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*Narra Ticiano*

Cuando entro a casa veo que no hay nadie.
Voy hasta la cocina en busca de algo chatarra. Agarro unas papas fritas y subo a mi habitación. Era simple y no con muchas cosas por todo lo que significaba la mudanza, tenía lo necesario.

Mi cama del lado derecho de la habitación, en frente de la puerta. Un estante con fotos de mis padres. Una televisión. Y del lado izquierdo la puerta del baño.
Cuando entro, me tiro en mi cama y mi vista directa a la ventana para ver el cielo. Hacía un día hermoso, soleado pero sin calor.
Me pongo a escuchar una de las tantas canciones de Oasis.

Cierro mis ojos y veo unos ojos celestes y un cabello rizado de un tono castaño. Era Aaron. Pero, ¿qué me pasaba? ¿por qué razón de repente estaba en mi cabeza apenas lograba cerrar mis ojos? ¿será culpa o será otra cosa? Ojalá sea culpa. No tengo nada en contra de los gay pero prefiero mantenerlos lejos, ¿no?

Eran ya las siete de la tarde, no sabía en qué momento me había dormido pero no niego que dormí como un bebé. Me levanté, bajé para ver si mi tío había llegado, pero seguía solo en casa. Entonces entre a bañarme cuando escucho el teléfono de abajo. Salgo envuelto en una toalla pequeña en mi cintura, bajo y atiendo. Era mi tío

- Tano -así es como mi familia me decía. - Voy a llegar tarde a casa o quizás mañana, asi que no me esperes. Puedes pedir algo para ti solo, en mi habitación hay algo de dinero. Agarra lo que necesites -dice.

- De acuerdo, nos vemos mañana tío -le digo y cuelgo el teléfono.

Voy en busca del dinero a su habitación. Cuando entro, veo que la primer vista que tiene por la venta que esta justo en frente de la entrada, es la casa de Aaron. Y justamente da a la ventana de la habitación de él. Veo que está escuchando música mientras canta y dibuja supongo. Me quedé embobado mirándolo, viendo cuán lindo era cuando estaba concentrado, en su mund... Y SIGO DICIENDO TONTERÍAS.
Salgo de mis pensamientos, recojo el dinero y me dirijo a comprar, claro, antes me visto. Cuando salgo siento que me chocan. Era él, Aaron -LO QUE ME FALTABA -dije en voz baja

- Lo...lo..lo siento -lo escucho tartamudear

- LO LO LO LO -le digo burlándome de él - Fíjate por donde caminas, marica -le digo con el ceño fruncido. A lo que veo que el rizos baja su cabeza y se va.

*Narra Aaron*

No entiendo por qué este chico, Ticiano me acaba de gritar de esa manera solo porque lo choque accidentalmente. Nunca le he echo nada, bah, desde que lo """conozco""".
Pero tenía una extraña sensación cada vez que nuestras miradas se cruzaban, sentía que lo conocía.

Cuando llego a la brazeria le digo a uno de los chicos que atendía

-Hola, vine por un pollo con papas

- ¿A nombre de quién? -pregunta fijándose en un cuaderno lleno de nombres y pedidos.

- Arzaute -le contesto, él asiente y se dirige a buscar mi pedido.

Regresa con el pollo y papas. Saco el dinero de mi bolsillo, se lo entregó y salgo del local.

Cuando ya iba llegando a casa me vuelvo a cruzar con Ticiano y sin darme cuenta acelere el paso. Cuando ya estaba por entrar a casa escucho que dice mi nombre

- Hey, Aaron dicen por detrás. A lo que me giro y veo esos ojos celestes penetrantes. Me doy vuelta y lo quedo mirando en forma de pregunta.

- Lamento haberte tratado mal hoy, es mi primer día en nueva ciudad y nueva escuela -dice, jugando con sus manos nervioso

- ¿¡Y yo qué culpa tengo de que seas nuevo!? -le digo algo enojado y levantando la voz -No es excusa para tratar mal a la gente -ya con un tono más elevado y me percaté de eso - Lo.. lo siento. -le digo con la cabeza gacha y algo tartamudo, con miedo a que me haga algo. Y cuando levanto la vista observo como ya estaba por entrar a su casa. Así que entre a la mía con algo de culpa por haberle gritado despues de que me haya pedido disculpa. La primer persona que me hacía cosas malas y me pedía disculpas y yo la cagaba, por supuesto.

*****

Ya me había levantado y me dirigía a bañarme, cuando veo a Ticiano asomado en la ventana de su casa viendo hacia la mía. Y de lo nervioso cierro las cortinas y me meto al baño. Cuando termino bajo y siento un olor a cafe y tostadas recién salidas del tostador

- Buen día mamá -le digo mientras me siento y tomo un sorbo de mi café

- Hola mi amor -dice y me da un beso en la cabeza.

- ¿Qué haces despierta a estas horas? -pregunto porque siempre llega tipo 6 a.m a casa

- Tengo que pagar algunas cuentas y aprovecho que hoy no trabajo a la mañana.

- Ah -le digo - Me voy a la escuela, nos vemos cuando regrese. Te quiero

- Okey Ari. Suerte -y me da un beso de despedida.

Saliendo de casa veo que Ticiano también sale de la suya. Decidí acelerar mis pasos, pero mala idea. Me encontraba caminando más a o menos a la misma distancia que él

-Hey -me dice - ¿Cómo estás? - pregunta a lo que quede sorprendido.

- ¿Me hablas a mí? -le digo mientras me apunto hacia mí mismo.

-El unico Aaron que conozco, es el chico que camina junto a mí -dice mientras me mira, a lo que me sonrojo y escucho una risita de su parte

- ¿De que te reís? -le dije mientras pasó su brazo por mis hombros, lo que encontre raro

- ¿Q.. qué haces?-le dije tartamudo

- ¿Te molesta? -preguntó levantando una ceja

- No es eso. Sino que.. -y hago una pausa a lo que él termina la oración

-Sino que yo ayer te estaba molestando y tratándote mal -y asiento de una forma no tan notoria.

Cuando estabamos a una cuadra del colegio, Ticiano quita rápido su brazo de mi hombro. Y se apartó de mi a grandes pasos ya que afuera se encontraba el estúpido de Ian y su grupito. Él se dirige hacia ellos y escucho que le dijeron algo a Ticiano, lo que no alcance a escuchar. Y me fui hacia donde se encontraba Amanda. La saludo con un beso en la mejilla y entramos a clases ya que había tocado el timbre para entrar.

DEL ODIO AL AMOR.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora