Capítulo 13.

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Semanas después, noté como mi cuerpo necesitaba esas pastillas como si fuese respirar o se necesitase beber agua. Abrí la taquilla mirando las notas que estaban pegadas en la puerta. Las notas no mejoraban, hiciera lo que hiciera iba a repetir el último curso. Ann llegó con su típica sonrisa de todas las mañanas:

–Hola, mi querida Allison. –Yo solo pude bufar. –Tengo muchas ganas de que sea mañana y que Oliver me bese y me coja de la mano…

–Claro, es tu novio, Ann. –Miré a otro lado, esperando que no hablase más del tema.

–¿No estás emocionada? –Sonriendo mucho. –Es que va a ser perfecto. Los cuatro ahí marcándonos un baile lento… –La interrumpí.

–Nathan no me lo ha pedido. –Le contesté, seria. –Así que lo siento por tus sueños, pero yo me quedaré en casa. No quiero ser tu sujeta-velas.

Cerré la taquilla con fuerza y me metí en el baño. Cerré la puerta para que Ann no me siguiese y me miré al espejo dubitativa. Esta no era yo, no era la misma persona que había empezado el curso.

–Te paso a buscar en media hora. Y como no estés preparada, te llevaré en pijama hasta la fiesta.

Bufé mirando el móvil una y otra vez. Cogí el vestido que había comprado por si Nathan me pedía que fuera y me puse los tacones que me había comprado mi madre como regalo de cumpleaños. Me pasé la plancha y me maquillé como pude. Cuando escuché el ruido del claxon, bajé abajo e iba a salir por la puerta hasta que mi madre me paró.

–Eh, no te irás sin una foto, ¿no? –Mi madre sonrió mucho y mi padre se puso a su lado con una cámara de fotos.

–Mamá, déjame.

Salí corriendo del salón de mi casa y me monté en el coche de Oliver. Saludé a mis dos amigos y fuimos dirigidos a la fiesta. Sollocé, ya que Nathan no me había hablado desde el jueves  y no me había pedido ser su pareja en el baile que teníamos planeado ir mi amiga y yo desde el año pasado. Mis manos empezaron a temblar y me las miré. Cogí rápidamente mi bolso y cogí el bote que me habían dado hace varios días. Me metí dos pastillas en la boca y cerré los ojos. Mis manos dejaron de temblar y miré al techo del coche: me había convertido en una adicta.

Sonó la canción de Wings de Birdy y me tomé la última copa del ponche sin alcohol que servían en la fiesta. Miré como Ann y Oliver estaban cogidos: él la abrazaba por la cintura mientras que ella rodeaba los brazos en su cuello. Mis lágrimas cayeron por mi rostro deseando que esa fuese yo, que Nathan me cogiera en brazos y riésemos los dos por una tontería. Bailar al ritmo de la música en una balada triste que busca el amor y alegrarme porque yo ya he encontrado al mío. De repente, cuantas más lágrimas cayeron, mis manos empezaron a temblar más. Antes de ir a recoger las pastillas, una voz sonó detrás de mí.

–No pensarás que iba a dejar que te vinieras sola, ¿verdad?

Su voz me sonó dulce y yo me giré levantándome de la silla. Rodeé mis brazos en su cuello y le di un beso dulce y deseoso. Desde que se había ido del instituto, había sido difícil verle ya que me había dicho que su padre le había castigado y le había quitado también el móvil. Nuestras lenguas empezaron a jugar, deseosas una de la otra. Nathan me rodeó la cintura y se acercó más a mí. Subió su mano y me acarició la mejilla suavemente. En aquel momento, dejé de temblar y me dejé llevar.

–¡Eh, repollitos! –Gritó Ann desde la pista mientras sonreía. Maldita Ann. Ella sabía que Nathan iba a venir. –Dejad de comeros la boca y venid aquí a bailar.

Me separé de la boca de Nathan y le miré a los ojos. Su boca no pronunció ninguna palabra, pero noté como sus ojos deseaban encontrarse con los míos continuamente.

–Es tu culpa que nos llamen repollitos. –Me reí y él también se rió. Su mano subió a mi rostro y me apartó un mechón de pelo detrás de la oreja y yo, mientras me quedé mirándole muy embobada. –Vas a perder tu fama de chico malo.

–Si quieres, puedo hacer cosas malas. –Me guiñó un ojo. –Sobre todo contigo.

–Antes de eso, te lo tendrás que merecer. –Me reí dulce.

–Cuando me veas sin camiseta, solo desearás que te haga el amor.

Mis mejillas se encendieron de repente. No esperaba que dijese esa palabra ni que pensase en mí en esa manera. Nathan soltó una carcajada y yo me limité a poner morritos y a pegarle suave en el hombro. Él se acercó a mí y yo esperé sus labios con una sonrisa. Me dio un beso dulce, pero más corto de lo que deseaba. Sabía que él no tendría prisa conmigo.

Unas horas más tarde, los cuatro estábamos riendo mientras nos contábamos historias o viejos recuerdos. Mis amigos, más que nada, intentaban avergonzarme delante de Nathan con mis pequeñas sandeces o tonterías pero él me cogió de la mano y se levantó, así que me levanté con él.

–Bueno, chicos, si me permitís… –Me miró y me sonrió dulce. –Quiero pasar la noche con mi repollito.

Puse los ojos en blanco. Ann y Oliver asintieron y nada más que Nathan y yo nos giramos,  empezaron a darse besos. Nathan y yo corrimos hasta el parking y él se giró poniéndose enfrente de mí.

–¿A dónde me llevas? –Me reí un poco.

–Voy a contarte la historia. A contarte por qué me comporto así.

Me quedé mirándole y en ese momento quise besarlo. Su cuerpo se tensó y bajó la cabeza. Apreté mis labios y me acerqué a su oreja.

–Y, ¿cuántas clases de química me tienes que dar para corresponder esto?

Nathan se rió y me miró, quedándonos los dos muy cerca y rozándonos casi los labios.

–Me vale con que me beses hasta el resto de tus días.

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Holi fdskjbfdksjfds. Siento que sea super poco, pero es que no tengo mucho tiempo ya que estoy de exámenes y ya no puedo escribir. Y pues, bueno, ha tocado capítulo del Nathan cuqui y de Nathan que hace que sintamos ese dksjfhsdjfnkdsjnfdskjnfkjds que nos rodea cuando alguien nos dice cosas así JAJAJAJA. En el capítulo siguiente, sabréis toda la historia de Nathan y por qué no sale su madre en la novela ¿qué creen que le ha pasado? cha cha cháaaaaan lo dejo a vuestra imaginación dslkfds (:

Y pues muchas gracias a todo el mundo que me apoya y que me da esas estrellitas que me dan fuerza para seguir escribiendo :'). La verdad es que sé que comparado con la mayoría, son pocos lectores pero son muchos más de los que he tenido nunca JAJAJAJA.

Así que, muchas gracias a todos. Espero que os haya gustado este capítulo y que le deis a la hermosa estrellita que tenéis en el lado superior derecho :3. Que me comentéis a ver qué os ha parecido el capítulo y si lo podéis recomendar, me encantaría pls ♥. Gracias a todo el mundo que me sigue apoyando. ¡¡OS LOVEO, REPOLLITOS!!

Amor contradictorioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora