24. Desde que te has ido, las cosas han cambiado mucho.

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-*POV Luke*-


Aflojé el nudo de mi corbata y me miré serio al espejo, el comité de la empresa acababa de organizar una reunión improvisada en el momento más inoportuno. Gruñí y colocándome las mangas de la camisa salí de mi oficina. 

Últimamente las cosas aquí dentro han cambiado drásticamente, llevo una larga temporada sin pisar este edificio de mierda. No me trae más que recuerdos insólitos de algo que no consigo recordar del todo, y eso me causa una profunda frustración. Jeff se ha encargado de todo mientras estaba fuera, es un buen tío, no sé que haría si hubiese entrado en todo esto yo solo.

-¡Morgan, hijo de puta!-Sentí una fuerte palmada sobre mi espalda y acto seguido un brazo rodeando con fuerza mi cuello.-¡Ya pensaba que no ibas a venir!-Rió.

-A mi también me alegra verte, Jeff.-Dije mientras me zafaba de su agarre y golpeaba su hombro animadamente, he de admitir que me alegra inmensamente verle.

-¿Cómo es que has venido hoy? Te dije que podías quedarte en casa, que ya te informaría de las novedades por teléfono.

-Es mi trabajo, al fin y al cabo. No puedo desaparecer como si nada sin haber dado antes una mínima explicación.

Me observó con los ojos muy abiertos.

-¿Entonces...?¿Vuelves?

Negué con la cabeza y esbocé una sonrisa de suficiencia.

-Todo lo contrario. Me voy.

Su cara era todo un cuadro, frunció el ceño y me empujó por los hombros hasta un rincón más alejado de la sala.

-Luke, ¿estás loco? no puedes irte tío, no ahora.

-¿Por qué no?-Protesté.-Es mi vida, y es mi trabajo. Tengo derecho a dimitir cuando me de la gana.

-No lo entiendes Morgan.

-No, Jeff, eres tú quien no lo entiende.

-¿Luke Morgan y Jeff Dumphy?-Ambos nos giramos al escuchar la suave voz proveniente de nuestras espaldas, una mujer de pálida tez y labios color carmesí nos miraba con atención.-Se les reclama en la sala de juntas.

Me separé de Dumphy y me coloqué la chaqueta del traje, a continuación metí las manos en los bolsillos del pantalón y comencé a caminar. El hecho de que no tuviese el apoyo de mi mejor amigo y a la vez compañero de trabajo para esto, hacía recobrar sentimientos de abandono en mi interior. Uno de los peores dolores de todos. 

Todos los ojos captaron su atención en mi desde el momento en que abrí la puerta hasta que tomé asiento en mi lugar. Se lanzaban miradas inéditas, estupefactas, no se esperaban que esto ocurriese. Que tras tantos meses de haber desaparecido, el tío que podría despedirles con un simple chasqueo de dedos hubiese vuelto. Apoyé mis antebrazos sobre la cara e inmensa mesa de caoba y tras aclararme la garganta, hablé.

-Buenos días.

Los susurros de todos sonaron al mismo tiempo, hice un gesto con la mano para indicar silencio y fijé mi vista en Charlie, el Director de ventas y se puso en pie para comenzar a hablar.

-Empresa, hay muchos temas que tratar en el día de hoy. Y la gran mayoría son desfavorables para nosotros.-Alineó sus hojas contra la mesa.-En primer lugar, bienvenido de nuevo Morgan.-Negué con la cabeza seriamente, odiaba que me hiciesen la pelota.Volvió la mirada a sus hojas.-Las ventas han bajado desmesuradamente.

Jeff entró en la sala, echó un vistazo rápido y tras mirarme con seriedad tomó asiento.

MacGowan, el director financiero también se puso en pie, carraspeó y habló con profesionalidad.

-Me temo decirles que nuestro director de ventas no está exagerando, esto es un tema de completa relevancia, se han investigado las causas de este desafortunado incidente. No parecía haber nada destacable, salvo unos falsos rumores que por concordancia popular hemos calificado como falsos.

-¿Qué rumores MacGowan?-Pregunté.

-Sólo son falsos, jefe. No le de importancia.-Fruncí el ceño molesto, esas no son maneras de tratar a un superior. Decidí no decir nada por esta vez, no quería causar una discusión en mi último día.-Charlie buscó entre las hojas que tenía en la mesa y sonrió al encontrar lo que estaba buscando.

-Sheila solicita la baja por maternidad.

-¿Qué?-Sheila me miró, con el temor en sus ojos.-¿Qué vamos a hacer sin la directora de recursos humanos hasta que tengas al crío?-Pregunté con resignación, agachó la cabeza.- No eres precisamente una jardinera para solicitar una baja tan amplia, Sheila. Lo siento mucho pero...

-Sheila Dali se te concede la baja.-Dijo solemnemente Jeff, mi sorpresa no cabía en mi.

-¿Cómo has dicho Dumphy?

-He dicho que se le declara la baja por maternidad a Sheila Dali.-Repitió, abrí la boca son sorpresa, me levanté de la silla posando mis manos con fuerza sobre la mesa.-¡Jeff va a llevarnos semanas encontrar un sustituto para este puesto, ¿acaso te has vuelto loco?

-Desde que te has ido, las cosas han cambiado mucho. Morgan.

La furia se apoderó de mi.

-¡Sois todos unos cretinos!¡Ya comprendo porque la empresa ha ido a pique!-Aparté la silla y caminé con enfado hacia la salida, no quería seguir viendo el rostro de estos inútiles ni un segundo más. 

Pero cuando abrí la puerta, la voz de Jeff me frenó.

-Morgan. Los Hoffman han vuelto.

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Hey :'D ! Os lo prometí y aquí estoy, escribiendo para vosotros!

OMG SHJDGJDWJH TENIA TANTAS GANAS DE HACER ESTE CAPITULO! ME GUSTA MUCHO ACTUAR COMO LUKE; es un asqueroso y precioso hijo de p*ta.

Bueno ¿Qué os parece esto de la rutina, y os ha gustado el capítulo? No olvidéis comentar lo que os ha parecido en la cajita de los comentarios ricuritas mias!

Y ahora...

El momento que todos lleváis tanto tiempo esperando...

BELEPREGUNTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA! SDKUHDSJK!

¿Cuál es vuestro perfume o aroma preferido?

Si me gusta alguna de las opciones, la incluiré en el próximo capítulo en uno de los personajes. Pero

¿EN QUIEN?

 AAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHH ADIVINAS

:D HASTA LA PRÓXIMA SEMANA Y VOY A EMPEZAR A DEDICAR CAPÍTULOS! COMENTAD SI QUEREIS UNA DEDICATORIA! 

Mil besitos sabor a zanahoria y mil zanahorias con sabor a beso!

Os ama: Belén <3 ( O VILEM) ¬¬ 

Visions [ editando por finalización ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora