PARTE 4

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Dulce llegó al colegio, saludó a los chicos e ingresaron a la clase de matemáticas.

Como de costumbre a principios de clases casi nadie le prestaba atención al maestro pues se encontraban concentrados en una charla que Maite tenía en la que contaba sobre la cena que había tenido con sus padres y su novio.
El maestro interrumpió con un grito para llamar la atención de su clase.

Todos se pusieron en posición para escucharlo y el prosiguió:

Maestro de matemáticas: Buenos días jóvenes, hoy ingresa un nuevo estudiante al curso, espero lo puedan integrar

Maestro de matemáticas: Adelante joven.

El chico ingresó al salón con un poco de pena porque todos posaron su mirada en él, además de que siempre ha sido tímido de por sí.

Chris: Buenos días, mi nombre es Christopher y tengo 17 años.

Después de esto el maestro le indicó que se sentara en el puesto que daba junto a la ventana al lado de Dulce.

Se dirigió a ese lugar y allí se encontró con Dulce, ella lo observó y que hermosos ojos cafés para él, muy llenos de brillo, le regaló una sonrisa y lo invitó a sentarse.

Entre la clase hubo juego de miradas entre ellos, juntos esperaban ansiosos el receso para poder hablar y conocerse mejor.

Cuando llegó el receso ella de acercó a él.

Dulce: Christopher vente conmigo y mis amigos, nos llevaremos bien, ya verás.

Christopher asintió y se dirigieron al patio del colegio. Allí hablaban animados.

Maite: Cuéntanos Christopher de qué colegio vienes?

Anahí: Sí, quienes son tus daddys, tienen empresas?

Christian: Tienes carro?

Alfonso: Ya paren, lo van a aturdir con tanta pregunta.

Dulce: Es cierto, mejor dejénlo que él hable.

Christopher: Chicos estoy muy agradecido con ustedes por brindarme su amistad, si después de lo que yo les digo de mi vida no quieren juntarse conmigo está bien.

Dulce: Tranquilo, dinos que pasa, puedes confiar en nosotros, verdad chicos?

Todos asienten.

Christopher: Mis padres no tienen empresas, no sé quien es mi papá, vivo con mi hermana y mi madre en una humilde casa, mi familia no tiene mucho dinero, mi mamá trabaja de cajera en un supermercado y llegué acá porque me gané una beca. Eso es todo.

Christian: O sea que no eres de  nuestra clase social, no tienes dinero.

Christopher: Exacto.

Todos se miraron sorprendidos pero decidieron aceptarlo, a ellos no les importaba en lo mínimo eso de las clases sociales.

Christopher: Entonces chicos, siguen siendo mis amigos o  no?

Anahí: Claro que sí, tonto, eso no importa pensamos que era algo peor.

Dulce no paraba de mirar esos ojos miel que la tenía hipnotizada desde el momento que los vio por primera vez. Christopher mantenía la mirada clavada también en ella hasta que decidió interrumpir.

Dulce: Chicas acompañenme al baño. - Las muchachas asintieron y se marcharon.

Cuando llegaron al baño ella se echó un poco de agua en la cara, se miró al espejo y luego las observó a ellas con una sonrisa enérgica.

Dulce: No sé pero creo que el chico nuevo tiene algo que me atrae, es muy simpático, lindo y tierno.

Maite y Anahí la miraron sonrientes.

Anahí: Pero si lo acabas de conocer.

Dulce: Lo sé Anni, pero es que es muy lindo, además el entró aquí porque se lo ganó y no como todos porque sus papitos le pagaron la colegiatura.

Anahí: Lamento dañar la emoción, ustedes saben que yo no soy así, pero tu padre, él no tiene dinero y ya sabes lo que tu papá piensa sobre ese ridículo de las clases sociales y eso.

Maite: Sí Dul, se interpondra en tu amistad con él tan pronto lo sepa.

Dulce: Ya niñas, tenían que dañarme la felicidad, por el momento no se va a enterar, ya después vemos que hacemos.

Después de esa conversación regresaron al patio del colegio, antes de llegar a donde estaban los muchachos se escuchaban risas de ellos.

Christian: jajaja,lo hubieras visto, estaba solo y en la portería, el arquero había salido y el arco estaba solo, pero el niño botó el gol, lo botó.
En este momento nos reímos pero en ese instante lo queríamos matar, era el último minuto, por su culpa terminamos en empate y nos fuimos a alargue, era la final y debía de haber un equipo ganador, estabamos furiosos y cansados, pero después de todo ganamos 2 a 3.

Dulce:Vaya, parece que la están pasando bien y sin nosotras.

Alfonso: Sí, nuestro amigo que cada vez me recuerda el oso que hice aquella vez en el partido de la final, te acuerdas?

Dulce: Como olvidarlo- Rio.

Christopher: Me voy a inscribir en el equipo del colegio, a mi también me encanta el fútbol.

Quédate © (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora