Y ahí estábamos Jorge y yo sentados en el balcón de su habitación tomando aire fresco.
-No eres de muchas palabras ¿verdad? –dijo el guapo moreno sentado junto a mi.
-Soy reservada, o bueno ahora lo soy –comente, pues antes no era así recuerdo que era mucho mas divertida, y muy ruidosa.
-¿Cómo es que sabias de ese lugar? –pregunto mirándome de reojo.
-Cuando era pequeña, recuerdo que mama siempre le pedía a mi padre que nos llevara –pause tragando saliva- . Juntaba ropa de no solo de la que yo iba dejando si no también de la que la demás gente de daba, pues sabían que era lo que hacia con ella.
-Pues fue muy lindo, la verdad nunca había hecho algo así –dijo dejando escapar una risita- . ¿Cómo supiste que estaba ahí?
-Un amigo me recordó el camino –explique.
-Oye perdón por lo de anoche, Louis me explico…
-No te preocupes estabas ebrio, deberías de no tomar tanto –dije recargando todo mi peso sobre la silla.
-Gracias, y ¿Tienes novio? –cuestiono curioso.
-No, felizmente soltera –sonríe.
-Oye también me contaron que conociste a mi prima –dijo volteándome a ver rápidamente.
-Si una chica muy linda por cierto –dije volteando haciendo chocar su mirada con la mía.
-Si muy linda.
Luego de un rato llego Stephie la novia de Jorge, casi me muero al ver que tiene una blusa igual que la mía y para morir aun mas se le miraba muy bien, así que pensé en no estar ahí mientras ellos estaba en lo que sea que estaban juntos, tal vez y se le ocurría fastidiarme y la verdad no estaba de ánimos, así que mejor me fui a dar una vuelta por el soleado pueblo y mientras caminaba por ahí recordé el orfanatorio y recordé que cuando iba solía jugar mucho con un chico castaño, ¡Ja! Recuerdo también que solíamos decir que nunca nos separaríamos y que cuando fuéramos grandes nos casaríamos, a mi mama le parecía adorable y ahora que lo pienso a mí también me parece, pero ¿Cual era el nombre de tal personaje? Jonah, no era algo con ‘J’ ¿Cómo era? Oh Dios no me hagas esto y luego de pensar un rato este se infiltro en mi cabeza, ¡James! Era James ¡Claro! El adorable James, y luego de eso me tope con Facundo.
-¡Hey! Hola linda ¿Cómo estas? –me saludo dando un beso en mi mejilla.
-Bien ¿Cómo estas tu? –pregunte mientras comenzábamos a caminar.
-Bien también, iba a mi casa ¿Adonde ibas tu? –me pregunto volteándose un tanto a mi con sus manos en los bolsillos.
-No lo se a caminar por ahí solamente –dije encogiéndome de hombros.
-Suena aburrido, vamos a mi casa tengo algo de pizza congelada y un microondas que calienta muy bien –dijo divertido.
-Suena bien –dije riendo.
Llegamos hasta un hermoso departamento, muy pintoresco y muy Facu a lo que podía notar, calentó la pizza y abrió unas cervezas.
-Vivir solo deber ser genial –mencione antes de dar un sorbo a la botella con aquel líquido espumoso.
-No vivo solo, vivo con mi novia pero ella esta en San Francisco visitando a su hermana –dijo masticando.
-Oh que bien, y tu ¿No tienes hermanos o hermanas? –pregunte curiosa.
-No, nunca supe de mi familia estuve en un orfanato hasta los 15 hasta que me adoptaron una familia de mucho dinero que solo querían hacer una obra de caridad y me dieron este departamento –dijo encogiendo los hombros.
-¿En que orfanato estabas? –pregunte.
-En el de aquí ¿Por qué?
-Por que justo hoy fui, fui a dejar algo de ropa y me estaba acordando de un chico que jugaba mucho conmigo cuando iba y solo tenia 4 años era un castaño, su nombre era James ¿lo conociste? –pregunte con la esperanza de que supiera de quien le hablaba.
-¿Tu ibas y dejabas ropa todos los fines de semana? Con tus papas, siempre usabas vestidos muy bonitos e ibas bien peinadita –dijo el algo sorprendido- . Solías tomar de la mano a aquel castaño, y él jugaba contigo hasta a las muñecas.
-¡Si! ¿Cómo lo sabes? –pregunte con mi boca un tanto abierta.
-Por que yo soy James.
Me quede boquiabierta por unos segundos, y sacudí mi cabeza sin poder entender, James estaba ahí conmigo pero tan diferente, creo que después de todo aquello que solíamos decir era solo un juego pues el ya tenia una vida con su novia, pero que importa al menos era mi amigo.
-¿James? ¡No lo puedo creer! –me acerque a él lanzándome a abrazarlo.
-Entonces si eres esa Martina que conocí, siempre tuve la espinita –dijo abrazándome igual.
-¿Pero por qué ahora eres Facundo? –le pregunte alejándome un poco mirando su cara.
-Por que cuando me adoptaron me pusieron ese nombre, pero igual me llamo James solo que ahora soy Facundo James Gambande –dijo mostrando su dentadura.
Luego de eso pasamos un buen rato platicando de lo que fue nuestra infancia y de cómo jugábamos y era muy divertido, después me fui a casa ya estaba por oscurecer.
La casa parecía vacía, no se escuchaba ni un solo ruido, así que subí las escaleras y revise el cuarto de Jorge probablemente se habría ido de fiesta así que fui a asegurarme, toque la puerta varias veces y fueron sin respuesta así que abrí, voltee para la derecha y no vi nada y al voltear a la izquierda ahí estaba el mirándome un tanto sorprendido y con el seño fruncido, voltee mas debajo de su hermosa cara y no había nada su pecho estaba desnudo y mas abajo lo cubría una toalla blanca.
-¡Perdón! Creí que no estabas –dije avergonzada, me di la media vuelta para salir lo antes posible de ahí pero me detuvo tomándome del brazo, mi respiración chocando en su desnudo pecho y muy agitada.
-¿Segura que pensaste que no estaba? O ¿Me querías ver en toalla? –pregunto algo sarcástico y muy cerca de mi oído.
-¡Claro que no! Creí que no estabas, solo me quería asegurar pero veo que llegue en un mal momento –dije tensando mi cara pues mire por encima del hombro de Jorge y ahí estaba Stephie mirando recostada en el marco de la puerta del el baño envuelta en una toalla.
-Si en un mal momento –dijo acercándose abrazando a Jorge por atrás.
-Si yo mejor me voy –dije zafándome de Jorge.
Salí de ahí casi corriendo, y no se por qué no pude evitar sentir celos de Stephie al verla abrazar a Jorge, trate de dejar de pensar en eso y fui a la sala de televisión y encendí el televisor pero no había nada bueno en la tele, así que opte por poner un DVD ‘Presas del Diablo’ decía la portada ‘Woow que escalofriante’ pensé sarcástica.
Entre mas minutos pasaban de la película, mas interesante se ponía y más emocionada y asustada estaba yo, la luz del televisor me bañaba por completo y peleaba con la estúpida chica de la película diciéndole que tenia que hacer o casi gritando ‘¡No vayas por allá!’ la película termino y pensé ‘Que fin tan mas estúpido’ mis ojos se sintieron muy pesados y mis piernas muy cansadas así que cerré mis ojos, pero que va el sofá era muy cómodo y yo tenia mucho sueño.
A la mañana siguiente mire a mí alrededor y note que estaba en mi habitación ¿Cómo demonios llegue hasta acá? Me pregunte extrañada, pues no recordaba haber caminado hasta aquí, me di la vuelta y abrí la boca al ver que estaba con...
