"Nunca sola" †Terminada†

Parte 6: Necesito un tanque de oxígeno

Después de hablar por teléfono con Gabriela durante un largo rato, Isabella se preparo para dormir, coloco las grandes gafas que habían sido de su padre con sumo cuidado sobre el tocador. Aun no podía creer lo que había vivido esa tarde.

Taehyung deambulaba de un lado a otro de su antiguo cuarto.
¿Que diablos había sido eso? Fue la cerveza, el alcohol y el humo de la yerba que flotaba en el lugar.
Se repetía mil veces. Cuando recordaba y trataba de darle una explicación lógica a lo que le había ocurrido.
¿Por que diablos la imagen de esa chica lo había excitado tanto?

Esa noche, al reconocer el rostro de Lisa, salio tan pronto del lugar olvidándose por completo de Jungkook y Hoseok.

Por fin la habitación estuvo lista, así que era oficial, ya tenía nueva vivienda.

Isabella y Gabriela estudiaban para un examen semanal, pero no podían concentrarse sabiendo que los chicos estaban arriba.
—¿Por que no, simplemente subimos? —propuso Gabriela tan entusiasmada que la hizo reír.
—No podemos hacer eso, no puedo ir a cada momento a interrumpir— explicó Isabella
—¡Isaaaaaaaa! Por favor, tu los viste ayer, eres tan egoísta. —su amiga hizo un puchero cruzándose de brazos y dándole la espalda.
—Gaby, no subí sola Jin vino por mi— Isabella la tomo del brazo tratando de que regresara a mirarla.
—Eres tan mala.

Unos golpes en la puerta las interrumpió.
Al abrir, casi se ahoga al ver a Taehyung en su puerta, en cuanto la vio se hecho el cabello hacia atrás y la miro con el entrecejo fruncido.
—Hemos terminado— le informo— a partir de esta noche comenzare a vivir aquí.
A su espalda Hoseok sonreía alegre saludando con la mano, ella respondió.
—Es-esta bien— contestó la chica, a su espalda Gabriela asomaba la cabeza por encima de su hombro.
—Hoseok insistió en despedirse de ti— dijo Tae haciéndose aun lado.
Hoseok grito desde donde estaba.
—¡Nos vemos pronto Isabella!— sacudía la mano y su sonrisa era tan brillante como el sol del medio día.
—Nos vemos pronto Hoseok —Isabella salio de la casa y abrazo al chico quien no espera una demostración de afectó como esa.

Tae miraba airadamente la escena. Por lo visto le gustan todos mis amigos.

Cuando sus amigos se fueron, Tae se quedó en la puerta de su nuevo cuarto.
—Realmente quedo muy bien.— dijo en voz alta— ¿y si traigo a la chica?

Mas tarde de nuevo Taehyung estaba ante su puerta. Podría acostumbrarse a eso.
—¿Quieres venir y ver como quedó la habitación? —le dijo de manera inocente.
—¿puedo? ¿de verdad?— Isabella no podía creerselo.
—Claro después de todo es tu casa.
Se dijo que Taehyung tenia razón y lo siguió.

Isabella traía puestos pantalones cortos y una holgada camisa, su cabello revuelto y suelto.
Taehyung camino por delante de ella mientras le explicaba lo que habían hecho en la habitación.
—Solo dimos una mano de pintura y limpiamos el piso, puse lamparas nuevas...

El patio se veía realmente limpio, tiraron los cacharros viejos y habían pintado algunas macetas, también habían trasplantado plantas a macetas mas grandes y las habían puesto alrededor de la terraza, era increíble que hubiese sabido diferenciar entre las plantas de sol y sombra. El espacio para secar la ropa al sol, lo había movido lejos de la sombra del gran árbol. La mesa con incrustaciones de lozas la había dejado fuera de la habitación escoltada por dos pequeños bancos.
Al entrar se quedo con la boca abierta de inmediato, no podía creer que todo allí luciera tan bonito, el color en las paredes lo hacia ver mas luminoso, dejo el sillón bajo el gran ventanal y las lámparas le daban un tono cálido y acogedor, había algunas pinturas aquí y allá, el lugar parecía mas grande de lo que realmente era.
No podía creer que Tae tuviera tan buen gusto, aun que después de pensarlo un segundo y darse cuenta de que los muebles eran diferentes dedujo que quizá los chicos le habían prestado muebles.