#23

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*Narra Aaron*

Al llegar al hospital me hicieron algunas preguntas y algunos estudios ya que, supuestamente, un golpe con algún mueble no podía hacer que mi rodilla se hinchara de tal manera y mucho menos habérmela sacado de lugar cuando solamente asenté bien la pierna para alcanzar algo.

Luego de un rato, supongo que habrá pasado unas dos horas después de hacer tanto estudios y análisis, llego la doctora con una de sus compañeras.

- Ella es la doctora Hernández, es oncóloga y está en este caso ya que cuando se hizo la radiografía y tomografía vimos un tipo de masa en tu fémur. -en el mismo momento que dijo Oncóloga, sabía que algo malo iban a decirme -Consultamos con ella para sacarnos unas dudas y.. -al hacer aquella pausa, miró a mamá, Ámber, sus manos y volvió su mirada a mí - Se detectó un Osteosarcoma en etapa uno en su fémur..

- ¿Que? -dije confundido - Pero, c-como puede ser posible, n-no.. -las palabras no me salían, solo quería salir de esa camilla, de ese hospital e irme lejos a donde no pudieran encontrarme, ¿POR QUÉ TODO ME PASABA A MI?

- Al ser positivo en VIH, tus defensas son bastantes bajas si las comparamos con las de una persona normal, por lo tanto cualquier tipo de cáncer, tumor o infección puede propagarse en tu cuerpo. Pero de todos modos puede que no sea demasiado tarde ya que está en etapa uno, con quimio..

- Ya cuando me dijeron que tenía sida fue tarde para mi. No hay nada de lo que pueda llegar a decir que me haga mejorar o alegrarme. -mire a mamá y vi sus ojos rojos, aguantando las ganas de llorar para no ponerme mal a mí. Estaba tan enojado - ¿POR QUE NO SOLO ME ABORTASTE? -grité con furia, al terminar esas palabras me arrepentí. Ella me miró atónita y confundida. Rodaron unas cuantas lágrimas por su rostro. No podía creer haber lástimado a mamá. Me odiaba y odiaba estar vivo.

- Yo... creo.. que voy a tomar un poco de aire -dijo ella mientras trataba de no mirarme para no mostrar su decepción y dolor

- Mama, yo.. no quise

- No imp..

- POR FAVOR, DEJEN PASAR -gritaban los paramédicos - Hombre. Veinte y tantos, estaban en la playa y de la nada tuvo un paro cardíaco -lo traían a la misma sala en la que estaba yo, mire por curiosidad y lo vi ahí, con los ojos dado vuelta mientras que una mujer hacia RCP

- MAMA, ES TICIANO -grite - ¡¡AYUDALO!! -antes de terminar de gritar ella ya estaba junto con otros doctores ayudando a meter un tubo por su boca. Intento levantarme, pero Amber me detuvo.

- Será mejor que te quedes en la camilla, tu pierna no está bien y no vas a poder pisar bien todavía. -decía ella al mismo tiempo que me ayudaba a acomodarme en la camilla.

Luego de escuchar "Logramos estabilizarlo" no recuerdo si me desmayé o solo me quedé dormido. Y supongo que pasaron varias horas ya que el sol se estaba escondiendo. Y por la ventana se veía un hermoso y rosa atardecer.

- Despertaste al fin, bella durmiente -dijo Amanda

- ¿Que haces aquí? -dije tirándome en sus brazos ya que no la veía desde el casamiento de mamá

- Tu mamá me llamó y me dijo lo que pasó. Lo lamento mucho -decía y me abrazaba aún más fuerte

- Todo va a estar bien, la doctora dijo que con quimioterapia puede que desaparezca.

- Entonces ¿te lo estás tomando bien? -asentí - ¿No tengo que preocuparme en que vas a alejarme de nuevo? -negué y ambos reímos

DEL ODIO AL AMOR.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora