Disfrútenlo tanto como yo disfrute de escribirlo...
Si por asomo, alguna vez sospechas de estar enamorado o pretendes estarlo, tienes que saber algo muy importante; El amor es como la muerte, no puedes escapar de el.
Es una asquerosa y detestable perra, que sin importar qué ni cómo, te atrapa en sus redes y no te deja escapar. Y si por asomo lo consigues, no sales indemne de ello.
Aunque para ser sincera, no es que me haya resistido demasiado. Me enamoré, lo acepté e intente hacer algo con ello.
Pero como todo en la vida, el amor no es una cosa sencilla.
Hay altos y bajos. Lágrimas y risas. Felicidad y dolor. Arcoíris y tormentas.
Pero al final del día, todo eso vale la pena por estar con la persona a la que amas. Todo eso pierde importancia cuando ves a esa persona, te sonríe, y te dice que te ama.
Aunque hay ocasiones en la vida, en que el amor no es suficiente. Eso es algo que por supuesto nadie te cuenta. Nadie te dice que con amor no puedes conquistar el mundo. Que el amor no lo cura todo. Que el amor no compensa todo.
El amor es fuerte, pero no inmortal. Es algo que tienes que cuidar y atesorar, porque de otra forma termina por desgastarse, marchitarse y morirse.
Y no es justo que algo tan hermoso como el amor termine seco y olvidado.
Pero para evitar que ese amor, ese sentimiento tan arrollador y cálido se muera, tienes que tomar una decisión.
¿Qué estas dispuesta a arriesgar por tenerlo contigo?
¿Realmente vale la pena, después de todo, seguir intentándolo?
Nadie va a darte esas respuestas, porque solo tú las conoces. Y el camino para conseguirlas es difícil y la mayor parte del tiempo doloroso.
Cuando me di cuenta de que estaba enamorada, pensé que todo sería sencillo. No perfecto, pero un poco más sencillo.
¿Pero cuándo algo que vale la pena ha sido sencillo?
Entonces, ahora tienes que decidir, porque el amor no espera ni el tiempo perdona.
Ahora, tenía que decidir; ¿Era más fuerte mi amor por Ian que mis miedos a un futuro incierto?
(***)
¿Por qué simplemente no puedes salir de mi cabeza y dejarme dormir por una maldita vez, Ian Goodwins?
En solo cinco meses, mi vida se había convertido en una vorágine.
En tan solo cuatro meses, tendría un bebé al que cuidar y amar por el resto de mi vida. Sería responsable de la vida de una pequeña e indefensa criatura, la encargada de enseñarle como se supone que debía comportarse frente al mundo. Introducirlo al mundo.
Nadie puede prepararte para eso. ¡Ni si quiera estaba segura de saber hacerlo para mí misma!
Pero estaba dispuesta a hacerlo. Porque junto encontraríamos el camino correcto.
Y sí, hablaba en plural, porque este camino no era en solitario. Porque sin importar si Ian y yo seguíamos juntos, siempre tendríamos a Erick, y esa era la unión más grande e irrompible entre dos seres humanos.
Pero quería cambiar esa incertidumbre de si estaríamos alguna vez juntos o no. Quería tener algo certero. Algo, que si bien no era seguro, era lo suficientemente importante para mí como para luchar por ello.
Somos humanos, cometemos errores, herimos a quienes amamos sin quererlo y luchamos por enmendar esos errores, curar esas heridas. Luchamos porque creemos que vale la pena, porque sentimos que los aciertos son mayores y más satisfactorios que los errores. Porque cada uno de los buenos momentos vividos eclipsan a los malos.
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My Complement. MADLY IN LOVE #1
RomanceCindy nunca estuvo hecha para las responsabilidades. Su vida era un desastre, no tenía trabajo y tenía que mantener a su hermano menor. Pero se había propuesto cambiar, ser más responsable y madurar. Aunque lo que definitivamente no se propuso fue...