❄Capítulo 6½❄

1.9K 205 4
                                    


Cuando llegué al patio me detuve un momento para observar a mi hermano y su novia allí sentados tomados de las manos, charlando y seguramente planeando estupideces como todos los idiotas enamorados que creen que la vida es chispas y colores. Estúpidos.

- ¿Celos? -di un salto al sentir el calor en mi cuello y al girarme me encontré con el rostro del Príncipe. Ya decía yo que había demasiada paz y felicidad-Buenas tardes Sir Rohan

Saludó a mi querido gatito que lo miro de reojo algo desconfiado por el afecto del Príncipe.

-¿De mi hermano? No, lástima mejor dicho -hice una mueca y él suspiró una risa irónica.

- En lo personal creo que podría comprenderte, e oído un poco sobre Katherine y no es una "Princesa" del todo -lo miré.

- ¿A que te refieres? -el Príncipe tomó mi brazo para atraerme a él.

- Tu misma te darás cuenta en poco tiempo. Supongo.

- ¿Aún me consideras una tonta después de haberte burlado en el duelo?

- Jamás te he considerado una tonta, ni siquiera cuando nos conocimos. Ser inocente no es ser tonto. Ahora vamos allá antes que se vuelvan babosos de más y tengamos que soportar un té con desagradables muestras de afecto.

- Los Reyes no lo quieran -suspire y el me tomó la mano para llevarme hacia la mesa preparada en el patio invernal. Al observar que juego de té y la vajilla era de porcelana, quedé algo perdida y confundida a la vez porque nosotros jamás tuvimos esto, todo es Hielo de cristal ya que no consumimos nada Cálido que pudiera afectarle. También habían pequeños pastelitos sobre bandejas de plata y algunas galletitas tanto dulces como saladas.

- ¿Que se supone que es esto? -observé la mesa muy ofendida. Luego el pequeño vapor que salía de la tetera me hizo saber lo que significaba este cambio- ¿Té caliente? ¿Desde cuando se sirve eso aquí?

- Siempre hay una primera vez hermanita. No seas tan limitada- dijo Bengi.

- Pensé que sería mas interesante y por eso le pedí a Benjamin que sirviéramos té cálido para que ustedes puedan probar, espero que no te moleste -Kathy me sonrió descaradamente y apreté la mandíbula con fuerza de la bronca.

- Por supuesto que es interesante pero no todos compartimos los mismos gustos por alguna razón princesa Katherine -Harold me defendió porque yo estaba muy ocupada conteniendo mis impulsos de matarla ahora mismo.

- ¡Oh! Lo siento pero creí que sería muy oportuno ya que cuando Colder valla contigo a Burnham dudo que vayan a tener té helado y quería ayudarla para que pudiera comenzar a adaptarse desde ahora con lo más simple -sonrió tan falsamente que me dieron ganas de sacarle todos los dientes de un golpe pero no soy tan salvaje como para dejarme llevar por esos impulsos.

- Yo... -quiso ayudarme otra ves pero no vale la pena continuar discutiendo con esa tonta, ahora que estoy mas tranquila pude ser la siguiente en hablar.

- Tienes razón Kathy, tendré que comenzar a acostumbrarme desde ahora a tolerar ésta clase de... Alimentos -me senté y Harold acercó mi silla a la mesa, luego él se acomodó a mi lado y me miró de reojo. Lo que más me molesta es que Bengi está completamente embobado por ella, se está dejando llevar y manipular por sus estupideces! Él no tiene porqué beber esto y además, es dañino para nosotros consumir cosas cálidas, jamás lo hemos hecho y nuestros paladares no están acostumbrados.

-Bien, supongo que han pasado una tarde agradable -el príncipe cálido bebió sin problema porque a él si le agradaba ésta clase de cosas, mientras yo observaba detenidamente el vapor que salía de mi tasa. Hice tiempo para esperar a que se enfriara, comiendo los pastelillos y las galletas que sorprendentemente estaban muy buenos, de que estarán hechos? Nuestros cocineros nunca hicieron esta clase de cosas.

Skaði. The Goddess of winter.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora