Capítulo 7: Negación

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BLUE

En pequeño instante la veo sonreírme, y juro que es lo mejor que puedes ver. —Creo que yo tampoco

Encarno una ceja. —¿Crees?

Ella sonríe inocentemente mientras se encoge de hombros. —Bueno... ni yo, pero no sé si esto sea buena idea.

La tomo de las manos y las acerco un poco a mi pecho. —Yo creo que podemos intentarlo otra vez... —ella me mira un poco dubitativa. —Prometo que, a partir de ahora, no habrá más secretos. —se muerde el labio indecisa y mira hacia abajo como si hubiera algo exageradamente interesante ahí. —Créeme que no haré nada para lastimarte.

—Eso ya me lo habías prometido.

—Lo sé, y en mi idiotez creí que te estaba haciendo un favor, pero... por favor, perdóname. ¿Leíste mi carta? —ella asiente. —Lo decía en serio, te amo, Jamie. Demonios, te amo y cometí un error... ahora me doy cuenta, fue un terrible error pero gracias a eso, pude darme de cuenta de lo mucho que vales y de lo mucho que te necesito en mi vida.

Se relame los labios y deja salir un pequeño suspiro. —Está bien.

Mi corazón se detiene. —¿Está bien?

—Sí, te voy a dar una oportunidad... pero, si me vuelves a fallar no habrá más oportunidades.

—De acuerdo. —sonrío y ella hace lo mismo. —No más secretos, ahora que ya estamos oficialmente juntos... —hago una ligera pausa. —No te quiero cerca de Fabián.

—¿Qué? Es mi amigo —replica mientras yo pongo los ojos en blanco.

—Un amigo que quiere meterse entre tus bragas

—Le dejaré claro que no pasará nada entre ambos, pero no le voy a dejar de hablar.

—¿Entonces no tendrías problema si yo hablara con Megan?

—Megan no vive en Boston y eso es completamente diferente

Me echo a reír. —Explícame como es diferente.

—Megan es una... bueno, una zorra.

—Fabián no es mucho mejor que ella, de hecho, estoy seguro de que si le hablarás ahora y le dices que quieres que venga a tu casa no lo duda ni un solo segundo.

—Por supuesto que no, somos amigos.

Ahora yo suelto un suspiro. —Yo conozco a Fabián, Jamie. Es un idiota y no solamente es un idiota, sino que es un idiota que quiere lo que es mío.

Alza ambas cejas. — ¿Lo que es tuyo? ¿Ahora soy una propiedad?

—Sabes a que me refiero. —me acerco más a ella sintiendo su respiración rozar mi rostro y sonrío. ­—Tú eres mía, así como yo soy tuyo.

Después de la haber acompañado a Jamie a su casa, me dedico a lavar mi motocicleta un buen rato a pesar de que es muy tarde.

—¡Blue! —escucho. Me levanto de golpe recibiendo como bienvenida a los esplendidos rayos del sol que son expertos en atravesar las cortinas de la ventana, me toma un segundo en poder enfocar la mirada en algún objeto aleatorio. Tambaleo mi camino tratando de sostenerme de las paredes como si fuese Spider-Man y veo a Fitz con llaves en mano. —Hay parcial de estadística, ¿no irás a la escuela?

Demonios, se me olvido ese detalle del parcial. Agh, paso mis manos por mi cara tratando de despertarme un poco más y bostezo... por lo menos la motocicleta está limpia, en cuanto me alisto y cruzo por la puerta preparado para ir junto a Fitz pero oh sopresa, la motocicleta está llena de tierra. ¿Qué demonios?

Terrible Error © [TE #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora