#21

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*Narra Aaron*

Me encontraba con Amanda, Luna; su novia y Lucas entrando a la iglesia. Esperando a que mamá entrara al altar y le diera el sí a Ámbar
Ah, si. Después de todo lo que pasó con Ticiano, en navidad mamá me quería dar esa noticia. Pero pasó un mes o dos para que me la diera ya que no encontraba el momento o no se sentía cómoda en algún punto por cómo me encontraba yo.

Al ver a la novia entrar, todos nos paramos de inmediato y volteamos a verla.
Mamá estaba más hermosa que nunca. Tenía un vestido sencillo, al cuerpo, color champagne. En cuanto al peinado era recogido y tenía dos flores de plata del lado derecho de su cabeza. Y a su lado se encontraba su padre, con un traje negro, más vivo que nunca al ver que su hija se iba a casar con alguien que la merecía.
Nunca en mi vida la había visto tan feliz a mamá, quería detener el tiempo y quedarme justo en ese momento viéndola tan alegre, feliz y llena de paz. Anhelaba con toda el alma que las cosas con Ámbar siguieran funcionando.

Luego de haber escuchado todo el discurso que dice el sacerdote, se venía lo más esperado.

- Noriega Ambar Celeste, ¿acepta como esposa a la señora Arzaute Dana? ¿Prometes serle fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, amarla y respetarla todos los días de tu vida? -dijo el sacerdote mientras miraba a Amabar.

- Sí, acepto -era tan hermoso ver con cuánta felicidad lo decía mientras miraba profundamente a mamá.

- Arzaute Dana, ¿aceptas como esposa a Noriega Amabar Celeste? ¿Prometes serle fiel en lo próspero y en lo adverso, en la salud y en la enfermedad, amarla y respetarla todos los días de tu vida?

- Si, acepto. -definitivamente este era el mejor día de nuestras vidas. Su felicidad, era la mía.

Luego del "Si, acepto". Amanda y yo llevamos los anillos. El sacerdote los bendijo y ambas se los colocaron.

Después de todo, llegó la hora en la que salían las novias y tiraban el ramo.
Para sorpresa mía cayó en mis brazos cuando me había girado y creí ver pasar a Ticiano en un auto. Pero no podía ser, él nunca iba a volver. Ya no tenía nada que hacer en esta ciudad. Su tío ya no estaba o eso creo porque se mudo de al lado de nuestra casa.

- Espero que me inviten a su casamiento -nos dijo Amanda dirigiéndose a Lucas y a mí.
Si, ya sé. ¿Yo con Lucas?
Después de lo que pasó, Lucas no me dejó ni un minuto sólo. Hizo hasta lo imposible para lograr que yo estuviese bien y lo logró, como logra hacer cualquier cosa que se proponga. Llevábamos seis meses juntos y nos encontrábamos muy bien y felices. Disfrutábamos al máximo todo lo que nos estaba pasando. Su cáncer estaba en en etapa tres. Y aun que quisiera haceme creer que estaba bien, yo sabía que cada día que pasaba estaba peor. Pero ahora no quiero arruinar nuestra felicidad y ponerme melancólico.

Estabamos en un salón, festejando el casamiento de mamá. Nunca nos vi tan feliz.
Todos estabamos con alguien que nos amaba tal cual eramos, con defectos y virtudes. No nos importaba nada más que ser feliz.

El día se hizo eterno, pero lleno de alegría. Y era lo más hermoso que podíamos estar viviendo.

*******

Ya era tipo dos a.m y me encontraba en un frio y escalofriante bosque. Escuchaba los grillos y animales que pasaban a toda prisa por todos lados. Tenía miedo y sentía como se me erizaba la piel.
En un extremo del lugar se encontraba Ticiano y en el extremo contrario, Lucas.
Estaba confundido, no entendía que pasaba y por qué razón estaba Ticiano acá.

- Aaron... -escuche la voz de Tano haciendo eco en mis oídos - Te amo -gritó y noté como desaparecía cuando se presento su tío.

