12.

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Louis intentaba pegar ojo pero le era imposible, la verdad llevaba unos días que no conseguía conciliar bien el sueño y eso que siempre se había quedado dormido al acabar de follar con Danielle.

El sexo con su novia se había vuelto raro, ya no le satisfacía como antes y todo en ella le empezaba a agobiar un poco; su voz, su risa, incluso ya no la veía tan hermosa como tiempo atrás, era como si algo hubiese cambiado en él.

Se sentía nervioso, inquieto e incluso impasible a todo lo que tenía que ver con lo de fuera del trabajo, algo así como una sensación de vacío que lo ahogaba.

Harto ya de dar vueltas en la cama, se levantó y se vistió el boxer que estaba esparcido junto con toda la ropa por el suelo de la habitación, entonces se fue a la cocina, cogió una cerveza y su móvil, luego encendiendo un cigarrillo y salió al balcón.

Hacía una agradable brisa, el mes de julio estaba siendo agradable, se sentó en una de las tumbonas y se quedó mirando a la nada durante un bien rato.

Pasadas las tres de la madrugada, su móvil que tenía en silencio vibró, entonces miró en la pantalla y vio que era Harry aunque no le respondió, sino que lo dejó vibrar hasta que saltó el buzón de voz, era su noche libre y no quería saber nada del trabajo.

Tras unos minutos sintió curiosidad y abrió el buzón de voz.

...-Ho-Hola L-Louisss...., ¿E-Estás despierto?, b-bueno se-seguro que no hip...yo si y además ess-esstoy muuyy borrachoooo....a-así que s-seguro que mañana no me a-acordaré de esto hip,...emm Louuuuu..., quie-quiero que sepas que me...gust...

El rizado había parado de hablar, aunque el mensaje continuó unos segundos más, en ellos Louis escuchó un fuerte ruido seguido de un quejido y acto seguido se cortó.

El ojiazul dejó el móvil posado a su lado y siguió mirando a la nada, disfrutando de la soledad de la noche, aunque no pudo evitar mirar varias veces la pantalla sintiendo intranquilidad por su compañero.

—Maldita sea—dijo con fastidio finalmente marcando el número de Harry.

Tras varios intentos fallidos de comunicarse con él, se temió lo peor, así que rápidamente volvió a ka habitación, se puso los pantalones y una camiseta, cogió sus objetos personales y salió de la casa de Danielle.

Condujo desesperado hasta la casa de Harry, a continuación aparcó en la calle y corrió para llamar a su timbre pero este no le abrió, así que se apartó del portal y miró hacia las ventanas pero no había luz, ni tampoco tenía ninguna ventana abierta, por lo que volvió a intentar hablarle por teléfono.

Tras varios minutos intentando contactar aporreando la puerta, Louis desistió y decidió irse a casa, aunque estaba aún más preocupado por su compañero que anteriormente.

Se subió al coche y puso sus manos en el volante, soltando un profundo suspiro, estas le temblaban y su corazón parecía que quería salirsele del pecho e incluso de sus ojos cayeron un par de lágrimas.

...—No me hagas esto Harry, por favor—susurró angustiado, recordando los últimos minutos con su difunto compañero.

Cuando ya estuvo más tranquilo, empezó a pensar que seguro Harry estaría durmiendo en la cama o en el sofá la super borrachera que llevaba y por eso no lo escuchaba, entonces sonrió, arrancó el motor y se marchó a su casa.

Unos minutos después, dejó el coche delante de su edificio pero cuando iba hacia allí, divisó un bulto tirado a los pies de su portal, aunque pensó que sería algún vagabundo que había encogido ese lugar para pasar la noche.

Al acercarse comprobó que era alguien inconsciente y había sangre en la acera, entonces su corazón volvió a acelerarse cuando vio las manos del individuo en la cuales sostenía una botella de licor y un móvil.

Su alma se cayó al suelo cuando tras moverlo vio que en sus brazos había unos tatuajes que le eran conocidos, entonces lo giró y comprobó que era su compañero.

...- ¡Styles!...¡Oh Dios mío! ¿qué te pasó?, ¡Styles!...¡Styles!-gritó dándole suaves bofetadas en las mejillas.

-Lou...ho-hola hip....¿s-sabes?, creo que me he hip caí-caído...auch- balbuceó intentando levantarse.

El ojiazul suspiró aliviado pues vio que estaba consciente, entonces lo ayudó a ponerse de pie y puso un de los brazos de Harry alrededor de su cuello y lo sujetó por la cintura.

—E-Eres mi hé-héroe Louuuissss...

—Joder pero ¿qué demonios te ha pasado para beber así?, anda, vamos dentro, te curaré esa brecha que tienes en la frente.

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11. Policías - Larry Stylinson💕 Terminada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora