2.2

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Al día siguiente me paseaba hacia adelante y hacia atrás cuando Lucas fue al depósito. Esperaba a que volviera, se enfadara, destruyera cosas para liberar su ira, pero no lo hizo. Le tomó un par de horas hasta que pude ver a algunos de sus hombres saliendo del viejo edificio, luciendo un poco derrotados. Y así mismo se vio él tan pronto como entró a la casa. No me molesté en preguntarle lo que estaba pasando, puesto que ya sabía la razón de su infelicidad.

—¿Hunter? —preguntó con calma y yo tarareé en respuesta—. ¿Tienes algo que ver con esto? —Lucas cuestionó, sin levantar la voz ni mostrar ninguna muestra de ira hacia mí.

—¿Qué? —Mi corazón comenzó a palpitar más fuerte, aunque no era por ninguna razón.

No fue mi culpa que lo hubiesen encontrado y se lo llevasen al distrito uno, yo solo había visto todo el encuentro y decidí no contarle a Lucas.

—Bieber desapareció. Solo quiero saber si tienes algo que ver con esto. —Lucas todavía estaba demasiado calmado. En otros días ya se habría descargado conmigo.

—¿Hablas en serio, Lucas? —Levanté la ceja, cruzando los brazos sobre mi pecho, intentando actuar tranquila con sus acusaciones.

—Bueno, tengo que preguntar. Parecías muy a la defensiva acerca de Bieber anoche y ahora de repente se ha ido y no lo encontramos en ningún lado —se fue apagando. Parecía como si para él fuera de todo menos fácil preguntarme esto.

—Me puse a la defensiva porque no quería que te pusieras en peligro. No hice nada. No es mi culpa que seas incapaz de mantener como rehén a un chico.

—Tenía que preguntarte...

—No, Lucas. No debiste. Tendrías que saber que yo no tengo nada que ver en todo esto —interrumpiéndolo, caminé hacia la cocina y me serví un vaso de agua.

—Lo siento, Hunter. No debí haberte acusado de algo que claramente no has hecho. —Lucas sonaba sincero por una vez, quizás era la conmoción que todavía tenía dentro.

—Sí, da igual. —Me encogí de hombros, tragándome el agua y corriendo escaleras arriba antes de que Lucas pudiera decirme otra cosa. Sabía que quería, pero no le iba a dar la oportunidad para que lo hiciera.

Estos días nos habiamos distanciado, no me había dicho nada; decidí guardarme cosas también. Pero eso no cambiaba el hecho de que estábamos demasiado distanciados como hermanos. Sabía que a veces era demasiado para él, equilibrar el tener una novia —con la cual yo estaba segura de que quería casarse pronto— y una irritante hermanita menor que es malcriada de vez en cuando, de verdad. Desde que nuestro padre nos dejó, él había tenido que encargarse de todo lo que sucedía, y podía ser demasiado. Lo admiraba por eso, por lo que hizo por su familia hasta ahora y por lo que iba a seguir haciendo.

E incluso aunque la situación fuera buena para mí por el momento, ya que él ya no me hacía demasiadas preguntas y yo no tenía que mentirle tan seguido, sentía que lo extrañaba, que fuera él mismo.

No sabía cómo se sentía Sara, ya que pasaba la mayoría del tiempo en su propia casa, pero podía decir que su urgencia de acabar con Bieber junto a Clyde le estaba irritando también.

Creo que solo tenía que hablar con ella, asegurarme que entendiese que él estaba en una situación difícil ahora mismo y que no debería ser tan dura con él por el momento.

En cuanto entré a mi cuarto, lo primero que hice fue revisar mi teléfono. Y para ser honesta, me sorprendió lo que vi.

Laura, la amiga que tan amablemente había dejado de hablarme después de que le dije todo acerca de Justin y yo, decidió escribirme de nuevo. Incluso tenía una llamada perdida suya, y no pude evitar pensar que algo no estaba bien, ya que no esperaba que ella hiciera esto.

2043 → j.b → spanish versionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora