Llegaron a la disco, Pablo y sus amigos se preparaban para tener una noche de copas y diversión. Pablo estaba pensativo, lo suficiente para llevarlo a esa calma deseada y no desear nada más que una copa de vodka y observaba a su alrededor. En todo caso, debe disfrutar la noche y tratar de distraer su cabeza.
—¿Puedo sentarme aquí? —preguntó una mujer al darse cuenta que todas las mesas estaban ocupadas.
—No hay nadie aquí, adelante —respondió Pablo observándola de pies a cabeza. Por lo visto, alguien no quería salir a divertirse.
—Tienes toda la razón, si ves a ese grupo de mujeres, son mis amigas, estamos festejando el cumpleaños de una de ellas, sus 23 primaveras —reafirmó la mujer con soltura—. Y no tuve tiempo para pasar a mi casa y poder vestirme adecuadamente para una noche de copas y baile.
Cuando la gente a tu alrededor percibe una vibra de tristeza, en una persona soltera y vulnerable, tienen una impresión errónea, si eres feliz o simplemente no saben nada. Eso se convierte en otro círculo vicioso que puede ponerte en una situación incómoda, aceptando citas con quien sea y que en realidad no necesitas, muchos menos una cita perfecta en el lugar equivocado. Mejor elige confiar en ti misma, mantener una sonrisa y apreciar cada momento y eleva cada uno de tus encantos.
Los hombres deben comprender que los tiempos han cambiado considerablemente y que las mujeres ahora son independientes, esta situación es más difícil para los hombres, actuando por impulso y las mujeres, hoy en día no se comprometen tan jóvenes como antes, ellas viven risueñas e impredecibles. Además, tener una pareja no es un requisito para la felicidad. Ya no podemos exigir lealtad sin antes pronunciarla debidamente.
Pablo observaba cada detalle y gesto de la mujer con la que estaba compartiendo un poco de tiempo...
—Me llamo Teresa, mucho gusto y ¿tú? —preguntó la mujer.
—Yo me llamo Pablo, el placer es mutuo —respondió Pablo y nuevamente preguntó—. ¿Frecuentan mucho venir a este lugar?
—Es la primera vez, como te había dicho anteriormente, no planeamos la salida nocturna. Como ya te diste cuenta, tengo un sueño inmenso y deseo ir a mi casa, mi cama y descansar —respondió Teresa—. Se levantó de la silla y se despidió.
Él observó a esta mujer caminar hacia el grupo de amigas y despedirse. Ella giró la cabeza y ambos se miraron con ganas de seguir la charla, Teresa se encontraba muy cansada pero con una sonrisa tímida y Pablo no reaccionó. Y se quedó ahí, sin ninguna oportunidad. Después de unos segundos, su instinto lo llevó a reaccionar y ya era demasiado tarde, no encontró rastro alguno de aquella bonita mujer. No dudo en acercarse a sus amigas, y preguntarles por su número, desconfiadas varias de ellas se quedaron calladas pero una de ellas le dio el número de Teresa.
Se dice que lo fácil aburre y que lo difícil atrae más. Cuando del hombre se trata hay que recordar que es cazador por naturaleza, un poco bestial a su manera de enamorar, por eso tienes que dejar que sea él quien te busque y se esfuerce lo suficiente. A nosotros nos gusta el reto y entre más tiempo nos cueste conquistar a una mujer se vuelve más valioso. De lo contrario, si eres tú la que siempre lo busca, lo invita a salir, siempre le escribe mensajitos y a todo le dice que sí, al principio puede estar muy contento y entusiasmado. Los hombres actúan como niños buscando el mejor juego para desarrollar nuestra inteligencia. Una mujer fuerte que disfruta cada porcentaje de la soledad, es más difícil de llevar a la cama.
Pablo se sentó en aquella mesa, donde el aroma de esa mujer quedó, sus amigos se encontraban bailando y haciendo el ritual de machos alfa, como una manada de lobos, seductores y liderando la noche. Aunque con el número de esa mujer en sus manos y que tanto lo inquieto, aún pensaba en Estela y cada problema que los separaba cada vez más, empezaron a llegar muchas conclusiones negativas a su cabeza. Por otro lado, tomaba la copa de vodka lentamente y lo disfrutaba. Por primera vez, no tuvo esa necesidad de embriagarse al extremo para desbordar su lujuria y percepción. Se mantuvo ecuánime y de tal forma, eso lo llevaría a sentirse un poco más tranquilo y sereno.
Ya era de madrugada, cuando llegó a su departamento y se acostó en su cama. Analizó cada aspecto de Teresa, comparándola en ciertos aspectos con su amada. No tenía ningún resultado definitivo y divagan emociones nuevas. Se estaba quedando dormido y apagó su teléfono, con una angustiosa evidencia visual, no tenía llamadas perdidas de su novia.
La mañana siguiente, se preparó su café y empezó a leer el periódico. Sus celos se vieron proyectados al leer un articulo de infidelidad y sus características. Derramó el café en su corbata favorita y tuvo que ponerse otra. La corbata de un hombre es su mejor consejera a la hora de seducir, el bolso de una mujer, se vuelve en su peor enemiga a la hora de conquistar.
Mientras estaba duchándose, no dejaba de analizarse, siempre tenía la suerte de atraer a mujeres muy atractivas a su vida. Era un hombre muy galante y con una esencia única que despertaba la curiosidad de cualquier mujer quien aprecia estas cualidades: inteligencia, sensualidad y carisma.
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El asiento con porte ©
RomanceDos corazones pueden vivir sin remordimientos y buscarán la mejor manera de solucionar sus diferencias. En una gran residencia centrada en el confort de sus propietarios, el dinero no lo es todo pero aveces puede volverse el único consuelo. Una muj...