Los últimos años he estado teniendo el mismo sueño, una y otra vez.

- Has lo que te parezca mejor -decía Lucas, mientras su voz se iba apagando volvía a aparecer Ticiano.

Corría hacia él con los brazos abierto y gritando

- También te amo

Pero cuando estabamos por abrazarnos se evaporaba y aparecía su tío con un objeto punzante. Lo azotaba en mis costillas, en mi espalda. Sentía con cada golpe que recibía mi cuerpo cómo me iba deshaciendo. Cuando el objeto embestia en alguna parte de mi cuerpo, desaparecía. Hasta desaparecer por completo.

Y despertaba sudando, así que como siempre, a media noche me encontraba bajo la ducha tratando de calmarme y despejar mi mente de ese horrible sueño.
Algunas cosas cambiaban, pero siempre se trataba de lo mismo.
Siempre aparecía él diciendo que me amaba y desaparecía. Por un tiempo pensé que era porque se había ido y yo lo extrañaba, pero después de un año, que fue lo que me tomó más o menos poder superar algunas cosas referida a la relación que habíamos tenido, pero aún así seguía teniendo esos sueños. Así que deje de buscarle significado.
Mis noches eran monótonas y rutinarias.

********

Había pasado una semana desde la boda de mamá.
Y como los padres de Amabar no pudieron estar presentes, ibamos yendo hacía donde vivían.
Nos tomó media hora llegar ya que su casa quedaba en la otra punta de la ciudad.

Sus padres eran igual que ella. Quizás un poco más altos, pero eran iguales. Rubios, ojos grises y azules.

- Ho-Hola -dije algo nervioso. Ya los conocíamos, pero mi lado tímido se apoderaba de mi y la situación.

Su casa quedaba en frente del mar, así que siempre que nombraban que venían para su casa yo también venía porque me gustaba la calma que había en este lugar.
Tres o cuatro veces pude venir con Lucas, después de que su cáncer avanzó, casi no puede salir de su casa o del hospital.

- Mamá, voy al mar. Para la comida vuelvo

- De acuerdo -dijo ella y siguió conversando con Leticia y Pedro, los padres de Amabar. Se llevaban muy bien lo que me hacía aún más feliz.

Me saque las zapatillas, arremagué mis pantalones, me puse los auriculares y bajé las escaleras para poder sentir la cálida arena suave y fina acariciando mis pies.

Caminé y caminé sin darme cuenta que me había alejado mucho. Entonces volví mirando como mis pies se envolvían con la suave y hermosa arena, mientras sonaba "I don't wanna see you with her - Maria Mena"

Al levantar la vista vi de lejos a una pareja.
Mire atentamente ya que el chico se parecía tanto a Ticiano. Tenía el pelo por los hombros y rubio. Pero no creo que él estuviese con una chica.
Cada vez nos ibamos acercando más, no quería seguir mirando, pero una parte de mí quería saber si era él o no.
Estabamos a diez pasos y vi esos hermosos ojos, esa hermosa sonrisa la cual ya no me pertenecía. ¿Cómo es que estaba con una chica? ¿No era que me iba a esperar?
Mientras lo miraba, en la canción que estaba escuchando decía:

"They say you have a new love

I'm happy for you, love

I just don't wanna meet her

Are you gonna keep her?"

Sentía romperme y lágrimas ardientes salían y quemaban mis mejillas tanto como el fuego.
No quería mirar más entonces salí corriendo y sentía que me llamaban, pero no hice caso y seguí hasta llegar a la casa donde estaban todos.
Caí de rodillas y no podía creer lo que había visto. Se veía tan feliz y obvio que me alegraba, pero me molestaba que no fuera yo esa persona que le diera tanta felicidad.
Quería gritar y sacarme el nudo que se encontraba en mi garganta pero no podía.





*canción que escuchaba al encontrarse con Ticiano*

DEL ODIO AL AMOR.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora