-Suspiró largamente.

-Pareces demasiado agobiado como para creerte que te gusta lo suficiente para que sea serio.

-La quiero-Confesó-Cuando estoy a su lado me siento demasiado bien porque ella es increíble-Posó sus manos sobre el manubrio-El problema es que no quiero que llegue el día en el que se vuelva tan importante que tenga que escoger.

-Entre la banda y ella ¿no?-Entendió.

-Mientras ustedes me lo permitan, continuaré trabajando como su mánager. Y ella lo sabe. Es lo que me gusta, y además son mi familia-Suspiró-Pero tenerla a ella genera una cadena de dolor que no sé cuánto durará.