You're My Romeo

De mal en peor...

Después de haber bebido todas las reservas del bar, mi cordura estaba muy lejos de lo normal, el efecto del alcohol me había consumido hace más de una hora y para mi mala suerte estaba dando vueltas como idiota por todo el lugar, escapando de YoungJae y en busca de DaeHyun, misión fallida. O estaba muy ebria para reconocer a mis amigos o estaba simplemente muy ebria para todo. Luego de unos minutos, por fin logre escabullirme por entremedio de la gente y perder de vista al idiota.

- Hola... chicos - trate de soñar entendible mientras saludaba al grupo de chicos a mi lado, gracias al maldito alcohol no logre notar como uno de los idiotas a mi lado bailaba como sí apenas hubiese aprendido a caminar hace un par de segundos, del asco.

- ¿Qué hace una belleza tan solitaria? - pregunto uno de ellos, arrastrando las palabras. Aparente ebriedad.

- ¿No es obvio? buscando entretención - respondí sonriendo. Mientras uno de ellos se acercaba tomándome la cadera con una de sus manos. Comencé a moverme al ritmo de la canción, estaba tan cerca que podía sentir su horrible aliento a alcohol.

Si no estuviera tan ebria, juraría que la mirada de YoungJae me vigilaba con enfado desde la barra. Pero no quería pensar en el, quería olvidarlo, cosa que ni el alcohol logro.

- Bebe... - dijo, el chico entregándome un vaso de lo que aparentemente era vodka o ron o una mezcla extraña.

- ¿Qué mierda es esto? - pregunte, sintiendo el olor del líquido en el vaso, bastante fuerte. Sin importancia acerque el alcohol a mi boca.

- Basta... - dijo YoungJae, tomando el vaso y alejándome del chico. ¿En qué momento se había acercado?

- ¡YoungJae! - grite, imitando el tono de la princesita - Te estaba esperando, porque no bailamos - grite, riendo. - Dame eso - exigí, tratando de quitar el vaso de vodka que me había quitado de las manos.

- Grace...

- ¡Déjame tomar idiota! - reproche con enfado, cambiando abruptamente mi carácter.

- Es suficiente, estoy harto de tener que protegerte - contesto enfadado, dándole el vaso a uno de los chicos del grupo. luego de eso me tomo del brazo para comenzar a jalarme a la salida.

- Aishh... ¡Suéltame! Quien te pidió que me protegieras, ¡Estúpido YoungJae! - dije, soltándome agresivamente de sus brazos - ¡Es más, deberías irte con tu princesita y dejarme tranquila de una vez por todas! - conteste, soltándome finalmente de sus manos, pero él hizo caso omiso y volvió a tomarme.

- Cállate - reprocho, sin dejar de jalar a la salida.

- ¡Porque tendrías que preocuparte de una prostituta, demonios! - en ese instante se paró en seco fulminándome con la mirada.

- No vuelvas a decir esa estupidez - dijo, molesto.

- Ey por que no dejas en paz a la señorita. - interrumpió uno de los chicos que estaba en el grupo, al parecer nos había seguido.

- No te metas - respondió YoungJae cortante, ignorándolo sin dejar de mirarme.

- ¿Nena estás bien? - me pregunto el chico.

- ¡eres un maldito bipolar! ¿por qué no lo dijiste cuando estaba tu estúpida noviecita? - le grite a YoungJae ignorando al chico. Una mescal de sentimientos se posesiono en mi pecho, me descompuse y la rabia me hervía la piel, sin previo aviso comenzaron a caer las lágrimas en mi rostro, haciéndome estallar. - Estoy harta - susurre, mordiéndome el labio inferior para lograr calmarme, pero nada funcionaba. No podía más con la presión, realmente todo esto me estaba afectando. No note cómo las personas al rededor de nosotros estaban mirando como si fuera la mejor película de drama. - Vámonos de aquí - le dije al chico a mi lado entre sollozos, ni siquiera sabía quién mierda era, pero necesitaba alejarme de YoungJae.