Quédate © (Completa)

PARTE 7

A Christopher le extrañó mucho la reacción de Dulce cuando llegaron sus padres, igual pensó que tal vez solo era su imaginación y se concentró en recordar los momentos que compartió ese día junto con Dul.
Llegó a su casa y saludó a su familia muy emotivo.

Christopher:Hola tormentos como están, ¿Que tal su día?,- Avanzó hasta el comedor y tomó una manzana muy roja.

Victoria: bien pero parece que no tanto como tú, es que mírate estás que no cabes de la alegría hasta creo que tienes un brillo especial en los ojos.

Alexandra:basta Vic, deja en paz a tu hermano, ¿ Cómo te fue?

Victoria: Sí hermano cuentanos.

Christopher: En el colegio todos se portaron muy bien conmigo, claro que no saben que soy becado, aún, excepto un grupo de amigos a ellos les conte todo y me aceptaron.- Sus ojos brillantes y sonrisa se pronunciaron- Además conocí a alguien muy especial, una linda muchacha con unos ojos bonitos.

Victoria: - Sonrío- Mamá ya lo perdimos.

Alexandra:Hija que ocurrencias, y ¿ Quién es esa ojitos?

Christopher: Se llama Dulce, vive en la manzana que queda cerca de aquí esa donde se ven las casas gigantes, te acuerdas enana el día que pasamos cerca en el micro?

Victoria: Wow sí, esas casas son hermosas, debe tener mucho dinero.

En el momento de mencionar el dinero la madre de él se torno muy seria, en el fondo conocía las diferencias sociales y los problemas que podría ocasionarle a su hijo si se ilusiona con esa joven riquilla. Él se dio cuenta del cambio de humor de su madre.

Christopher: Enana ve y lávate los dientes para que te duermas temprano y mañana no te hagas la roña para despertar, ella se ríe pero asiente y va a hacer lo que le sugerió. -¿Mamá por qué tan seria?

Alexandra: Hijo, ya sabes, esa chica tiene mucho dinero y pues nosotros no, no quiero verte sufrir.

Christopher: Tranquila mamá, ella es tan diferente a todas las chicas, ya verás cuando la conozcas.

Alexandra: hijo pero si apenas la conoces.

Christopher: Dale la oportunidad de conocerla¿ sí?

Alexandra: Como decirte que no, mi cielo está bien, ahora anda, a dormir.

Le dio un beso en la frente y este se dirigió a su habitación para descansar.

*****

Dulce desde hace mucho no se sentía así, tenía ilusión porque llegara el día siguiente para ir al colegio y verlo a él.

A la mañana siguiente su querido despertador sonó como todas las mañanas muy puntual, pero ella estaba muy feliz y ansiosa, se levantó sin ningún reproche, dedicó mucho tiempo y cuidado en su apariencia quería verse linda y al final lo consiguió.

Bajó, saludó a su nana muy emocionada y salió junto con mi hermana al colegio.

Luciana: hermanita y eso ¿por qué tan feliz?

Dulce: Es en serio- Rio -tú preocupándote por mi?

Luciana: No seas mala cuéntame, ¿Quiero saber?

Dulce: No me pasa nada, no seas chismosa- Le sonrío, le tomó con sus dos manos el rostro y le dio un beso en la frente, la dejó y nuevamente le soltó otra sonrisa.

En el fondo sabía que su hermana no era mala, solo fue acostumbrada a los lujos que no quiere perder al enfrentarse con su padre.

Luciana: De verdad estás loca.

Dulce solo la observa y no deja de sonreír.