Tardó un cuarto de hora en llegar.
El timbre sonó, una sola vez, al cual acudí a abrir al instante.
Y ahí estaba.
Con profundas ojeras, pelo revuelto, y unas pintas horribles.
Pero aún a sí, estaba perfecto.
Y por una vez, escuché a mi corazón y hice lo que me llevaba pediendo desde el primer día en que le vi.
Le abracé con fuerza a la vez que él me envolvía con sus perfectos brazos, dejó pequeños besos en mi cabeza y acarició mi espalda con ternura.
-Ya estoy aquí mi pequeña, no tienes nada que temer.-dijo, y siguió acunándome como una niña.
Y en efecto, me dí cuenta de que no tenía nada de lo que temer ahora.
Aquellos brazos no podían hacer más que retransmitirme calidez, cariño, confianza.
Y amor.
Pasamos a sí un largo rato, hasta que decidí hablar.
-Siento haberte despertado.
Me separó un poco de su cuerpo para mirarme a los ojos.
-¿Despertado?
-Sí, despertado, tu voz era ronca y dormida.
Soltó una pequeña risita.
-No he dormido en toda la noche Alison.
Abrí los ojos sorprendida. ¿No había dormido?
-¿Por qué?
-Porque te dije cosas horribles de las cuales me he arrepentido mucho.
Le sonreí, con toda la dulzura que pude y volví a recostar la cabeza en su pecho.
-Yo tampoco pude dormir.
-¿Tú?¿Por qué?
-Porque no podía dejar de pensar en si volvería a verte algún día.
Le abracé más fuerte, no pensaba dejarle escapar nunca, y el sólo hecho de pensar que por un instante había estado a punto de perderle para siempre me arrebataba por completo el oxígeno.
-Hey.-Alcé la mirada.-Es muy difícil perderme de vista, y si no te lo crees sólo miranos ahora.
Sonreí tontamente y me dí cuenta de que lo que él decía al fin y al cabo era verdad.
-¿Quieres que vayamos a dar un paseo?
Hice un puchero mental, me encantaba estar totalmente pegada a él, pero caminar cogidos de la mano he de admitir que era una muy buena opción aparte.
-Me encantaría.
Y en cuestión de segundos estábamos paseando como hace tan sólo un día lo hicimos.
Con las manos agarradas, me atrevería a decir que, con más firmeza que la otra vez y mucha menos vergüenza.
Le miré de reojo, miraba a lo alto mientras tenía una sonrisa dibujada bajo el rostro.
Me pregunté por un instante si podía ser yo quien le hiciese estar a sí.
Como un loco enamorado al que le gusta estarlo.
Suspiré.
Ojalá...
Habló, con la mirada aún perdida.
-¿Te gusta todo esto?
-¿Qué? -Frené en seco. -¿Qué es "todo esto"?
-Ya sabes.-Se frotó la nuca con la mano que tenía libre de mi agarre.-Los paseos a estas horas, nuestros dedos enlazados, estar conmigo...
-No me gusta.-Me miró sorprendido.-Me enamora.
-Alison. ¿Quieres seguir con todo esto?
-Sí.-Dije segura.
-Hay muchas cosas que irás descubriendo y que puede que no te agraden en absoluto de mi. -Cogió aire.-Pero no me gustan las devoluciones, a sí que si decides seguir, no habrá marcha atrás.
Miré al suelo pensativa, y cuando volví a alzar la cabeza sabía perfectamente lo que quería.
-¿Como un viaje de tren sin vuelta?
-Exacto.
-Pues quiero tomar ese tren cuanto antes.
Esbozó una gigantesca sonrisa y centró la mirada en mis labios, volvió a mirarme a los ojos con una dura línea en la boca.
-¿Ocurre algo?
-Ah.-Soltó mi mano de su agarre.-Ya he esperado demasiado tiempo.
Se avalanzó hacia mi y unió sus labios a los mios con rapidez, me pegó a la pared y siguió moviendo su boca con fuerza, abrí un poco la mia para dejar pasar a su lengua y ahí comenzó una dura batalla entre el frío, el calor, el amor y la pasión. Sostuve mis brazos alrededor de su cuello y revolví su cabello oscuro, él torció ligeramente la cabeza para profundizar más el beso. Mordí su labió y gruñó para a continuación apretarme más contra la pared con su cintura, solté un pequeño gemido por el dolor de la presión entre su cuerpo y el muro y le atraje más a mi dejándome llevar por la clara emoción de que este momento tan soñado para mi al fin estubiese materializándose.
Estuvimos a sí hasta que los pulmones nos obligaron a parar para tomar aire.
Me miró avergonzado y se giró.
-Yo... Lo siento, no sé que demonios me ha pasado.
Sonreí y dejé que el rubor corriera por mis mejillas.
-Eso ha sido mágico.
-¿De verdad?
Se giró de nuevo y me miró interrogante, asentí.
-Podríamos repetir, la verdad. -Esbozó una tímida sonrisa y se sonrojó notablemente.
-¿Por qué no ahora mismo?-Susurró acercándose a mi y cogiendo mi cintura.
-Cierra ya esos labios y úsalos para besarme y dejarme de nuevo en las putas nubes, Morgan.
![](https://img.wattpad.com/cover/12120641-288-k843000.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Visions [ editando por finalización ]
Roman pour Adolescents· -Ella no existe, Luke. Y por lo que veo, al parecer, yo tampoco. Una adolescente depresiva. Un hombre enfermo. Y un destino incierto. ¿Cómo actuarías, si no pudieses ver lo que otros ojos ven, que tanto dolor le causan? Dos vidas diferentes, con e...