Amigos y enemigos ( Noriel)

Capitulo 30

- ¡Déjenlo ya! - Grité y pararon.

- Lucía,  no lo entiendes,  yo estoy enamorado de ti - Dijo Bad bunny cogiendo mi mano.

- Ponte a la cola - Dijo Noriel irónico.

- Bad,  ¿ nos puedes dejar solos? Luego  hablaré contigo.

- Claro,  como quieras - Contestó y se fue.

- Se acabó,  yo no puedo seguir con esto - Dije soltando un grito ahogado- Me voy a ir a Espaňa.

- ¿ Qué? No,  porfavor,  no te vayas - Dijo Noriel acercándose a mi.

- Noriel,  no voy a negar que te he amado,  que te sigo amando y que probablemente te  amaré  por eso no puedo soportar cada vez que me mientes. - Tragué saliva - Nuestros estilos de vida son diferentes,  tu viajas mucho,  tienes una vida de artista y ,  en ella, no hay sitio para mi... Además tienes un hijo...- Una lágrima recorrió mi rostro.

- No es mi hijo, es de mi hermano pero yo me ocupo de él,  lo mantengo ,  Ardilla es demasiado jóven,  no le iba a dejar que con esa responsabilidad.

- ¿Entonces por qué ella dijo que era tuyo? - Pregunté desconfiada.

- Porque ella sigue absesionada conmigo ,  es una loca,  me cela,  pero desde que me engaňó con mi hermano se acabó todo con ella- Me miró a los ojos.

-¿ Por qué debería creerte? - Pregunté intentando contener las lágrimas.

- Porque eres la única mujer que amó y quiero formar una familia contigo,  quiero que seas la madre de mis hijos...Te lo vuelvo a repetir - Se arrodilló - ¿ Quieres ser mi esposa? 

- Noriel... Yo no soy mujer para ti... Yo no voy a ser la madre de tus hijos porque ya no puedo tener hijos - Rompí a llorar- Estaba embarazada y por el accidente lo perdí - Dije entre lágrimas.

- ¿ Qué?  ¿ Por qué no me lo dijiste?- Dijo  pálido.

- Eso no importa,  solo quiero olvidarlo.

- No me importa,  yo te sigo amando,  quiero que te cases conmigo,  te prometo que vas a ser feliz a mi lado - Sus ojos empezaron a brillarle.

- Noriel... Si de verdad me amas te irás y te olvidarás de mi,  serás feliz y seguirás con tu vida... Yo haré lo mismo - Aparte la vista,  no quería miralo, sabía que si lo hacía iba a derrumbarme.