"Nunca sola" †Terminada†

Capítulo 40

Desesperado y dolido, Taehyung va a casa de Isabella, pero antes pasa a la casa de Jimin (en donde se estaba quedando) por el cuadro, quería regresárselo, no quería nada de ella. La lluvia seguía cayendo sin tregua al llegar a la puerta; no vio luces encendidas, pensó que otra vez se le olvido encenderlas. Grito ante la puerta de la calle su nombre.

--¡ISABELLA! –No obtuvo respuesta, gritó una vez más -¡ISABELLA! –Grito una vez, y otra vez, llegando a la desesperación. Odió la idea de que ella pudiera estar dentro de la casa con ese tipo y por eso no saliera a verlo o aun peor, que se la hubiese llevado lejos de allí. Grito de nuevo su nombre, zarandeando la reja. Las personas que pasaban por la estrecha calle lo miraban pero a él no le importaba, debía comprar que Isabella estuviera en la casa y que no estuviera con Kai.

Kai buscaba en su closet ropa que Isabella pudiera utilizar para dormir y así poder quitarse la ropa mojada. Encontró unos pantalones deportivos que a él le quedan ajustados, una sudadera y una camiseta, también llevo un par de calcetines que eran muy calientitos y suaves, seguramente ha ella le gustarían.

Se encamino por el pasillo rumbo a la habitación que ocupaba la chica, justo en ese momento su móvil timbró. Cuando dejo a Isabella descansando, le había pedido a su chofer que vigilará la casa de la chica. Si lo estaba llamando era por que encontró algo fuera de lugar.

--Si, ¿que sucede?

--Es él chico, jefe. El hijo del maestro Kim. -Kai suspiro, recargo el cuerpo en la pared cercana y echo la cabeza hacia atrás. ¿Qué debía hacer con él? Era obvio que él chico estaba enamorado de Isabella, pero, ¿Quién no? Cuando conoces una chica así no la dejas ir tan fácil. Si, dejaba que ellos se vieran de nuevo, si tuvieran la oportunidad de hablar y aclarar los malentendidos, seguramente ella regresaría con él y entonces él la perdería. Y no le gustaba perder y no lo haría ante alguien como Kim Taehyung. Su chofer continuó hablando. –Hace un gran escándalo, llama a la señorita y está a punto de saltar la puerta de la calle.

Sin pensarlo más, Kai le ordeno:

-Llama a la policía – y, termino la llamada.

--¡Isabella, sé que estas allí, sal ahora mismo! ¡Isabella! –Tae, tenía ambas manos aferradas a la reja, tomo el cuadro y lo arrojo dentro, para enseguida comenzar a trepar por la reja. Una vez dentro, aporreo la puerta de entrada con las manos hechas puño y dando puntapiés.- ¡Isabella!- gritaba con desesperación y rabia, grito y golpeo la puerta hasta que se cansó, en su embriaguez se dio por vencido, se sentó al pie de la puerta sollozando, hasta que las luces de una patrulla lo hicieron levantarse, un oficial se acercó a la puerta de la calle.

--¡Hey! Estudiante, ¿es esta su casa? -le decía el oficial desde la distancia -Recibimos un reporte de vandalismo, ¿es esta su casa? -repitió de nuevo la pregunta, Tae lo miraba como si se tratara de algo irreal. El oficial llamo al aparato que colgaba de su chaleco.

Si querían atraparlo, debían sacarlo de allí primero.

Kai llama a la puerta de la habitación, no obtiene respuesta. Alarmado, abre para encontrarse a una Isabella completamente dormida, cobijada en la cama con la ropa mojada. 

--Isabella -susurra al entrar -cariño, te he traído ropa seca. -Kai se sienta al lado de ella en la cama. Quita el cabello húmedo que le cubre la cara.-- Isabella linda, despierta.

Su voz, ¿era esa su voz? y si abría los ojos ¿se encontraría con la adorable sonrisa de Taehyung? una, dos, tres. Al abrir los ojos, es la sonrisa confortable de Kai lo que ve.

--Te has dormido con la ropa empapa -le dice con preocupación  --te enfermaras --Kai medio voltea el cuerpo y le entrega una muda de ropa negra --Son pantalones deportivos y una camiseta, al menos te servirán para dormir esta noche.

Pero Isabella  no quería quedarse en la casa de Kai, quería irse a su casa, refugiarse allí entres sus cosas... pero no podía defraudarlo, él había hecho tanto por ella y por el señor Kim. Los ojos se le anegaron de lágrimas, otra vez.

--Gracias Kai, yo -yo no se como agradecerte tanto -dijo sosteniendo la ropa que le tendía, en ese momento Kai la abrazo.

--No tienes nada que agradecer, soy yo quien tiene mucho que agradecerte a ti, he sido feliz todos estos días que he pasado a tu lado, viendo como emergía de ti, esa magia tan maravillosa de tu ser para poder mostrarla a todos. Desde que posaste para los cuadros, hasta ahora has crecido tanto y me has dejado estar a tu lado para verlo, eres como una mariposa que a salido del capullo, mas hermosa y fuerte. 

No entendía por que Kai le estaba diciendo eso.

--Kai, yo... yo no sé que decir, yo no...

--No digas nada, por favor. Solo déjame permanecer a tu lado.

¿Acaso era esa una declaración? ¿era posible que Kai le estuviera confesando sus sentimientos? -Por un momento todo parecía confuso para ella. Kai se aparto un poco de ella para mirar su reacción y luego continuo hablando:

--Estoy enamorado de ti Isabella, creo que desde la primera vez que te vi, ahora que lo pienso realmente no se cuando paso así que asumo que fue en ese momento.-- Kai clavo su mirada ella.

Isabella no sabía que decir, ella aun esperaba de Taehyung una reacción que no fuera crueldad, aun esperaba, esperaba que pudieran hablar y aclarar las cosas, esa noche la había besado por pura maldad, para después echarle en cara su veneno.

--Sé que no sientes lo mismo por mi --Kai bajo la vista soltándola. Isabella no quería herirlo, no quería lastimar a nadie más con sus acciones-- Pero no soy yo quien hizo del amor un juego.

Las palabras de Kai se clavaron en su mente y en su corazón.

En la estación de policía, el señor Kim había pagado la fianza de su hijo.

--Gracias padre -Tae agradeció avergonzado a su padre con una media reverencia -Ahora me voy.-- justo cuando estaba por irse el señor Kim lo sujeto con fuerza del brazo, lo que provoco que regresara a mirarlo.

--Quiero que vivas conmigo, buscaremos un departamento donde podamos vivir juntos. No me dejes tu también.